Hoy volví a recibir una carta de Sammuel, se que la esta pasando terrible en ese lugar y no me canso de decirle lo desgraciado que es Erick por mandarlo a esa estúpida escuela militar, según el, yo al cumplir los 18 estaré igual que el. Pobre imbécil. Otra cosa que quería escribir y es que ya no le aguanto las ganas es que vi de nuevo a Scott, ha ido por mi a la escuela y me ha traído a casa como lo hacia Sam. También se ofreció a reparar el demonio, a estado muy al pendiente de mi y de mi mama la cual lo adora.
—¿Donde he escuchado ese nombre? ¿Donde?
Día quince, me han corrido de mi segunda preparatoria.
¿que?
Emma esta furiosa y Erick ni se diga, amenazó con pelear mi Custodia alegando que Emma es una mala madre. ¿Esta retrasado o que? Jamás me iría a vivir con el y su zorra. ¿No entiendo como puede ser mi padre?
¿Padre? ¡No! ¡No! ¡Y no! Mi mama es hija de mi abuelo Andrés, ella me ha dicho siempre que es su papá.
Pero Emma no lo permitirá, es abogada y sabe todo eso de las leyes no me preocupo, eso lo dejo para Sammuel, quien esta lejos y no puedo verlo. Lo extraño demasiado.
—Ariana baja a cenar hija.—¿Cenar? ¿Cuanto tiempo tengo leyendo?
—No tengo hambre.—Esta más emocionante esto.
Intentará escapar de la escuela en la primera oportunidad que tenga, esto no es lo suyo y lo esta pagando muy caro.
Sabia que mi tío era militar pero no que fue obligado a ir. Aun no entiendo porque la abuela dijo que aquí descubriría quien soy.
Día dieciséis, Scott paso de nuevo por mi, hoy me llevo a ver como quedo el demonio después de accidente. Aun no entiendo como Sam sobrevivió a el.
—Ariana amor, necesito hablar contigo.—Es mamá. Tome todo y lo guarde en la caja para ocultarlo debajo de la cama.
—Pasa.—Quite el seguro de la puerta y entro.—No quiero hablar de lo que paso mama.
—No quiero hablar de eso, se que es duro iniciar en una nueva escuela.
—¿Lo has experimentado?—La mire crédula.
—Si, algo por el estilo. Solo que yo era algo especial y jamás deje que me tomaran como la novata, pero bueno. De eso no quiero hablarte.—Tomo aire y se sentó en mi cama.—Quiero hablarte de tu padre. —Me senté junto a ella.—Se que tu y el son muy unidos, pero tienes que entender que cuando una relación ya no funciona es mejor estar separados.
—Es su orgullo quien no los deja ver mama, se que aun amas a papá, no dejes que se valla con esa otra mujer.—Le sorprendió mi comentario.—Para la otra no uses mi cumpleaños como password.—Me mira ofendida.—No dejes que te quite al amor de tu vida mamá.
—Tu padre y yo ya no nos amamos Ariana. ¿Tienes la contraseña de tu padre?—Lo ven, lo ama. Asentí.
—Es el día de su boda.—Quien usa fechas importantes como contraseña. Solo mis padres.—Lucha por el, no dejes que esa mujer se meta entre ustedes o lo haré yo.
—¿Que has hecho Ariana?—Sonreí. No sabrá jamás que le envié a su casa unas ratas muertas o que le envié al trabajo una lagartija sin cabeza.
Esperen, no las mate. Son las que usamos en el laboratorio de la escuela.—Sea lo que sea bien hecho.—¿Que? —Y hija el divorcio ya esta por salir, tu padre merece ser feliz y yo igual.
No te hagas ilusiones de que tu padre y yo regresemos. ¿De acuerdo?
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¿El regreso del demonio Collins?
HumorSegunda Parte del Demonio Collins. Gael y Sara tienen una gran familia, pero una duda pone a Sara a la defensiva mandando todo al demonio. nueva casa, nueva escuela, un diario y una historia real que contar.