Mi tercera clase es literatura la cual comparto con Byron, pero ni sus luces.
—Disculpa ¿Tu eres Arianna Henderson?—Una chica de cabello rojo llegó a mi.
—Si.
—Te mandan esto.—Me tendio un sobre blanco con unas indicaciones.
Número uno, camina hasta la cafetería ocultandote de las cámaras del pasillo 1,4 y 6. Número dos, compra dos jugos de manzana. Número tres, sube hasta el último piso por las escaleras norestes y toma el pasillo de la derecha, primera puerta de intendencia.Nos veremos Byron.
Esta loco, no pienso faltar a clases.
—¿Arianna Henderson?—Otra chica llegó a mi con otra nota. Ni se te ocurra faltar, es sobre nuestros padres.
—¡Arianna Henderson!—Me gire al grito y es Ben.—Necesito tu ayuda.—Ay no.—Necesito esconderme por lo menos hasta la penúltima hora, a mi padre se le perdió algo que solo nosotros sabíamos que tenia, y esta furioso.—¡El diario de mi madre!—¿Sabes donde esta Byron? Seguro ese bastardo lo tiene.
—No lo he visto. ¿Pero que fue lo que perdio?—Pregunte. Su postura se enderezó y se puso nervioso.
—No lo sé, me tengo que ir.—¿Que no necesitaba mi ayuda?—Nos vemos después Arianna.
Raro ¿no?
<<Demasiado>>
Seguí las indicaciones de Byron muy pendiente de que Ben no me fuera seguir, al llegar al último piso esta solo competente, aquí está el gimnasio privado de los atletas y las porristas, jamás habiendo subido aquí.
—Arianna.—Escuche mi nombre en susurro y al girarme esta Byron asomado por una puerta.—Sigueme.—Entre en la puerta y el subió por unos andenes hasta un hueco en la pared.
—¿A donde vamos?
—Tu solo sígueme.—Lo hice, entre en el hueco y este sale al tejado de la escuela.—Que tal ¿Te gusta?—Asentí.—Debo esconderme y por tu bien igual tu.
—Robaste de nuevo el diario de mi madre ¿Cierto?
—Vi al de intendencia sacándolo de tu casillero. Espera. ¿Como sabes que lo robe?—Me señaló una manta en el suelo, justo debajo de los paneles solares.
—Ben me lo dijo, andaba buscandote.
—No le has dicho.
—Claro que no, estaba furioso pero al preguntarle que se había perdido cambió de tema y se puso nervioso.
—De igual forma ese estúpido no estará en mi vidas mucho tiempo, me librare de él y de mi padrastro.
—¿Tal mal se llevan?
—¿Traes los jugos?—Otro que cambia de tema. Los saque de la mochila y el saco dos emparedados.
—¿Donde esta el diario?
—Te lo envié por correo, no vuelvas a traerlo a la escuela o mi padre te lo quitara.—Asenti.
—No nos vemos más culpables escondiendonos, si no lo tenemos con nosotros no puede castigarnos. ¿O Si?
—Probablemente no, pero no me quiero arriesgar, seguro volteara la escuela de cabeza en busca de el.—El sonido de su móvil lo interrumpió.—Te lo dije, esta revisando casilleros y mochilas.
—Y si no nos ve, sabrá que algo pasa. Hay que volver.—Logre convencerlo y volvimos.
—Tenemos que justificar el porque estamos afuera.—Odio esta escuela en este aspecto, en New York eras responsable de tus propias clases, si no entrabas era cosa tuya pero la falta era grave para tu nota final. Doblamos una esquina y justo viene un prefecto hacia nosotros.
—Tengo una idea.—Me beso.
—Miren nada más lo que tengo aquí, un par de pillos.—¿Que acaba de pasar?—Detención separados jovensitos.—Exale. Me dio una hoja con la aula 204 y a él ni idea. Byron me señaló el pasillo izquierdo y luego el siguió el derecho.
Llamada entrante de LSteven.
—¿Como vamos hoy?
—Bien.
—Uy que fría, estaré en la hora del descanso afuera.
—No lo creo, tengo detención.
—¿Que has hecho Arianna Henderson?
No puedo decirle que fue por un beso.
Uy si, dile haber como se pone.
<<¿Quieres tenerlo pegado a nosotras las 24 horas de día?>>
Nop.
—Arianna responde.
—Amm, por llegar tarde a una clase.
<<Idiota>>
—Porque llegaste tarde a clases si aún no conoces a nadie en esa escuela. No espera, si hay alguna quien conoces.—Ay no.—Al estúpido enano ese ¿Cierto?
—No, tenía hambre ya que no desayunamos y fui por algo de comer.¿FELIZ?
—No, nos vemos a la salida.
Fin de llamada.
No se porque se pone así, ni que hubiera faltado a clases.
Pero si faltaste.
<<Pero el no lo sabe>>
Tuche.
Al llegar al aula 204 para mi sorpresa esta Owen ahí.
—¿Que has hecho?—Lance la mochila al suelo y me deje caer en la silla.
—Jugar en el laboratorio. ¿TU?—No pensaba decirle pero me quito la hija.
—Conducta inmoral con un compañero.—Juraria que su boca callo al piso.—Lo mataré ¿Quien fue?—Busco en la hoja pero se la quite de las manos y metí a mi boca para masticarla.—Solo una cosa Ari, esta escuela tiene ojos y oídos en todas partes. Sabré quién es tarde o temprano.—Claro, ahora se donde están las cámaras.Espera, ¿Rompiste las notas que te dieron las chicas?
<<No>>
Idiota, si el director revisa tu mochila y las ve sabrá del esscondite de Byron y que si lo tienen ustedes.
<<Debo quemarlas ya>>
—Joven Shmith, su hoja porfavor.—¿Ben?—Conducta inmoral, que curioso.—¿Que?—Tome asiento.—Camino hasta mi para tomar el asiento justo frente al mío.—Hola de nuevo Arianna.—Owen me hizo señales de que esto está mal, que después habría seriamente conmigo y que le diría a Ross. Mierda.
—Diculpe ¿Puedo ir al baño?
—Claro, tiene 5 minutos.—Tomé las hojas y las escondí en mi pantalón.
—Buenos días profesora Grenger.—Ay no, solo a mi me pasa esto.
—Director Shmidt ¿Que se le ofrece?—Eso debe ser el Karma, ¿Alex como salgo de esta?
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¿El regreso del demonio Collins?
HumorSegunda Parte del Demonio Collins. Gael y Sara tienen una gran familia, pero una duda pone a Sara a la defensiva mandando todo al demonio. nueva casa, nueva escuela, un diario y una historia real que contar.