Prologo:

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Lisha:

<< -Bien, ahora intenta crear una nueva combinación, Lisha tienes que ser impredecible, diferente cada vez...- Esta de rodilla frente a mi para que asi alcance a golpear con mi pie su mano, su pelo esta despeinado y a pesar de todo luce tan bien.

-Papá lo intento pero siempre me ganas- digo, haciendo cara de perrito.

-Lo se, pero es porque apenas tienes 7 años, cuando estés mas grande veras la gran fuerza que has adquirido.- le sonrío, creyendo sus palabras, para mi todo  lo que el dice es verdad, no tiene motivos para mentirme y menos lastimarme. Mamá aparece en el ventanal y se perfectamente a que se debe-

- Jamir, déjala que venga a comer debe estar hambrienta- Apenas y termina de hablar, para que mi padre me alce y camine conmigo a la casa, parece que también tiene mucha hambre-

-Genial, la hora de la cena pequeña, no olvides que el dolor y el sufrimiento son nuestra fuerza-Sus ojos brillan cada vez que dice esa frase y la repite tanto que no creo poder olvidarla jamás.>>

Este ha sido uno de mis recuerdos, como siempre atormentándome en los sueños, ya han pasado 10 años desde esa fatídica noche donde perdí a mis padres y este es ultimo recuerdo feliz, antes del desastre, antes de que me arrebataran lo único que para mi tenia importancia, cada vez que sueño con esto un vació y tristeza me invaden, pero recuerdo las palabras de mi padre" el dolor y el sufrimiento son nuestra fuerza" lo repito cada vez que lo necesito para no rendirme, para no dejar de respirar; se que esta orgulloso de mi, no soy débil, esos 5 años de entrenamiento con el me enseñaron que mis debilidades son mi mayor fortaleza y por fin veo los frutos de tantos entrenamientos a tan corta edad. Una triste sonrisa se escapa por mis labios y a pesar de no poder dormir la gran parte de las noches, de cierta manera me alegra tener las pesadillas, hacen sus rostros tan reales que mantienen su imagen fresca en mi memoria día tras día.

La preparatoria hoy esta mas aburrida que cualquier otro día, siempre es una rutina, las clases, las charlas, todo es lo mismo cada día... Solo no puedo esperar por la clase de lucha, soy una de los mejores, y digo los porque soy la única chica que esta en el top 3 de los mejores luchadores de las estatales... Si, es fácil para mi, la verdad no tengo que esforzarme mucho, siempre tengo que contenerme en cada pelea, no puedo simplemente mostrar todo lo que puedo hacer, creerían que soy un fenómeno.

Ademas de ser buena en la lucha también me va bien en lo académico, soy popular y todos creen que soy perfecta, me alegra que este bien mezclada con el entorno... A veces me pregunto si alguno de todos ellos se dará cuenta de todo lo que me contengo... Pues no es que sea una nerd, pero hablo cuatro idiomas, me he leído casi toda la biblioteca, las armas y la lucha son mi fuerte, tengo un cuerpo escultural, bastante dinero como para armar toda una familia que solo existe en papeles, aprendí que la mejor forma de que nadie pregunte es darles una historia que les sirva para hablar para siempre de mi y tergiversar sus versiones sin acercarse a la realidad. Tengo una buena vida, pero nunca me siento segura, se que mi siguiente paso sera ir a visitar un conocido de mi padre cuando cumpla los 17 y me libre de la escuela.

Después del fatídico suceso mi padre me dejo todo un diario, donde esta especificado que debo hacer, pero no es tan fácil, solo tengo acceso a este por medio de un abogado quien a su debido tiempo me da la información necesaria para el siguiente paso... Instrucciones como terminar la escuela, aprender mas idiomas, conocer de armas, inversiones, negocios, historia, química, etc han sido unas de las muchas que he tenido que cumplir para seguir teniendo acceso a tan preciado libro, habrá que esperar solo faltan dos semanas para terminar la escuela y otra mas para mi cumpleaños, sera sencillo esperar.

<<- Lisha ven acá.- Dejo mi muñeco en el sofá y voy rápido al patio

-si padre.

-oye, sabes que te amo verdad y que daría mi vida por ti?- asiento y le sonrió.

-si papá, y yo a ti.- 

-bien pequeña, quiero que mires este libro, cuando crezca este sera el que te guié, para que sepas muchas cosas y puedas cumplir tu propósito, esmerate por cumplir  con todo lo escrito, se paciente y fuerte.

-si.- digo con euforia y alegría, una que no me faltaba en esos días.

-Te amo, y sabes que mamá también, si algún día nos pasa algo solo huye, pon en practica todo lo que te he enseñado, de manera que estemos muy orgullosos de ti.->>

Despierto de golpe, esos recuerdos son mi tormento, extraño mucho mis padres, no diré que extraño una vida normal porque nunca la tuve, pero extraño su calor humano, lo que me hacia humana. Me hundo en mis pensamientos y entonces una lagrima amenaza con salir, respiro profundo, repito mi mantra una y otra vez, no puedo dejar que este sentimiento me llene por que caeré en un hueco donde me sera muy difícil salir, debo ser fuerte, no importa cuanto duela, al final solo deja de hacerlo.

Trato de conciliar el sueño, pero no lo logro, así que me levanto muy temprano para alistar mis maletas, he decidido no ir a la graduación y ademas así hubiera querido tampoco hubiese podido ya que Pannar el abogado quiere que viaje a Canadá hoy mismo, dijo que empezaría una nueva vida, estoy ansiosa, mi vuelo sale muy temprano y quiero estar totalmente lista, aunque todas mis cosas ya se las han llevado y he tenido que hospedarme por tres días en un hotel, aun siento que faltan muchas cosas por llevar. Al llegar al aeropuerto vi muchas personas que se despedían de sus parejas y familiares, antes de abordar siempre miraban atrás, pero yo no, no tenia por quien voltear y me sentía tan bien de dejar esta vida de mentiras que había construido desde tan temprana edad.

El vuelo se me ha hecho eterno, se que estoy por llegar, el piloto acaba de anunciar que falta poco, me carcome la ansiedad, pero nadie lo nota he aprendido a ser muy buena demostrando lo que no es, ocultando mis emociones, manteniendo una serenidad sin importar lo que pase, me ha sido de gran ayuda en cada situación de la vida cotidiana de cualquier humano, a veces cuando me preguntaban por mis padres y el porque nadie nunca los veía, simplemente respondía que no importaba con la mayor serenidad y tranquilidad del mundo, así que nadie se preocupaba demás por ellos.

Por fin aterrizamos, al salir veo un señor con un cartel en alto con mi nombre, me dirigí hacia el , le saludo es un hombre mayor, muy amable. ya en el auto decido preguntar a donde vamos, me dice que a las montañas, me sorprende y emociona a la vez, amo la naturaleza y aunque es época de invierno, siempre amare mas su frió abrasador. Le pregunto el nombre, se llama Albert, un nombre joven para un anciano, el blanco es cada vez mas intenso y me alegra, me alegra saber que estoy aquí, en un lugar que se ve y siente igual a mi. Después de un rato Albert me informa que llegaremos en diez minutos que me prepare porque Pannar me recibirá, por fin lo conoceré y se que lo mejor es el regalo que se supone me tiene que dar: el libro de Papá.

NOTA: *Editado*

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