— Es tarde. ¡Abuela! ¡Mama!—Grite desde el pie de las escaleras como loca. —Bajen ya.
—Ok señorita. —Dice la abuela bajando apurada. —En esta casa solo yo doy cartilla. ¡Sara es tarde!—No responde. — ¡Mía Sarahi Pirsons Sommer! Tu madre odia su primer nombre.
—Ya no me puedes castigar por lanzarte zapatos Emma. —Están locas estas mujeres. Yo en mi vida le contestaría así a mi madre. —Ya bajo que no me entra ningún pantalón.
—Es la vejes hija, no tendrás treinta para siempre. —Es divertido ver esto, mi abuela y mi madre peleando por cualquier cosa.
—Suficiente me pondré un vestido. — ¿Mama? ¿Vestido? La abuela y yo nos miramos sorprendidas. —Emma préstame un vestido.
—No tengo.
—Si tienes ya encontré unos y soy horribles Emma.
—Lamento no ser una gótica hija. —La abuela ni atención le presta, está mirando la pantalla de su celular mientras juega Candy Crush. —Oye ese es mi vestido nuevo.
—Es el único que me quedo Emma, deja de llorar. —Se ve hermosa, el pistache resalta sus ojos y sus tés blanca.
—Bien, solo te falta la actitud y puedes ser una dama. —Le dice la abuela.
— ¿Mujeres están listas? Ariana llegara tarde. —Entro el abuelo a la casa agitado. Lleva ropa deportiva. — ¿Sara está usando un vestido?
—Si papá no es la gran cosa. Andando. —Mama tan tierna como siempre.
Subimos los cuatro a la camioneta en dirección a ese nuevo instituto al que me inscribieron. Por lo que recuerdo que me dijo papá aquí se conocieron y me imagino que a mama le ha de dar algún recuerdo el estar aquí.
—Sigue siendo una estúpida escuela para ricos. —Dijo mi madre con expresión de fastidio fingido.
—Yo asistía a un colegio privado en New York mamá.
—Si, el peor error que cometí, no eres una niña normal. —Mi abuela la mira mal. — ¿Que niña normal pasa su verano en una escuela bilingüe?
—Una niña que no tenía papás todo el verano. —Ataque. Solo se quedó callada.
—Ya llego tu padre. —Mire por la ventana y es verdad, esta ese hombre rubio de pie junto a la entrada, se ve muy bien sin sus abrigos y ropa de frío. La polera de manga corta deja ver sus brazos trabajados.
—Mama se te está corriendo la baba. —Mentira, solo quería que se sonrojara y lo logre.
Ariana, también ama a papá.
<<Lo sé, y es nuestro trabajo que ambos se lo digan. >>
Nuestro ¿Qué?
Reuniremos de nuevo a esos dos tórtolos.
— ¿Ariana vas a bajar o huimos?—Dice mama.
—Cual huimos, no heches a perder a tu hija Sara. —La regaño la abuela. —Cariño baja. —Lo hice y salude a papá.
—Aun no me lo creó que vengas a Collins. —Dijo papá. —Conque te la pases la mitad de bien que nos la pasamos tu madre y yo me conformo.
— ¡No!—Gritaron los abuelos. —No queremos a otra Sara Sommer en la familia.
—Eso me dolió Andrés.
—A mí me dolían tus bromas Sara.
—Suficiente los dos, lo discuten donde Ariana no los escuche. Es muy pequeña para escuchar esas barbaridades. —La abuela me tomo de los hombros y en camino a la entrada.
—Estúpido escuela de ricos. —Pude escuchar a mama al ver como las puertas se abren solas. —No me veas así Emma. ¡Por el amor de Dios vean esto!—Mama corrió por el pasillo hasta un casillero color morado que esta salido de la pared. ¿Porque el instituto es tan antiguo?—Este era el mío. Espero y te toque este.
—No, es una Henderson. Le tocara el mío. —Alerta de pelea.
—Gael ¿Estas ciego? Solo mírala, es toda una Pirsons. —Dijo orgulloso el abuelo.
—Ambos se equivocan. —Dijo la abuela. —Es toda una Sommer. —Ahora le siguió mamá. ¿Porque siempre se hace una pelea de esto?
—Buenos días, mi nombre es.
— ¡Scott Schimts!—Hablo mi padre.
—Así es y soy el director. Es un gusto verlos de nuevo familia Pirsons. —Sonrió a los abuelos. —Y los Henderson. —Miro en especial a mamá. Ok comprendo el enmudecimiento de mamá. Yo estoy igual. El director es guapísimo. —Tú debes ser Ariana ¿Cierto?—Habla.
—Am sí.
—Pues bienvenida al instituto Collins.
—Gracias. —Esa sonrisa, no se compara con nadie.
— ¿Cómo has estado Scott?—Pregunto la abuela.
Lo guapísimo no le contesta la pregunta señora abuela. Esta hecho un bombón.
<<Inmoral. >>
Eres tú la que está babeando por él.
<< ¿Qué? >>
—Muy bien Emma ¿Y ustedes?
—De maravilla. — ¿De dónde conocen al guapito?
—Me alegro, me acompañan a la oficina, ya está todo listo para que Ariana inicie sus clases. —Que se tarde lo que quiera, la vista es espectacular.
Y yo soy la inmoral.
<<No es mi culpa que use pantalones tan ajustados. >>
—Aquí es. —Al abrir la puerta un sujeto castaño paso de un brinco del asiento del director al de enfrente del escritorio. —Byron dale el asiento a tu compañera nueva. —Mis padres por arte de magia se giraron a verse mutuamente, esas sonrisas son algo sospechosas.
—Claro. ¿Ya me puedo ir?
—No, acompañarás a tu compañera a su clase, tu castigo será de chaparon. — ¿Qué? No necesito chaparon.
— ¿Qué? De nuevo no.
—Ya te lo dije, hasta que no pases esas materias serás mi mono sillonero. Así que más te vale que llegue a sus clases a tiempo o te las veras conmigo. —Ok, gracias director ahora tengo a alguien que me odia. Me asesina con la mirada.
—Este es su horario y numero de casillero. 202.
— ¡Ja! Te dije que era una Henderson. —Dijo papá emocionado. Celebro chocando los cinco conmigo.
—Como sea, andando rubia.
—Mi nombre es Ariana, no rubia. —Odio que me digan rubia.
—Como digas Rubia. —Papá lo quiere matar.
—Bien mono cilíndrelo.
—Es toda una Sommer. —Adoro esas miradas entre mis padres, si antes creía que no podrían arreglar su matrimonio ahora si veo una esperanza.
—Te vemos a la salida hija. —Dijo papá sonriente y con la cabeza abajo. —Y no permitas que ese idiota te trate mal ¿De acuerdo?
—Claro que no. —Me despedían de todos y salí.
Sara.
La vista de Scott ya me recorrió completa tres veces seguidas. ¿Qué parte de que vengo con mi hija y mi esposo no le quedó claro? Además trae argolla de matrimonio. Que respete.
¿Respete? Te lo acabas de violar con la mirada Sommer.
<< A ti nadie te llamo. >>
¿Te recordó algo lo del mono?
<<Demasiadas cosas. >>
—Ahora que Ariana se ha ido puedo hablar con ustedes, según el expediente que me mando la escuela en New York, Ariana sufría de bullying. — ¿Qué? No imposible.
La novela se actualizara todos los viernes.
ESTÁS LEYENDO
¿El regreso del demonio Collins?
HumorSegunda Parte del Demonio Collins. Gael y Sara tienen una gran familia, pero una duda pone a Sara a la defensiva mandando todo al demonio. nueva casa, nueva escuela, un diario y una historia real que contar.