Capítulo 50-•- Vete de aquí

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     —Que lindo que se despidan, por eso de que ya no se van a ver —esta vez habló Marck.

    —Que estúpido es eso

     —No hay nada más estúpido que tu cara y lo sabes Ashley.

      —Nunca perdió las agallas por contestar y meterse en lo que no.

      —Porque no hay nada que de miedo idiota.

     —Yo quería que fueras mi pareja en el baile, tu madre estaba de acuerdo con eso y tú tenías que meterte en lo que no -dijo Erick.

     —Yo no caigo tan bajo cariño.

     —Pero una cosita más... Te ves excelente con eso y tu cuello ni se diga ¿verdad Dante? —Dante no contestó, Marck sonrió.

     Paso su pulgar por mis labios y antes de que pudiera apartarlo yo Dante ya sostenía su mano.

     —No la toques —dijo pausado y entre dientes.

     —Esto se pone bueno —se burló Erick.

     —¿Si no lo hago qué?.

     Ashley movió la mano haciendo que Dante saliera disparado hasta el otro extremo, no tarde en reaccionar y apreté mi puño.

     A Ashley se le corto la respiración, no puede respirar y yo lo estoy haciendo.

     Los otros dos intentaron acercarse a mí cuando Ashley tosía e intentaba tomar aire. Puse mi mano al frente creando una barrera invisible impidiendo que se acercaran, Ashley estaba de rodillas, su rostro había cambiado de color una vena le saltaba en el cuello, Dante apareció a mi lado.

     —Es mejor no hacer un alboroto ahora —me dijo Dante.

      Deje de apretar el puño y baje la mano, Ashley tose y respira con la boca de una forma violenta tres tipos comenzaron a acercarse también, Ashley se levantó, hizo una señal con su manos y los tres sujetos avanzaron a una velocidad más rápida que un vampiro o un licántropo.

      Dante me puso atrás suyo preparándose para lo que venía, moví una mano bruscamente hacia un lado y los tres tipos salieron violentamente a dirección de de Ashley, Marck y Erick, chocaron entre si, cuando chocaron contra el piso gritaron. Un rayo salió de cada uno extendiéndose por todo su cuerpo provocándoles pequeños espasmos.

    —Mejor vámonos. —Dante tomo mi mano para entrar de vuelta al castillo.

     Subimos las escaleras, las grandes puertas nos hicieron saber que ahí es el gran salón y donde están todos. Las puertas están abiertas, entramos, la habitación es más que enorme, mesas por aquí y por allá repletas de comida, algunos tocaban y había algunos otros de entretenimientos sobre algunas plataformas, una chica es tan flexible que me hace creer que carece de huesos, las cortinas están atadas.

    Jale a Dante para salir... Está tan alto aquí, mire a mi alrededor permitiéndome ver las torres más cercas y una en especial llamado mi atención, estaba en una esquina, pero podía ver que es la más alta, en su alrededor hay solo cristal, excepto por barrotes gruesos de cementó que los atraviesa para sostener la parte de arriba... Esa es la torre en la cual Bianca lanzó a mi hermano...

     Observe el jardín intentando ver que había en el centro, pero en vez de eso, logré ver como las ramas de un arbusto se movían como si tuviesen vida... No era un arbusto, es un árbol.

    —¿Qué ves?.

    —¿Ese árbol se está moviendo? —Señale hacia los arbustos.

    —Es un Ent... —Dijo como si no lo creyera— estaban extintos, bueno, al menos aquí, hace un poco menos de un siglo la antigua reina había acabado con ellos.

EL BOSQUE •(Terminada)•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora