Dangerously | Ethan Dolan (terminada)

30

Maratón 2/5

Lunes.
Me gustaría decir lo mismo de siempre. Que el día de hoy, las cosas eran aburridas y normales como suelen ser. Que las clases eran comunes y mis caminatas por el pasillo también.
Pero no, no era normal. Apenas pasaba por el pasillo y las personas me miraban de una manera rara. En clases, en la cafeteria, en todos lados.

El problema es que no sabía por qué. Me miraban riendo o susurrando, y yo sólo fruncía el ceño y trataba de caminar más rápido. Me sentía verdaderamente abrumada, exigiendo una buena razón por la cual la mayoría actuaban así.

Llegué a la clase de literatura. Dónde me senté hasta adelante y escuché mi nombre en las conversaciones de los idiotas de atrás. Necesitaba saber qué sucedía.

Antes de que empezara la clase, Ethan entró y sin pensarlo dos veces se sentó a mi lado con esa típica sonrisa.

—Hola —saludó

—Hola —dije, estaba más concentrada en las conversaciones de atrás.

El profesor entró y por suerte las conversaciones dejaron de oírse. Se paró delante de la pizarra y comenzó a dar su clase. Ya necesitaba algo normal y aburrido en mi día.

Me recargué sobre mis codos y puse más atención al reloj.

—¿Estas libre hoy en la tarde? —como siempre, Ethan interrumpió mis pensamientos, así que me giré levemente para verlo.

—Amm, sí, supongo —arrugué la frente. —¿por qué? —hablé bajito, no quería que el profesor nos escuchara.

—Bueno, hoy saldré con los chicos... deberías venir. Jugaremos bolos.

—No creo que mamá me dé permiso —negué con la cabeza.

—Jessica irá —respondió y maldije en mi interior. —supongo que tú también tienes permiso.

No me molestaba salir con Ethan. De hecho era lo contrario, me gustaba estar con él. Pero algo muy diferente era estar con sus amigos, contando a Megan y a mi hermana.
Como varias veces he dicho, no son mi ambiente y no termino de sentirme cómoda con ellos.

—Ah, perfecto.

Mi limité a fingir una sonrisa y al segundo el timbre se hizo presente en el aula. Todos salieron acelerando su paso, sin embargo yo me levanté y salí con calma. Y con Ethan a un lado.

—Usualmente formamos parejas, ¿qué tan buena eres en bolos? —dijo y agradecí que creara un tema de conversación, ya que el silencio empezaba a ser incomodo.

—Nunca he jugado, supongo que... me enseñarás —comencé a entrecortarme ya que las obvias miradas de las personas volvieron a mí al pasar por el pasillo.

Me encogí un poco y me sentí nerviosa. Concentrarme en la conversación me resultó más difícil. Era tan obvio que Ethan también lo había notado.

—¿Estas bien? —preguntó apretando la mandíbula y frunciendo el ceño.

—Sí —asentí y traté de no mirar nada mas que sus ojos.

—¿Se les perdió algo? —Ethan preguntó en voz alta a varios chicos que seguían mirándome, mientras que yo bajé la mirada.

La alcé un poco al notar silencio y ya no había nadie, sólo éramos él y yo en el pasillo. Los demás se habían ido, y lo entiendo, Ethan se veía molesto, tanto que hasta a mí me dio miedo.

—Ignóralos... —me sonrió y de alguna manera me sentí mejor.

Lo he dicho mil veces, pero debería hacer una lista de todos los efectos que Ethan provoca en mí en cuestión de segundos.