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Narra Steny :

Habían pasado ya cuatro semanas y nadie salió de la casa, Naúm se quedó con nosotros por petición de Clady y las puertas y ventanas de la casa se cerraron por seguridad, según Lindert,  para estar seguros.
Sólo entraba y salían de la casa Nifeo y Lindert,  para comprarnos lo que necesitábamos.
Yo ya me estaba agobiando,  no sabía cuándo era de día y cuándo era de noche,  me faltaba el aire y tener a Siul siempre a mi lado me agobiaba mucho más,  se ha vuelto demasiado protector y agresivo,  comenzaba a darme miedo.

—¿Estás bien?— me preguntó Melune.

Vi de reojo que Siul lo miró a la defensiva.

—Si... supongo...— suspiré aunque apenas se oyó.
—Claro que está bien— contestó Siul por mi.

Miré hacia mis manos agotada de aquel comportamiento.

—Esto es agobiante— comentó Éneon.
—Quiero chocolate— dijo Clady imitando la voz de una niña chica mientras apoyaba la cabeza en el hombro de Melune.
—Nada de chocolate— le regañó Naúm — te recuerdo que el ginecólogo te dijo que tienes que comer sano— se acercó a ella con una manzana.

Ella la cogió sin ganas y suspiró, acto seguido la mordió mientras ponía cara de asco.
Suspiré y me levanté del sofá para ir a por un vaso de agua, Siul me acompañó.

—No hace falta que me acompañes hasta la cocina— rodeé los ojos— no me voy a perder— cogí un vaso.
—Me es igual— me contestó mirando de reojo sus espaldas— no me voy a separar de ti, no quiero que te pase nada— me agarró de la cintura, al llenar el vaso de agua en ese instante me giré y evité que sus manos me tocaran.
—Por favor Siul, esto se te está yendo de las manos— dije con el vaso de agua en la mano.
—No tienes por que sentirte así— me hizo un pucherito— sólo quiero protegerte.

Me bebí el vaso corriendo y me dirigí hacia las escaleras con el paso acelerado,  el seguía detrás mía, me estaba poniendo algo nerviosa.

—Por favor— me giré y acto seguido le apoyé mis manos sobre sus hombros y le miré fijamente— voy a darme una ducha.

Por la cara que le puse al decirle aquello, le di a entender que quería estar sola, el suspiró profundamente y me plantó un beso en la frente, subí las escaleras.

Narra Siul :

No me apetecía estar sentado junto a los demás así que me fui a la cocina a por algo de beber, abrí la nevera y vi que había cerveza, me encogí de hombros y cogí una.

[...]

Ha pasado ya bastante tiempo y me encontraba rodeado de botellas vacías de cerveza.

—Oye, déjalo ya, ¿no?— me dijo Melune que se encontraba ante mi junto con Éneon.
—El... ¿qué?— dije con una voz que no era la mía.
—Llevas ocho botellas ya— me dijo Éneon cogiendo una mientras la zarandeaba y me miraba frunciendo el ceño.
—Y Steny — alcé la cabeza y empecé a buscarla con la mirada.

Narra Steny:

He pasado suficiente tiempo sola y eso al menos me tranquilizaba, la verdad es que lo necesitaba. Bajé las escaleras esperando encontrarlo todo normal, pero los vi a todos alrededor de Siul con cara de preocupación.
Siul me vio y como alma que le lleva al diablo se levantó y se dirigió hacia mi, me quedé paralizada al verle de tal manera.

—¡Tú!— me gritó al verme.

El miedo se apoderó de mi cuerpo.

—¡Dónde has estado!— me gritó en la cara.

Miré a los demás sin entender nada, sólo los vi a la defensiva y unos reteniéndose a otros, tenía muy mala espina.

—Siul, estaba arriba— le dije con la voz temblorosa.

Él me cogió de la cara apretándome fuerte y me miró por encima con desprecio.

—Yo sólo quiero protegerte y tu me rechazas yéndote arriba sin mi— me dijo apretando los dientes.
—Si...ul— dije su nombre costosamente, me hacía daño.
—Inútil— me dijo y me soltó bruscamente provocando que me cayera de espaldas hacia las escaleras.

¿Te acuerdas de mi? TRILOGÍA VENGANZA II (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora