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Narra Steny:

—No sé por qué pero estoy nerviosa— dije una vez que nos montamos en el coche.
—No tienes de qué preocuparte cielo— me dijo Clady mientras me acariciaba el muslo.
—La victoria está asegurada— dijo Éneon mientras se acomodaba— no hay por qué temer nada.

Se hizo el silencio.

Íbamos en el coche de Naúm hacia el juzgado, cuando llegamos, aparcó en la acera de enfrente ya que no había casi ningún coche aparcado por aquella zona.

—¡Al fin habéis llegado!— gritó un hombre algo extresado— la sesión esta a punto de comenzar.
—Tranquilo Odín, ya estamos aquí— le tranquilizó Isedo mientras que lo saludaba dándole un apretón de manos.
—Venga, deprisa, no hay tiempo que perder— dijo subiendo las escaleras que habían en la entrada.

Todos le miramos algo tensos y lo seguimos, no me dio tiempo a entrar en detalles de dónde nos encontrábamos, aquel hombre andaba muy rápido y nosotros tuvimos que alcanzarlo casi corriendo.
Se paró ante una puerta y nos cedió el paso antes a nosotros para después entrar él.

Nos dirigimos hacia un mini pasillo que estaba dividido por asientos, nuestro abogado se sentó en la parte de la derecha justamente enfrente de donde estába la silla donde se sentarían el acusado y los testigos.

Tragué saliva.

Todos se sentaron en los bancos excepto yo, quien fue llevada de la mano hacia la silla que había al lado del abogado.
Ahora si que estaba demasiado agobiada.

Al instante, entró por la puerta tanto el juez como otro hombre, el cual suponía que era el abogado de Siul, este me miró con cierta maldad mientras el juez se colocaba en su lugar y con un golpe con el martillo dio comienzo.

—Que pase el acusado— dijo el juez mientras que miraba por una pequeña puerta que había en el interior de la sala la cual era vigilada por dos policías.

Entró Siul, con un mono naranja, con los pies y manos esposadas, mientras que era agarrado de los brazos por otros dos policías.

De nuevo, tragué saliva.

Lo sentaron al lado del juez y al instante sus ojos azules se fijaron en mi.
Lo miré expectante.

—¿De qué se le acusa?— preguntó el juez.
—Asesinato y maltrato— dijo mi abogado.

Se oyó una pequeña risa provocada por el otro abogado, después se hizo el silencio.

Mi abogado se levantó y se dirigió ante Siul desafiante.

—¿Promete decir la verdad y nada más que la verdad?— le preguntó el juez a Siul.
—Lo prometo— respondió.
—Proceda— le dijo el juez a mi abogado para que comenzara.
—Veamos...— pensó en voz alta— ¿es verdad que maltrató a Steny en un par de ocasiones?— se quedó firme ante él.
—Si— contestó.

El juez tomó apuntes.

—¿Por qué lo hizo?.
—Una vez porque estaba borracho y la otra para calmarla— dijo seriamente sin quitarme la vista de encima.
—Señor Wilken, eso no es motivo para haberla tratado de tal manera— le reprochó mi abogado.

Comenzaba a dolerme la barriga.

—¿Es cierto que mató a sus padres en un accidente de coche?
—Si.

Sentí un nudo en el estómago.

—¿Debo recordarle que le pusieron una orden de alejamiento?— dejó caer en una pregunta, a lo que el juez abrió los ojos expectante.
—No señor— afirmó Siul.
—¿Qué me dice de los asesinatos que cometiste?— se hizo el silencio— Milda Meins , Dail Buecae , Laumi Lenden, el señor Neol Timber, Nifeo Gremil y Melune Dilen.
—Protesto señoría— exclamó de repente el otro abogado.

El juez le miró.

—Adelante— le dio paso.

Este sacó de su maletín una bolsa de plástico donde dentro había un bote, un trapo y una navaja con restos de sangre.

—Son pruebas— aclaró— se detectó huellas dactilares de Nifeo Gremil  en cada una de estas cosas— le tendió la bolsa a mi abogado mientras se reía en su cara— la sangre de la navaja pertenece a Melune Dilen,  por lo que se llegó a la conclusión de que Nifeo Gremil, mató a Melune Dilen.

Mientras que dijo esto último se acercó a su mesa para coger unos papeles y entregárselos al juez.

—Aqui tiene toda la informacion señoría— dijo mientras me miraba de reojo.

Me comenzaba a dar miedo.

Pasó el tiempo, mi abogado había terminado con las preguntas y al final no hizo falta llevar a mis amigos al estrado.

El juez estuvo apunto de dar el benedicto, pero Siul le interrumpió.

—Señoría, ¿me permite hablar con mi novia Steny?— le preguntó al juez.

¿Novia?, ¿en serio?

Este no muy seguro acabó aceptando su petición y Siul se levantó para acercarse a mí, los policías iban directos a pararle, pero su abogado los detuvo mientras que miraba cómplice al juez.

Aquí pasaba algo.

Por inercia me levanté del asiento sobresaltada, pero los ojos de Siul ante mi hicieron que me quedara estática en el sitio.

—Steny— me llamó.

Intenté guardar la compostura.

Vi que se acercó más a mi para finalmente darme un abrazo el cual no correspondí.

—Steny— me volvió a nombrar— te quiero— me susurró al oído.

Me separé de él.
Este chico me confundía.

—Siul— le llamé— olvídate de mí — le dije furiosa.
—¿Qué?, ¿por qué? — me preguntó confundido— sabes que no puedo hacer eso— intentó acariciarme pero le evité.
—Siul— cogí aire— terminamos— le dije tajante.

Su semblante cambió a uno serio, el juez al ver que estábamos todos en silencio decidió dar el beredicto.

—Siul Wilken, queda condenado a  cinco años de cárcel— dio dos golpes con el martillo— se levanta la sesión.

Estaba dispuesta a irme de allí y perderlo de vista, los policías fueron a por Siul, pero este acabó reaccionando y me cogió bruscamente del brazo.

—¡NO PUEDES HACERME ESTO!— gritó.

Los policías hicieron fuerza, pero él los evitaba, su abogado ya se había ido, en cambio mis amigos estaban a la defensiva y mi abogado estático.

—Siul Wilken— le llamó el juez— la sesión ha terminado — alzó la voz.
—¡STENY, NO PUEDES DEJARME!— volvió a gritarme mientras me zarandeaba del brazo.
—¡Suéltala!— le gritó Éneon.
—¿¡Es a él a quien quieres!?— miró a Éneon para después mirarme a mí

Estaba sustada, el brazo me dolía.

—¡Llévenselo!— exclamó el juez molesto.

Los policías lo empujaban y Siul me empujaba hacia él con su agarre.

Éneon me deshizo del agarre de Siul y este finalmente fue arrastrado por los.policías.

—¡ESTO NO VA A QUEDAR ASÍ STENY!— gritó furioso— ¡VENDRÉ A POR TÍ Y LO MATARÉ!— cerraron la puerta de un portazo.

¿Te acuerdas de mi? TRILOGÍA VENGANZA II (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora