Narra Dante
—Basta Caroline, no podemos. —En cualquier momento perdería el control si seguía con esto.
Se quitó la blusa, ¿qué pasa con ella?... O mejor dicho... ¿Qué pasa conmigo?, siento que no soy yo, esto parece una obligación de estar juntos hoy.
Nos volvimos a besar, no aguantaba más, no quería hacerlo, no de esta manera pero aún así lo hacía. En un segundo ya estaba abajo de mí, baje mis besos hasta su cuello... El olor a su sangre era exquisito, me quite la playera. Seguí besando su cuello, un gemido salió de sus labios.
—¿Por qué tardas tanto?, ambos lo deseamos y lo sabes.
Esto no estaba bien, y nosotros tampoco lo estábamos, algo esta pasando que nos hace actuar así, tenemos que estar cerca del otro y no acabará bien si no paramos.
Quitó su pantalón y yo hice lo mismo que ella... Somos técnicamente unos títeres y nuestro titiritero se divierte con nosotros.
Aún con la ropa interior puesta seguíamos con las caricias, yo estaba entre sus piernas...
Ninguno tenía contacto piel a piel con el otro.
Unos piquetes como si fuéramos picados con millones de agujas se hicieron presentes en nuestras piernas, cambiaron para sentirse como miles de cortadas.
—Demonios —se quejó— ¡SANTA MIERDA! —gritó y fue suficiente para que ambos saliéramos de nuestro tipo de transe, me quite de ella, jale la cobija de arriba para taparla, Caroline se paró corriendo mientras recogía su ropa y con todo y cobija se dirigió al baño.
—Maldición —solté exasperado, no por no poder terminar enrollandome con Caroline, al contrario, porque estuvimos a punto de hacerlo y ninguno estaba consciente.
Me cambie a toda prisa, cuando termine me senté en el borde de la cama de abajo, apoye mis codos en mis rodillas para esconder mi cara entre mis manos.
La puerta se abrió dejando ver a una ya cambiada y avergonzada Caroline, se abrazo a sí misma.
—Perdón, yo... No sé que paso en serio, no era mi intención, lo siento tanto...
—Perdoname tú a mí, no-o sé que me pa-aso... Dante... —su voz era temblorosa—, no era yo, te prometo que no era yo.
—¿Tú también lo sentiste? Ya sabes, sentir como si no fueras tú y te controlaran.
—Sí, lo sentí... ¿Qué nos paso? ¡Mierda mis padres me van a matar si se enteran!
Llevó una mano hasta su frente.
—Si quieres puedo hacerte olvidar, ya sabes como... —Esperaba un gran no, por el simple hecho de que el beso que le di hace algunos minutos, lo hice porque en verdad lo sentía, en verdad quería hacerlo.
—No lo sé, yo... —Se sentó por mi lado, cada vez acercaba más la distancia entre nosotros, si continuaba así le seguiría el juego así que mejor la parte—. Perdón, debo parecer una zorra.
La tome de la mano, no quería mirarla a los ojos, cada vez que lo hacía tenía esa necesidad insaciable de besarla y más que eso, hasta pasar a otra cosa.
—No eres tú, no estamos siendo nosotros, algo nos dieron y por eso estamos tan... calientes.
—Calientes... —soltó una risita— ¿Fue aquél chico? ¿Él de los nachos?
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EL BOSQUE •(Terminada)•
Fantasy¿Te imaginas creer tanto en la fantasía que ni siquiera puedas diferenciar entre la realidad? Pues eso justamente le pasa a Caroline. Brujas. Duendes. Vampiros. Hadas. Troles.... ¿Tú le creerías todos sus cuentos? -Historia terminada y sin corregi...