Al llegar Alena me dedico una sonrisa, al parecer hoy había cambiado de asiento y se sentaría junto a Rochelle y a mí. No tenía idea si ambas se conocían o no pero tenía la certeza que ella se haría amigas fácilmente porque ellas tenían una actitud un tanto parecida.
- Hola – le dije mientras me sentaba junto a Alena esperando por Rochelle cuando oí un coro de suspiros provenientes de nuestras compañeras.
Veía como las chicas corrían sin disimular hasta la entrada para tener un buen vistazo de un escultural chico de ojos ámbar.
- Rochelle ha llegado – anuncie a Alena.
Ahora sabia la razón por la que Rochelle no venía con Benjamín muy seguido a clases, estaba segura que las algunas chicas le estaban coqueteando e incluso parecía que le iban a lanzar sus brasieres para llamar su atención, esto era un caos.
Casi podía jurar que veía llamas en los ojos de Rochelle, pero ella nunca perdió la compostura, simplemente sonrió y que le dio un dulce beso de despedida a Benjamín, los celos de las chicas eran graciosos, estaba a punto de reír cuando entro el profesor y nos silenció.
La mirada de Rochelle cayó en Alena para dedicarle una sonrisa. Las tres nos sentamos, al parecer íbamos a ver diapositivas y teníamos que bajar las persianas, pero estaba muy segura que el sueño me vencería, apenas había podido dormir y estaba muy cansada.
Una chica un poco más baja que yo con el cabello oscuro se acercó a la persiana, y se puso a forcejear con esta, pero al parecer no quería bajar, ella de un tirón hizo bajar la persiana y rompió el soporte, haciendo que todo le caiga encima.
Estuve aterrada por un instante, una chica alta y rubia corrió a ayudarla, pero la bajita se levantó con una sonrisa en el rostro, decía que estaba bien, el profesor se levantó asustado para ayudar, pero ella seguía riendo, un hilo de sangre corrió por su frente y se sentó sin decir nada, con sus mejillas rojas por la vergüenza.
Cuatro horas después cuando la clase por fin terminó, estaba demasiado cansada para levantarme, al igual que Alena y Rochelle, ellas se estaban llevando muy bien, parecían amigas de toda la vida, Alena peinaba a Rochelle mientras esta cantaba canciones en perfecto inglés.
Esa pequeña acción revivió mis ánimos, mi vida no podía parar ahora, había cometido errores y tenía que remediarlos, tal vez no conocía bien a las chicas a mi lado, pero el simple hecho de tenerlas me daba fuerza y apoyo.
- Haz dado un gran espectáculo hoy, Karly. Estaba muy asustada cuando vi tu rostro lleno de sangre, después recapacité y pensé que fue muy divertido, nunca pensé que estarías dispuesta a destruir la universidad para evitar tener clases. – le dijo una chica rubia a la pequeña que casi había roto su cabeza al inicio de la clase.
Rochelle no pudo evitar reírse con ese comentario y ellas se dieron cuenta que las estábamos escuchando, Karly, la más pequeña, nos dedicó una amplia sonrisa, pero su voluptuosa y rubia amiga parecía estar enojada por nuestra intromisión.
- Me llamo Karla Mar - dijo mientras nos dedicaba una sonrisa, estuve a punto de reírme al escuchar su nombre, sin embargo me contuve con todas mis fuerzas. – Y solo quiero aclarar que no fue mi intención romper la persiana, nunca espere que una gran barra de aluminio me atacaría en medio de la clase. Por cierto, mi amiga la rubia callada y antisocial de la esquina se llama Velika Romanov
Velika solo nos clavó la mirada y se retiró, al parecer no éramos de su agrado. Para el final del día Benjamín que al parecer había pasado toda la tarde con Ross llegó a recoger a Rochelle, y yo tuve que marcharme con un muy enojado Ross. Había pasado mucho tiempo desde que él se había comportado de esa manera conmigo, se había convertido en un soldado de hielo, cuando él estaba a mi lado su rostro no reflejaba ninguna emoción, nada todo estaba vacío. De cierto modo me dolía su actitud, pero él no estaba aquí para ser mi amigo y eso lo tenía presente.
ESTÁS LEYENDO
Proyecto: Valkyria
Teen FictionIzzel Sullivan ha pasado toda su vida dentro de la academia Militar siendo una de las mejores alumnas de su generación, gracias a esto llegó a ser parte de un grupo selecto de estudiantes conocidos como Brigadieres, quienes tienen el mando de la aca...