Narra Georgi.
Ly llegó a la sala común 23 minutos después que mi hermana y yo. Le preguntamos en donde estaba porque tenía su ropa completamente sucia y se veía cansado y daba pasos muy débiles, pero aun así sólo nos miró y siguió sin decirnos nada, escuchamos azotar la puerta de su habitación y nos miramos entre nosotras, creíamos que estaba demasiado estresado pero no sabíamos qué era lo que le pasaba realmente.
Nos miramos entre nosotras y alzamos los hombros al mismo tiempo con miradas escépticas, oímos la puerta abrirse de nuevo y salió nuestro amigo con una mochila en sus hombros y estaba dispuesto a pasar de nosotras, eso lo sabíamos pero claramente no lo íbamos a dejar pasar así como así, entonces cuando estaba a punto de salir de la sala común Avery le preguntó.
-¿A dónde vas, Ly?—Con un leve temblor en la voz—¿Dónde están Tom y Ciara, Y porque vas a salir a esta hora con una mochila?-—Él nos miró por un momento con la expresión neutra, como si pensara en que respondernos pero claramente ya tenía una respuesta aún sin hacerlo.
—Lo siento pero eso no les importa—fue lo único que dijo antes de desaparecer tras el marco.
No volvió esa noche, ni tampoco en la mañana en la hora del almuezo y justo les había pasado lo mismo a Vira y a Aris con Tom tanto como a Eva y a Liam con Ciara.
Nadie volvió a tocar el tema de en donde estarían después de que dijimos lo que había pasado, nos encogimos en nuestro lugar y sin decir nada comimos y fuimos al jardín. Estaba preocupada por Tom, realmente quería hablarle y apoyarlo, me resultaba muy difícil no sentirme mal por no tenerlo junto a mi a pesar de que sabía que ahora debería dejarlo hacer lo que fuera que este haciendo si eso lo sacaba de dudas, lo extrañaba. En los meses de práctica habíamos avanzado demasiado, siempre estábamos juntos tanto como con nuestros amigos, sólo que por un momento yo había tenido esperanza.
Aún la tenía, pero a él no, y eso claramente me dolía.
Los chicos no llegaron ese día tampoco, estuvimos esperándolos hasta que nos tuvimos que ir por instrucciones de la profesora Granger y entonces decidimos ponernos en contacto por si aparecían en sus salas comunes. Pero no aparecieron, y eso sólo nos dejó con más dudas y menos tiempo de sueño, eso al menos después de tres días cuando comprendimos que quizá ellos no iban a volver pronto, entonces comenzamos a preocuparnos en silencio y a simplemente extrañar en sueños.
Narra Ly.
Nos había costado mucho alejarnos de los chicos, por razones que incluso nosotros desconocíamos. Una punzada se había instalado en mi cuando deje de ver exactamente a la chica con él único nombre del que me había acordado cuando ya no recordaba nada. Tom y Ciara estaban igual. Habíamos dejado nuestros brazaletes en la biblioteca para que no nos encontraran y ahora nos encontrábamos lejos en una casa subterránea de un amigo del director.
En el camino de regreso a Hogwarts habíamos decidido alejarnos de los chicos hasta que fuera completamente necesario volver, no podíamos decirles que ya habíamos resuelto aquel acertijo que ni siquiera parecía ser uno realmente, principalmente porque si lo hacíamos público entre ese grupo empeoraría, al menos eso sentíamos nosotros.
Pasó una semana, y en mi cuerpo ya sentía el peligro más cerca y con una clara intensidad, Podía ver a los caídos marchar a paso lento como si meditaran lo que iban a hacer para entonces ser más fuertes. Viajábamos en sus mentes, el amigo del director no enseñaba como hacerlo sin que lo notaran.
Tenían miedo porque no sabían que pasaba con nosotros, estaban nerviosos pero lo cubrían pareciendo totalmente seguros como siempre solían hacerlo, hacían más lentos los pasos cuando no estaban seguros de sus estrategias y se apresuraban cuando creían que tenían un buen plan y su adrenalina era pura y exagerada. Querían poder desesperadamente y en la palma de su mano, pero ahora no prevenían pensamientos ni acciones, si no que nosotros lo hacíamos y eso sólo los ponía más en evidencia, nosotros reíamos cada vez que escuchábamos a lo lejos sus ridículos planes. En un chasquido podría hacer que cambiaran de parecer, pero tendríamos que esperar hasta que los demás lucharan.
No sabíamos que nos deparaba el futuro pero sabíamos que no podíamos alterarlo, y si algo tenía que pasar mejor que fuera rápido para entonces poder acabar con esto y vivir como magos o hechiceros normales, obteniendo de nuevo las memorias de nuestras vidas que ahora sabíamos que tendríamos con nuestra victoria, porque todos sus intentos de ganar entonces cuando perdieran se desvanecerían.
Sólo tuvimos que esperar unas horas para saber que ellos estaban lo bastante cerca del castillo como para ser una amenaza, entonces decidimos irnos pero nos prometimos a nosotros mismos que nadie notaría que estamos ahí hasta que sea completamente necesario. Esto era porque tendríamos que esperar el momento indicado.
"Ustedes van a darse cuenta cuando sea el momento, y van a tener que dejar pasar lo que tenga que pasar hasta que lo noten" nos dijo el señor banner, un viejo arrugado con un carácter muy tierno.
Nos escurrimos por los pasillos más escondidos del castillo cuando todo apenas iba a comenzar, los caídos estaban a menos de 2 kilómetros de distancia y ahora nosotros sabíamos controlar la magia con las manos y no con nuestras varitas, al menos ya nos estábamos acostumbrando más al hecho de ser mágicos y no como las únicas personas que habíamos memorizado en esas habitaciones húmedas y oscuras.
—¿Y si algo le pasa a alguno de ellos, y todavía no es el momento?—Preguntó Tom-¿Qué pasa si no sabemos cuándo llegue ese momento?—Nadie lo sabía, y eso nos preocupaba cada vez más, porque si no actuábamos a tiempo quizá terminaríamos perdiendo y con un gran vacío en nuestro pecho.
—Lo sabremos—Lo tranquilizó Ciara, aunque note un leve tono de duda en su rostro, estaba tan preocupada como nosotros aunque no lo pareciera.
—Ahí están—Susurré, señalando a lo lejos. Venían como un gran ejercito de almas insatisfechas, aunque eso eran.
Caminaban como si cada paso les doliera, miraban el frente con la cabeza en alto y la confianza por los suelos, podíamos sentir su miedo y su impulso por dar marcha atrás, algunos de ellos estaban totalmente seguros de ir al infierno sólo para esto y muchos otros preferían dar vuelta y alejarse, aunque no lo hacían sólo por orgullo. La miradas eran duras, y todos parecían tener las mandíbulas apretadas.
Todos llevaban algo en las manos o en la espalda, como ballestas o pistolas, espadas o lanzas. Ellos no sabían que nosotros podríamos formar fácilmente un escudo sin dificultad y que eso nos ayudaría si ellos no sabían que estábamos aquí, porque habíamos aprendido tanto en tan poco tiempo que incluso sabíamos cómo ocultar nuestro rastro de ellos para que no sintieran cuando llegábamos.
Estando justo al frente del castillo todos gritaron, entonces corrieron hacia la "impenetrable" puerta y comenzaron a golpear y forcejear, arañar y patearla hasta que lograron abrirla, pasaron fugazmente justo frente a nosotros sin vernos, listos para destruirnos.
Había empezado la guerra.
![](https://img.wattpad.com/cover/105695211-288-k510797.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Hogwarts ; Zodiac.
De Todo◖Prometemos solemnemente que nuestras intenciones no son buenas◗