¡YO NO SOY GAY!

EQUIPOS A, B Y C

Afuera de los edificios de las empresas Haruno se encuentra el chófer de Haruno Kaname. El chico aparenta tener cerca de unos veintitantos años. Lleva boina de chófer y traje que lo distingue como tal. En este momento esta limpiando los parabrisas del automóvil.

- Lindo auto.

El chico voltea ante esa voz femenina en tono seductor, viendo recargada en el automóvil a una hermosa pelinegra que aparenta tener menos de veinte años.

La chica lo mira con unos seductores ojos gatunos de color dorado que resaltan mas ante el tono de piel y cabello. Sus facciones angelicales no se ven opacadas por el intenso marcado en negro en sus ojos, haciendo que su mirada coqueta sea más cautivante.

Viste una minifalda negra que le queda completamente ceñida y apenas le tapa lo necesario, si se alza o inclina seguro se le verán las bragas. Cubriéndole los senos solo le tapa un pequeño top negro que mas parece una tira de tela, dejando al descubierto su plano vientre y luciendo ese arete de plata en el ombligo.

La chica se hace el largo cabello negro a un lado, dejando que solo caiga en uno de sus hombros y le sonríe al chófer que la mira con expresión de pendejo.

- ¿Es tuyo? –la pelinegra acaricia el cofre del automóvil mientras se relame los labios y sin apartar la mirada del hombre.

- No. –el hombre se aclara la garganta al darse cuenta que su tono de voz sonó muy ronco.

- ¿Pero tú lo conduces? –al terminar la pregunta ronronea de una forma provocativa, haciendo que el chico se sonroje y pase saliva con dificultad, ante lo nervioso que se puso.

- S-si.

- Mmm... adoro a los hombres que conducen automóviles lujosos. –hablo de forma erótica y se acaricia el vientre suavemente, haciendo que el chico pose su mirada donde esta la mano de ella, deseando que sea la suya. – ¿Te gustaría acompañarme hacia haya un rato? –la chica apunta con la mirada el callejón que esta en la calle de enfrente y el chico voltea, al ver el callejón se puso mas colorado y nervioso.

- Yo... yo... yo no puedo, esto...

Dejo su parloteo nervioso cuando la chica se coloco frente a él, pegando su cuerpo al suyo, haciéndole sentir los senos de ella chocar en su torso, sintiendo como su erección choca con el vientre de ella, y gimió ronco.

La pelinegra se puso de puntitas para hablarle al oído, sintiendo como él se tensa mas y su erección se hace mas dura.

- ¿Sabes? No me gusta usar ropa interior cuando traigo falda. –ronronea coqueta para después separarse de él.

El chico tiene ahora un leve derrame nasal ante lo dicho por ella; no pudo evitar imaginárselo. Anonadado y excitado mira como la chica le da la espalda y comienza a caminar un par de pasos, se detiene y se inclina levemente, dejando que el chico vea un poco de lo que hay debajo de la falda y con solo verlo casi se corre en los pantalones.

La chica se enderezo y volteo a verlo sobre su hombro dedicándole una sonrisa coqueta, para después regresar su vista al frente y correr, cruzando la calle, yendo directo hacia el callejón.

El pobre chófer estando muy acalorado y excitado... se aflojo el cuello del uniforme. Su erección es dolorosa. Con pesar mira hacia donde están las oficinas de su jefe, para después mirar hacia el callejón donde la chica esta en la entrada, viéndolo y cuando él la miro de guiño un ojo para después adentrarse en el callejón.

- En una hora saldrá Haruno-sama... es tiempo suficiente.

El chófer corre hacia el callejón, sintiéndose ansioso y sintiendo más molestia y dolor en su entrepierna.