¡YO NO SOY GAY!

¿RESULTO?

Se ve a Suigetsu y Sasuke caminando todos deprimidos por los pasillos del dormitorio masculino.

-¿Ahora qué movimiento sigue compañero? –pregunta deprimido el peliblanco, mirando de reojo al pelinegro.

-No se me ocurre nada. –dice a la vez que suelta un largo y profundo suspiro.

-Esto es deprimente. Ni un leve avance hemos tenido.

Ambos sueltan nuevamente un profundo suspiro dejando ir ahí toda su poca felicidad. De pronto Sasuke recobro la ilusión, desapareciendo toda aura deprimente en su ser.

-Suigetsu ¿recuerdas la vez que nos encerraron en el sótano? –pregunta sonriendo de forma torcida y su mirada obtuvo un brillo travieso.

Suigetsu entendiendo a donde quería llegar, no pudo evitar sonreía travieso, mirando con complicidad a su amigo.

-Ya capto querido amigo. –dice con diversión y ambos tenían una gran sonrisa traviesa adornando sus rostros que los hacía ver realmente tétricos.

Bañaditos, cambiaditos, con su bien planchado y limpios uniformes estaan Sakura/Gaara, Yuki, Kiba y Naruto. Los cuatro iban caminando tranquilamente por los patios de la enorme escuela camino hacia el edificio de clases. Iban platicando entre ellos de temas tribales, como por ejemplo de lo que trato la película que vieron ayer entre otras cosas.

El celular de Yuki comenzó a sonar haciendo que sus amigos la miren curiosos mientras ella saca el celular de uno de los bolsillos de su chaleco y al ver quien le hablaba alzo una ceja extrañada para después colocarse el teléfono sobre su oreja derecha.

-¿Si?

-Yuki, soy Suigetsu. Este... ¿podrías ayudarme? –la pelinegra se extraño mas al oír ese tono de voz suplicante.

-¿Qué paso?

-El idiota de Sasuke se enojo conmigo y el muy cabrón me encerró en el sótano de los dormitorios masculinos. Según él porque así le jodo menos la existencia. –dice molesto y Yuki sonrío divertida, imaginándose que el pelinegro se enojo con él por haber fallado el plan de hace rato.

-Ahorita voy. –dice amigable, sintiendo que se la debía por haberle arruinado el plan.

La pelinegra colgó la llamada al igual que el peliblanco a la vez que detenía su paso haciendo que sus amigos la imiten mirándola curiosos.

-Lo siento chicos tengo cosas que hacer. –dice dando media vuelta e irse corriendo sin darles alguna explicación.

-¿A dónde irá? –pregunta extrañado Kiba mirando por donde se alejaba.

-Ni idea. –dice Sakura encogiéndose de hombros restándole importancia. – ya esta grandecita. Cuando termine lo que sea que tiene que hacer ya nos alcanzara. –dice agitando una mano y continuando su camino. Los varones se cogieron de hombros y siguieron caminando retomando el tema que fue interrumpido.

Cuando Sakura, Naruto y Kiba llegaron al salón de clases se sorprendieron al ver a Kakashi en la entrada, recargado en el marco de la puerta, sosteniendo una caja de plástico color azul.

Era normal que Kakashi estuviera ahí después de todo tocaba primera hora con él, pero ese hombre nunca llegaba temprano, de hecho lo esperaban una media hora más tarde, por esa razón se sorprendieron.

-¿Qué hay chicos? –saluda aflojerado el peli-plata cuando esos tres se detuvieron frente a él dejándoles ver que dentro de la caja habían puros celulares.