Dark time 3/3

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Divorcio .- Disolución legal de un matrimonio, a solicitud de uno o de los dos cónyuges, cuando se dan las causas previstas por la ley.

Andrew leía la definición en el diccionario por la quita vez, entendía el contexto a la perfección. Lo que no entendía era porque sus padres estaban pensando diluir su matrimonio ¿acaso no se amaban? ¿Y los cuentos? ¿Como una hada podía vivir sin su héroe o un héroe sin su hada?

Sus grises ojos se posaron en los verdes de Nikolay, el menor de la familia estaba completamente distraído con unos peluches mientras hablaba un poco. Para Andrew el lenguaje de su hermano de tres años seguía siendo un misterio más grande que la búsqueda de la arca de la alianza o el santo grial.

Niko, vuelvo en un rato — el mayor besó la frente de su hermanito y salió en búsqueda de su rubio padre. Yuri no había salido de su cuarto en días, ni siquiera dejaba que los rayos del sol entrarán a la habitación. Por su ausencia venía una mucama y una niñera para mantener la casa decente para sus hijos, mientras su cuarto lucia como un campo de batalla.

Su bello rostro se encontraba pálido y con grandes ojeras, su cabello dorado ahora lucia enredado, Yuri humanizaba la palabra desastre. Eran 3 simples días sin Otabek y se sentía morir, pasaba de ira a tristeza en minutos. Jamás en toda su vida con el héroe kazajo había experimentado algo así, Beka siempre volvía a su rescate lo abrazaba y acurrucaba hasta desaparecer todos los problemas.

Otabear tú no me vas a dejar — abrazó al osito contra su pecho cerrando los ojos en espera de encontrarse con la hermosa mirada de su héroe — papá abre los ojos — Andrew golpeó un poco la cara de su padre, jamás lo había visto así — ¿enserio se van a diluir su matrimonio pasando por un tribunal donde dividirán las cosas materiales y lucharán por nuestra custodia?

Yuri parpadeó confundido y luego empezó a llorar abrazando más al peluche, dudaba llegar con vida hasta el divorcio. Cada minuto lejos de Otabek era una agonía, deseaba buscar una solución y por el momento solo tenía un amigo al cual pedir consejo.

Andrew, anda a tocar el piano...no me siento bien hoy — le pidió dulcemente mientras acariciaba su mejilla — prometo que todo va a mejorar — normalmente era Otabek el hombre de las promesas, Yuri era el hombre de las amenazas a los vecinos que paseaban a sus perros por su jardín.

*

En un hotel en a las afueras de Londres se encontraba Otabek Altin luchando con sus impulsos de salir corriendo a disculparse hasta por respirar, amaba a Yuri y estar lejos de él lo tenía al borde de una crisis nerviosa ¿como estaban sus hijos? ¿Estarían comiendo bien? ¿Dormirían a las horas adecuadas? ¿El gato seguía con vida?

Suspiró agotado por la situación, necesitaba a Yuri y a sus dos niños. Todo a su alrededor lucía vacío sin ellos, su corazón dolía de pensar en la posibilidad de ser remplazado por aquel hombre.

Tomó el teléfono para mirar las fotos, tantos bellos recuerdos con aquel hermoso ángel. Su Yuri era maravilloso, recodaba perfectamente la boda, el nacimiento de Nikolay y sobretodo su hermosa sonrisa cuando despertaba antes.

Sus ojos marrones se fijaron en una de sus fotos favoritas, su hermoso tigre besando a su primogénito. Aquel día Yuri había llorado mucho por la emoción de tener a un pequeño en su familia , si cerraba los ojos podía ver aquella hermosa expresión de ilusión por un futuro donde ambos podían ser padres.

My Future with You (OtaYuri)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora