Sirena

11:el auténtico Rin

Al día siguiente,Haru despertó a eso de las 11 de la mañana.
Nada más levantarse de la cama,no se vistió.No estaba acostumbrado a hacerlo,y no iba a hacerlo ahora si nadie miraba.Así que,como mucho,se puso unos calzoncillos blancos que hacían que su miembro se le notara mucho.
Después se dirigió a la cocina,donde Nagisa estaba preparando el desayuno.
-Buenos días,Haru-chan.Estoy intentando hacer tortitas,¿te apetece?
-Ya sabes que solo me gusta la caballa.
-Oh...vengaaa.¡Pruébalas aunque sea!
-Está bien.
Haru se sentó en la mesa de la cocina a esperar el desayuno.Al cabo de un rato,Nagisa le puso en la mesa un zumo de naranja,un montón de tortitas y un vaso de leche,y lo mismo para él.
-¡Que aproveche!
Los dos rápidamente se pusieron a comer.
-Ah,por cierto-dijo Nagisa con conmida en la boca-antes ha llamado Rin.Dice que quiere quedar contigo.
-¿Ah,sí?¿Cuándo?
-Después de comer,a las cuatro.Que te espera en el portal de este edificio.
-Vale,allí estaré.
Haru tuvo una corazonada sobre Rin,aunque decidió ignorarla y seguir desayunando.
Él y Nagisa no volvieron a hablar del tema en ese rato.
...
Llegaron las 4 de la tarde,y Haru se vistió y salió al portal.
Afuera estaba Rin,esperándole.Con un poco de sonroje que le vino al verle,Haru abrió la puerta y salió a la calle.
El tiburón le miraba extrañado,como si fuera la primera vez que le viera.
-¿Querías verme?-preguntó Haru.
-Sí.Es que necesitaba hablar contigo de algo.
-Te escucho.
-Verás,es que...quería disculparme por todo lo que te hice ayer.Mira,no sé qué me pasó,pero yo no soy así.No soy ningún idiota enamorado,y menos de un tío al que ni conozco.-dijo Rin en un tono severo.
-Vale...lo entiendo...-respondió el sireno con su típica frialdad.
-Vale...pero no por hacerte cosas sin motivo creas que voy a ser amable contigo.
-¿Cómo?
Rin entonces empujó a Haru,poniéndole contra la pared bruscamente.
-Escúchame bien,no me dejaré llevar por un niño mono como tú.No soy ningún maricón para jugar a jueguecitos...¿he sido claro?
-Sí.
Rin soltó a Haru y le dejó tranquilo.Pero se notaba en su mirada la mala ostia.
-Cálmate,yo tampoco he dicho que te quiera...-decía Haru intentando seguirle la corriente-acabo de llegar aquí y ya estás acosándome...es increíble.
-Ya veo...entonces,lo siento.No era mi intención darte falsas esperanzas,lo de ayer...no sé qué rayos me pasaría,pero era como si no fuera yo el que actuara.Mira,te aceptaré como amigo,pero ya está.
-Me parece bien.Y dime Rin,si somos amigos,¿no querrás que quedemos esta noche para ir de juerga?
-Mmm...sí,no es mala idea.Espero que no seas un soso...venga,vendré a buscarte a las diez.Estáte preparado,Nanase.
-Está bien.
Tras esto,Rin se fue rápidamente de allí.Aunque estaba actuando fríamente,en realidad Haru estaba muy dolido por aquello que acababa de pasar.
No le gustaba que le hubiera tratado tan mal después de tanto que pensaba en él y el hecho de que se atrevió a hacer esa locura de hechizo por él.
De la nada,Haru sintió una presencia,y escuchó una voz detrás suya.
-Bueno,¿qué te parece tu verdadero humano?
-¡Kou!¿Qué le has hecho?¿Ahora le has embrujado para que me odie?
-Para nada,yo solo he deshecho el hechizo.No he vuelto a hacer otro para que te odie.Él es así realmente.Aprende a soportar su verdadero ser.
Después,Kou se fue y Haru se quedó ahí,paralizado.

Todavía en blanco,decidió entrar en casa.Empezó a sentir algo fuerte en el pecho,cada vez más intenso,que le hacía angustiarse.
Entró en el piso,intentando contener sus lágrimas,cuando se le acercó Nagisa.
-¡Haru-chan!¿Qué te pasa?
-...es...es que...Rin...
-¿Qué ocurre con él?
-Él estaba hechizado por la diosa,pero ahora no lo está y...no me quiere.Ha sido muy duro conmigo antes...
-Oh,Haru...cuánto lo siento.
-Esta noche he quedado con él a solas,pero tengo miedo.¿Y si...es peor que antes y...
-Tú tranquilo,Haru.Intenta no pensar en ello y diviértete con él.Puede que sea mejor de lo que esperas.
-Vale...lo intentaré...