Capitulo Trece

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Las clases terminaron y fui llamada de nuevo a dirección.

—¿Director Schmdt me mando llamar?—Esta en su escritorio muy consentido en su ordenador frente a él.

—Si señorita Henderson, porfavor pase y tome asiento.—Se ve molesto.—Creo recordar que yo le retire algo el otro día que curiosamente desapareció de mi escritorio. ¿Sabe donde esta?

—No tenia derecho a quitarme algo tan personal y todavía más grave fue perderlo.

—Usted lo tiene, de eso estoy seguro.

—¿Tiene pruebas?

—No las necesito.—Llamaron a la puerta y entró un sujeto de limpieza.—Miren lo que encontraron. ¿Donde estaba Joseph?—Ay no.

—Casillero 202 director.—Tiene de nuevo el diario de mi madre.—Tal como dijo.

—Esto se considera robo señorita Henderson.

—Si, usted me lo robo a mi, eso es propiedad de mi madre.—Me miro muy mal, el señor de limpieza se fue cerrando la puerta tras el.—Le pido me lo devuelva.

—No lo creo.—¿Que?—Por lo que se tus padres se están divorciado, eso deja a tu mamá libre.—Hijo de perra.

¡Arianna Henderson bien dicho!

¿Has leído este diario Arianna?—Negué.—Uy que mala suerte, si lo hubieras hecho entenderías porque lo hago. Tu padre me robo algo que era mío y se muy bien que en este diario encontraré la respuesta de como recuperarlo.

—¿Y que fue lo que mi padre le robo según usted?

—Lastima, debiste leer el diario cuando aún era tuyo, ahora largo de aquí.—Mal nacido.

De nuevo sin el diario. ¿QUE HAREMOS? En el estaba la clave para que nurestros padres estén juntos de nuevo.

<<No lo sé, pero debo hablar con Byron.>>

Busque en todas partes, en las canchas, incluso en los servicios de hombres y ni rastro de el.

—Hola blanquita.—Genial, su novia me ayudara.—¿Ya te has vuelto una del clan?—¿He?

—¿Has visto a Byron?—La morena me miro divertida.

—No, dejo de preocuparme hace mucho.

—Creí que eran pareja.

—Byron no es de una sola chica blanquita, no te claves mucho con el si no quieres salir lastimada. El no es de relaciones serias, sino solo de mujeres de paso.—Esta chica no me entiende.

—No salgo con el, tenemos un trabajo juntos.

—Puede que este en gorgios pizza, ama ese lugar.—Gorgios pizza, recuerdo a Alex mencionar ese sitio.

—¿Esta muy lejos?

—¡Arianna!—Kendall.—¿Donde Jordidos te metes? Llevo horas afuera.—Mire mi reloj y solo han pasado 30 minutos desde el timbre.—¿Oh una amiga? —Que risa.

—Ni es sus sueños rubio.—Que linda ella, se fue.

—Necesito ir a Gorgios. ¿Sabes donde es?

—Si, es el lugar favorito de Alex.—Lo ven, sabía que era Alex quien lo menciono.—¿A que quieres ir a ese sitio?

—Necesito hablar con Byron.

—¡No!—Respondió molesto y comenzó a caminar a la salida.

—¿Porque no?—No lo entiendo, nada le cuesta llevarme ahí tan solo cinco minutos.

—Olvidalo Arianna, no te llevare.—Abrio mi puerta y me hizo subir, se nota que esta disfrutando que le ruegue.—No, no y la respuesta sigue siendo no.

¿El regreso del demonio Collins? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora