"Los humanos somos comos pedazos de cristal. Nos rompemos fácilmente y dañamos a quien nos recoge"... "Tenemos tan poco tiempo para decir lo que sentimos y aún así esperamos hasta el final, hasta cuando ya nadie lo espera, hasta cuando es imposible...
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-¿Eh? Oh sí cariño no te preocupes. -Dijo la pelinegro para darle una sonrisa que convencería a cualquiera, después de haber secado rápidamente sus mejillas húmedas.
Ella se acercó hasta su hijo, el cual la esperaba con sus bracitos estirados para ser cargando y abrazado con mucho amor por parte de su madre.
Gesto que nunca tuvo de su padre.
-Siento no haberte dejado dormir bien en la noche mami.. ¡Es que Chat Noir es tan increíble! Él casi se ahoga para salvarme y...
Él pequeño se volteó y encontró con la mirada del Agreste, el cual estaba petrificado. Él había sido el niño que Adrien rescató de aquella akuma. Un pequeño, rubio y ojos verdes, de cuatro o cinco años. ¿Acaso podía ser..?
-¿Y quién es él mami? -Preguntó con curiosidad sin apartar la vista del hombre.
-Oh.. Él.. es un amigo y socio de trabajo Adrien Agreste. -Respondió intentando ocultar su nerviosismo, dándole una mirada, al obviamente padre del pequeño, refiriéndose que le siguiera la corriente.
Pero aunque intentara no podía salir de su transe, era demasiada información que analizar.
La chica bajó con cuidado al pequeño, el cuál se acerco a el adulto con una sonrisa y le extendió su pequeña mano. -Mucho gusto Adrien, mi nombre es Louis, Louis Hansen.
Él aceptó su mano aún atónito para soltarla segundos después.
-¿Y eso que saliste antes de clase cariño? -Preguntó la mujer intentando parecer una situación "normal" a su hijo.
-La abuelita me buscó más temprano porque la profesora la llamó ya me sentí mareado en la hora del receso. Pero fue porque no me comí la merienda.
-¿Qué? ¿Por qué mi amor? sabes que debes alimentarte para estar sano y fuerte, ¿cómo te sientes ahora? -Preguntó preocupada la pelinegro para arrodillarse a la altura del niño.
-Es que Arya -Hija adoptiva de Chloe y Lila.- unos niños malos le quitaron su comida, así que yo le dí la mía. Pero descuida mami estoy bien, la abuelita antes de traerme me llevó a comer.
-¿Y qué comiste?
-Croissant ¡Y estaban muy ricos!
-Está bien cariño. -Dijo ella para besarle la frente al pequeño rubio.- Por ahora descansa.
-¿Si descanso podremos ir a ver a la tía Chloe? Quiero jugar con Arya, ella se porta muy bien conmigo.
-Claro que sí. -Sonrió con dulzura, al ver la emoción de su hijo reflejada en sus ojos y sonrisa idénticas a la del Agreste que no salía de su estado de asombro con muchos sentimientos encontrados.
-Yo.. ya debo irme, nos vemos luego Louis -Dijo colocándose a la altura del pequeño, ofreciéndole la mano.
Cuando en realidad quería abrazarlo y llenarlo del amor que nunca le pudo dar.
-¡Seguro! -Alegre agarra la mano del adulto para soltar al poco rato.
Adrien se levantó y dirigió a la puerta, no sin antes dirigirle una mirada acusadora a la chica, la cual el pequeño distraído no pudo notar.
Era SU hijo. El cual nunca había visto o sabía de su existencia. No había acompañado a ____ en su embarazo, ni tampoco lo había cargado apenas nació, no estuvo con él en sus primeros pasos para levantarlo si se caía, ni le enseñó como ser educado y respetuoso. No le dió amor, ni tenía su apellido, no le dió más que la ausencia de un padre... Las cosas no pasaron como Adrien había deseado con tanto esmero años atrás.
-____ nunca te lo perdonaré.
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