Oscura Obsesión

Capítulo 21

DYLAN

Cuando llegue a casa después de haber visto a Ashley con otro, no sabía qué hacer, que pensar o que decir, tenía este increíble departamento y al fin me había quitado de encima a mi padre y había podido acceder a mi correo mediante una conexión segura, había visto todos su emails diciendo que me amaba, que me extrañaba y que volviera por ella, y cuando lo hice la vi llegar con Jordán, ese maldito infeliz solo había esperado a que me fuera para salir con mi novia, y lo peor de todo, estaban acostándose, ni yo había hecho eso, no me faltaban ofertas de las chicas con las que luego salíamos, pero jamás había podido hacerle algo así a Ashley, no a ella, ella había sido todo para mí en algún momento y se merecía que yo fuera mejor por ella, pero después de eso, después de enterarme que ella no había esperado nada y que me había mandado esos correos diciéndome puras mentiras, no estaba dispuesto a seguir considerándola para nada, si ella había continuado con su vida sin mirar atrás, yo también lo haría.

Tome mi teléfono y escribí un mensaje rápido.

"Quieres venir esta noche, solo estaremos tu yo, podemos divertirnos como más te guste"

Recibí una respuesta inmediata que decía.

"Voy para allá, llego en 20 minutos"

Me cambie de ropa y saque una botella de champaña del refrigerador, la puse en una hielera y saque dos copas, puse algo de música y espere a que llamaran a la puerta.

Veinticinco minutos después llamaron a la puerta, era una morena deslumbrante, alta, buen cuerpo, cabello largo y lacio que le caía hasta la cintura, llevaba un vestido negro tan ajustado que me dejo ver cada una de las curvas de su cuerpo, llevaba unos zapatos rojos bastante altos atados a sus esbeltos tobillos.

Me saludo con un besos en los labios, y por primera vez la tome de la cintura y la jale hacia mí, besándola, cuando me despegue de ella, su lápiz labial rojo ya no estaba solo en sus voluminosos y gruesos labios, estaba en su rostro por culpa de mis besos, y quizá también en el mío.

- Vanessa, me alegra que vineras, te estaba esperando – dije y la jale hacia el sillón

- Me alegra que llamaras, estaba tan aburrida en mi hotel – dijo con una voz tan cargada de sensualidad

- ¿Quieres una copa? – pregunte coqueteando

- Lo que quieras darme Dyl – bromeo de una manera muy sexy

- Tu, siempre tan sincera – dije extendiéndole la copa llena

- Así soy yo, pero dime, que te hizo llamarme esta ocasión, tienes mi numero hace un par de meses y siempre te llamo cada vez que estoy en Londres y solo llamas para invitarme a fiestas, y no es que no me gusten tus fiestas, pero siempre he querido una fiesta privada solo contigo – dijo mientras se acercaba más y más a mi

- Bueno, la gente cambia, te llame, porque efectivamente, tengo una fiesta privada aquí para los dos – dije coqueteando mientras agitaba entre mis dedos una bolsita de cocaína

- Vaya, pero si es lo que más me gusta de ti Bearsley, siempre sabes lo que una chica quiere – dijo arrebatándomela y al hacer eso se puso sobre mi

- Hoy será diferente, te lo aseguro, la disfrutaras más – dije provocándola al poner mi mano cerca de su trasero

- Estoy segura de eso Bears – dijo mientras pasaba su mano por mi pierna y subiéndola hasta mi ya abultado paquete

En cuanto tuvo su mano ahí y sentí su agarre, me puse sobre ella y comencé a besarla y a acariciarla por todos lados, sentía el contacto de mi mano con su piel morena y eso me ponía más y más caliente todavía.