Hogwarts ; Zodiac.

22.

Capítulo 22.

Narra Avery.

No podía soportar ver a mi hermana llorar cada noche en silencio, cuando creía que no la escuchaba pero lo hacía tan fuerte que era imposible no darse cuenta. Entre las personas no parecía preocuparse aunque estaba distante, entonces ambas llorábamos sólo por nuestro mejor amigo y por nuestra nueva y muy apreciada amiga, nos dolía su olvido pero sabía que ella estaba destrozada, y a mí me dolía verla así.

Cada día que pasaba era peor y menos recordaban, si pasaba momentos con uno de ellos era con Ly y eso me fascinaba, a pesar de no recordar absolutamente nada era capaz de responder a todo, pero aún se me formaba un nudo en mi garganta cuando le preguntaba acerca de nuestras aventuras y él no sabía que decir, su hermana también venía a verlo y ni siquiera podía convencerlo de que eran hermanos, porque la única vida que él había tenido en su memoria era una cárcel.

Pero era muy curioso, cada pregunta que hacía era para mí lo mejor que podía hacer, pues era sobre nuestra amistad y también sobre nuestras aventuras, se emocionaba en sólo conocer su edad y su proveniencia, le fascinaba que le contara que no era normal aunque no sabía lo que era "normal", y cada palabra que salía de su boca era tan llena de ilusión que me enternecía. Sin duda, el mejor amigo que pude haber tenido, pues iba a verlo al mismo tiempo que Liam venía a visitar a su hermana, y Ly constantemente me decía cosas como "Ese chico me ve raro, como si me odiara sólo por hablarte, creo que está celoso", también ignoraba lo que eran los celos pero sabía cómo identificarlos, a mí me ilusionaba escuchar eso.

Me ilusionaba ver a Liam entrar por la puerta y me entristecía su cara de desilusión y amargura cuando su hermana intentaba recordarlo pero no podía, sentía en mí las ganas que tenía de llorar en silencio por eso. Quería hablar con él, pero primero me decidí a hablar con Ciara, para que tuviera algo de qué hablar y que a él le sentara bien.

Cuando terminé de hablar con Ly fui directo con Ciara, justo después de que Cameron se fuera junto con Vira y Sabrina, Ella me sonrió como siempre hacía cada que me veía, como si supiera algo que yo ignoraba porque normalmente con sus otros amigos (los que no recordaba para nada, obviamente) tenía una expresión neutra, incluso a veces llegaba a parecer verdaderamente desorientada, pero no lo demostraba frecuentemente, como era usual en ella incluso antes, cuando la chica que recordaba toda su vida.

—¿Se te ofrece algo?—Preguntó cuándo yo no hablé primero, con una voz tranquila, sonaba cansada.

—Sólo quería hablar un poco contigo, acerca de Liam—Sonreí para no mostrar mis nervios, no había creído que decir "tu hermano" resultara cómodo para ella, por eso me había costado un par de segundos hablar ante ella sin meter la pata por completo, como casi siempre solía hacer.

—No sé mucho acerca de él, creo que deberías de preguntarle a Cameron—Murmuró. Quizá por una parte, si había hecho algo mal.

—Quiero decir, quiero que me hables sobre cómo lo ves tú a él—Me miró como aturdida, abrió la boca y la cerró muchas veces meditando bien sus palabras, por un momento creí que no me iba a decir absolutamente nada y que me iba a echar de donde estaba, pero respondió con total naturalidad y sinceridad, eso sólo lo mejoró todo.

—Lo quiero, hasta podría decir que lo amo por el simple hecho de que es mi hermano y que conocerlo a fondo en estos últimos días me han hecho sentir orgullosa de tenerlo como mi familia tanto como a Cameron, sólo que en él me conmueve lo mucho que se preocupa por mí, dice que se siente culpable por no haberlo hecho antes, Cameron me dijo que si alguna vez recordaba, entonces seguramente entendería que era lo que hizo mal, porque a mí me había dolido mucho

—¿Tu podrías perdonarlo?

