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Narra Éneon :

Se sentó junto a Steny y dejó sobre la camilla donde se encontraba ella bolsas de picoteo de las máquinas espendedoras que había en la cafetería del hospital junto con alguna que otra botella de agua.
Le tendió una botella de agua a Steny.

—Ten— le dijo con una sonrisa.

Ella, algo temerosa y con poca fuerza alzó la mano para cogerla, Siul al ver su mal estado, se la abrió antes de que la cogiera y finalmente ella bebió de la botella.

Este se dio la vuelta y se dirigió hacia Neúm quien estaba al lado de Clady, al percatarse de su presencia, se giró y lo miró asustado, este le tiró al suelo vendas y alguna que otra cosa para detener la hemorragia de Clady, las cogió desesperado y comenzó a colocárselas.
Siul se dio la vuelta y volvió a la camilla junto a Steny, me miró de reojo y sonrió de lado.

Hijo de puta.

Narra Steny :

Me sentía inútil al no poder hacer nada con la poca fuerza que tenía.
Estaban todos atrapados en la habitación como aquella vez en el sótano...
Siul y Naúm eran los únicos que se encontraban libres,  yo a pesar de que me hubieran quitado las ataduras que me ataban a la camilla, ahora tenía una esposa enganchada a una pata de la camilla.

Cuando Siul se sentó a mi lado, no pude evitar intentar alejarme de él, era un monstruo, este sin embargo me sonrió como si no hubiese pasado nada e incluso me besó la frente y se acercó más a mi acomodándose a mi lado.

Milda, Dail y Laumi, no paraban de moverse intentando escapar, pero sus intentos eran en vano.

—Cuando salgamos de aquí...— comenzó a hablarme — ¿seguiremos estando juntos?— me preguntó.

Apreté la botella de agua de la impresión mientras agachaba la cabeza, él volvió a mirar al frente mientras suspiraba.

—Steny,  yo te quiero— me cogió de la cara con la intención de darme un beso en los labios, pero le evité.

Frunció el ceño y me soltó la cara con brusquedad haciéndome daño.

—Siul, necesito llevarla al hospital más cercano— interrumpió Naúm.

Este lo miró de reojo y se levantó disgustado, se acercó a Clady y la examinó con la vista.

—Aún respira, puede aguantar— le respondió seriamente.
—Pero, Siul, no está bien, está grave— insistió.
—No.
—Siul— volvió a llamarle suplicante.
—¡BASTA!— acabó gritándole mientras que lo cogía del cuello de la camiseta y lo elevaba del suelo.

Ante aquella reacción provocó que todos los que estábamos allí le mirásemos impactados y en mi caso más asustada de lo que estaba.

No pude evitar un pequeño grito que se escuchó en el silencio que gobernaba la habitación.

Noté que Siul me miró de reojo y bajó a Naúm de nuevo al suelo, estaba hiperventilando, se masajeó la sien para volver a tranquilizarse y miró a Naúm.

—Nadie puede salir de aquí, está todo cerrado, las líneas de teléfono cortadas— hizo una pausa— ¿no te das cuenta que no podemos hacer nada?— le dijo tranquilamente.

Naúm sólo asintió con rabia llevándole la razón.

Este volvió al lado de Clady cogiéndola de la mano y besándola y Siul se dio la vuelta para mirarme.

—Dime Steny...— sonrió— ¿quién de estos tres te ha hecho más daño?— señaló con la mirada hacia donde se encontraban asustados Milda, Dail y Laumi.

Le miré sin comprenderlo y temiendo lo peor de él.

—¿Esa de allí no te molestó en el colegio?— señaló a Laumi mientras sonreía más ampliamente.

Asentí inconscientemente, este se acercó a mí y me besó la frente.

—Ya no te molestará más— me acarició la mejilla mientras observaba mi rostro asustado, después se dio media vuelta.

¿Qué le iba a hacer?

¿Te acuerdas de mi? TRILOGÍA VENGANZA II (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora