burning red; yoonkook

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La vida es como un piano, las teclas blancas representan la felicidad y las negras la tristeza. Conforme pasa el tiempo te das cuenta que las negras también hacen música.

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Yoongi

hace un mes atrás

Era de madrugada y aún no podia conciliar el sueño.

Era la segunda vez en la que lastimaba a Jungkook. La segunda vez que había bebido de su sangre y para ser honestos me sentía peor que la mierda.

Esa misma noche Jungkook me había pedido que durmiera con él y aún no entendía porqué.

Es decir, ¿Quién iba a querer algo que lo lastimaba? Simplemente no lo podía creer.

Despegué mi cara del hueco de su cuello y lo miré encontrandome con sus ojos abiertos también.

Y juro que nada tenía sentido cuando me miraba de esa manera. Como si yo fuese un gran premio en vez de el causante de todo su gran dolor.

Jin.

En la actualidad.

Todo paso demasiado rápido como para poder procesarlo con claridad.

Primero Alexandra había disparado a Jungkook y acto seguido Yoongi ya se encontraba arrancandole la cabeza... Sí, así como oís, Min Yoongi le había arrancado la cabeza en un arranque de cólera.

Luego de eso caminó hacía donde yo me encontraba (junto al cuerpo tendido de Jungkook) y me miró como esperando algún milagro.

No sabía exactamente que hacer o que decirle. Él sabía a la perfección que en Jungkook ya no había ningún pulso o signo vital sin embargo él continuó viéndome desesperado.

-Jin...

Negué rápidamente antes de que siguiera hablando.

-Despiertalo.

Mi labio temblo ligeramente. Y no sabía que estaba llorando hasta que mi visión comenzó a nublarse.

Miré a Yoongi negando nuevamente. Él parecía que en cualquier momento iba a descontrolarse o que se echaría a gritar. Tragué con fuerza.

-¡Tienes que hacer algo! ¡TÚ PUEDES DESPERTARLO! ¡HAZLO MALDITA SEA!

Cerré los ojos ante sus gritos. Namjoon llegó a los segundos y miró todo la escena en shock, desde una Alexandra sin cabeza hasta terminar en el cuerpo tirado de Jungkook.

-Que demonios...- susurró.- ¿Está muerto?- me preguntó abriendo sus ojos como platos.

Yoongi respiraba con dificultad.

Yo no sabía que hacer y había comenzado a temblar.

-Jungkook despierta- Yoongi se acercó a tomarlo por la camisa y comenzó a sacudirlo levemente- por favor...

Namjoon trató de quitarlo de encima de Jungkook pero a cambio recibió un fuerte empujón que lo hizo retroceder.

-¡Eres un idiota Jungkook! ¡Un estúpido!- Yoongi comenzó a hacerse un ovillo mientras abrazaba sus rodillas y miraba hacía el abdomen del más joven, donde estaban los dos disparos. 

-Es mi culpa- continuó hablando.

-No Yoongi no lo es.- repliqué.

-Sabía que iba a salir lastimado, lo sabía. ¿Como si quiera me atreví a dejarlo entrar en este mundo? No lo puedo creer...

-Yoongi no es tu culpa, ya basta- repetí enojado y llorando.

-¿ENTONCES DE QUIÉN ES LA CULPA?- me gritó volviéndose a poner de pie- PORQUE TE JURO QUE NO VEO DE QUIÉN MÁS PUEDE SER.

Namjoon rápidamente se puso en medio de nosotros dos evitando que él se me acercará más.

Yoongi se pasó las manos por la cara aspirando con fuerza y botando todo el aire de sus pulmones de golpe. Ignoró a Namjoon y se volvió a tumbar en el suelo cerca de Jungkook.

-No te quiero perder- lloró más fuerte- pero tampoco quiero robarte tu futuro... No quiero convertirte en un monstruo como yo pero me niego a estar un maldito día sin tu estúpida risa retumbando por toda mi casa. Maldición.

Lloré sonoramente escuchando sus palabras... Yoongi realmente se había encariñado con Jungkook tanto que dudaba mucho que volviera a ser el mismo después de esto.

Namjoon se acercó a él sobandole levemente la espalda.

-Namjoon, ¿Que debería hacer?- le preguntó con su cara hecha un desastre por las lágrimas.

Namjoon me miró de reojo y volvió su vista a Yoongi y a Jungkook.

-La vida de los humanos es demasiado corta hermano, si de verdad lo quieres manda a la mierda las reglas y trae ese idiota de vuelta.

Abrí la boca sorprendido y miré en su dirección.

Éste se encogió de hombros y continuó: -¿A quién más voy a molestar si él no está? Humano o Vampiro lo quiero con nosotros también.