—Puede ser. Sé que tú eres alguien importante para él porque siempre viene justo después de ti, tiene las horas bien calculadas y jamás pierde tiempo, a veces pretendemos hablar para que te vea distraída hablando con tu amigo, y siente celos. Yo creo que lo puedes hacer sentir mejor sólo con estar a un lado de él y saludarlo, prefiero que hagas eso a que pierdas el tiempo hablando con la hermana sobre él.

Lo hice, no sin antes haber grabado en mi memoria esta conversación para poder pasarla de mí a él, ahora que sabía cómo hacer eso lo pondría en práctica porque ya no lo vería tan triste. Me despedí de Ciara y de Tom porque Ly ya estaba dormido y fui a la sala común de Slytherin, aunque todo el mundo me decía que no se encontraba ahí.

Lo encontré en el salón de pociones, en un rincón hincado y sorbiendo su nariz mientras secaba las lágrimas de sus ojos, nunca lo había visto llorar hasta ahora, tanto él como sus hermanos la mayoría del tiempo parecían insensibles, con un corazón duro y un alma escondida, pero verlo así me hacía pensar en su lado más humano, el que muchos desconocían.

—Hola...—Susurré. Volteó lentamente y cuando me identificó volvió rápidamente la mirada. No me habló pero yo si le hable a él, le dije lo que Ciara me había contado y pareció ablandarse un poco, se paró y fue hasta a mi tan lento que mi corazón palpitó cada vez más fuerte, me tomó de las mano y me preguntó sobre la autenticidad de las palabras de su hermana, pero él ya sabía que yo decía la verdad.

Creo que era lo que necesitaba escuchar, porque de momento volvió a ser el mismo Liam divertido y descarado de siempre, aunque aún con melancolía trataba de hacerme reír, y yo trataba de no parecer nerviosa cada que me miraba para ver si funcionaban sus palabras.

—Vas mucho a ver a Ly—Me dijo, tomándome por sorpresa, en ese momento no volteo como siempre a ver a las negras paredes del frente, si no que se quedó mirándome hasta que volvió a hablar—¿Por qué no te das un momento y haces otra cosa?

—Voy para verte—Dije sin pensar, pero cuando quise redimir mis palabras ya no pude hacerlo, él tenía media sonrisa en su rostro y eso sólo servía para ilusionarme un poco más—Quiero decir, perdón. Es que, aunque quisiera hacer otra cosa no tengo nada más interesante.

Pareció pensar en sus palabras y eso me recordó mucho a sus hermanos, ellos hacía expresiones faciales similares en ocasiones diferentes, él por ejemplo, lo hacía cada vez que tenía una buena idea pero dudaba en decirlo, y pensé que la idea que se le estaba ocurriendo ahora era sacar otro tema de algún lado para olvidar las palabras que había dicho anteriormente. Pero no lo hizo, y lo que dijo me dejó sorprendida y atontada, toda la tristeza e incomodidad que tenía conmigo se había reducido siendo reemplazada por una extrema felicidad que se asimilaba a la adrenalina que te impulsa a hacer algo arriesgado.

—Sal conmigo entonces—Dijo con las primeras sombras de nerviosismo que había visto salir de él. Y yo acepté, porque claramente quería hacerlo más que cualquier otra cosa en este mundo, más que vivir en el mundo mágico toda mi vida o más que ganar una guerra.

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¡Espero que les haya gustado este capítulo! pensé que sería bueno poner un poco de romance en todo esto, aunque no soy muy buena haciéndolo, Vota y comenta si te gustó y así estaré más motivada. 

A partir de este lunes iniciaré mi semana de exámenes finales y aunque no he visto a nadie diciendo esto, voy a tener más tiempo de escribir puesto que acabando los exámenes el último día del último examen salgo de vacaciones y no necesito estudiar porque soy de esos raros chicos que no estudian y salen bien en el examen :'v Así que, que haya examenes quizá haga que escriba más por tiempo libre :'v porque antisocial :'()