La cárcel.

2.1K 130 12
                                        

Pak:

Un sentimiento raro me invade cuando se desmaya en mis brazos, la sangre sigue chorreando mientras corro con su cuerpo en brazos hacia el auto, apenas subo Stiff arranca y acelera, mientras yo solo me ocupo en sostenerla y gritarle que más rápido:

- Ella tiene que estar bien- suelto a Mario que me mira un poco extrañado, nunca he dudado de su profesionalismo, pero ahora mismo no quiero que se cometan errores, no se puede cometer ni uno.

- Alpha, creo que debería sentarse, nos pone nerviosos a todos- Me susurra mi beta.

- Vamos Pak, detente me estas desesperando.- me dice Nic, cansado de que vaya de aquí para allá y de allá para acá.

- Crees que no lo intento??- le contesto muy enojado- Carajo, no puedo...- por la forma en que lo dije todos los que están en la sala me miran asombrados.

- Eres como un cachorro asustado, usa tu maldito súper oído para encontrar su latido, veras que es diferente, que se escucha diferente y monitoréalo desde aquí si eso te tranquiliza- Me dejo caer en una silla derrotado e intento encontrarlo, de todos los ruidos y latidos hay uno que se distingue, uno que sin siquiera ser diferente, me hace sentir diferente.

- Alpha- hace una pausa y no puedo soportarlo

- Habla ya- le grito con voz de mando,

- Tranquilo, ella esta bien... Aunque la herida fue bastante profunda, ya la cerramos y con su habilidad de sanar rápido estará bien muy pronto...- un fuerte alivio me invade, parece que me quitaran un enorme peso de encima...- puedo verla??- le pregunto.

- Claro... pronto despertara, bueno Alpha me alegra ayudarle pero tengo que irme.-

- Si, claro... Gracias Mario.- le digo, este asiente y se aleja; los demás dejan salir un suspiro y yo me quedo parado intentando decidir en ir a verla o no, no quiero alterarla, pero si no voy Asher y yo no nos quedaremos tranquilos. Decido que si quiero verla pero no vestido de esta forma, así que voy a casa y me doy una ducha rápida e intento armar en mi cabeza la forma en la que voy a decir que somos pareja.

- Alpha, la señorita se encuentra en el cuarto exclusivo tal y como usted lo solicitó- me dice la jefe de Enfermeras, asiento y voy directo allí.

Abro lentamente la puerta, entro y no la veo e la cama ¿A dónde carajos pudo haber ido? Además está herida, veo la pequeña puerta de la esquina abierta y de manera muy silenciosa me asomo y ahí esta, siento mi cuerpo tensarse al ver el reflejo de su espalda, una gran cicatriz hace presencia con un tono bastante rojizo, per lo que más llama mi atención son las pequeñas cicatrices en su espalda, al menos unas tres más y una parte de mi enfurece sabiendo que Nic con sus ya sabrá él maquiavélicos entrenamientos se las causa.

*Hay que hablar de eso con el viejo* aunque Asher respeta a Nic, no le gusta nada lo que está haciendo y sin poder evitarlo un pequeño gruñido hace que ella voltee inmediatamente.

- ¿¿Que haces aquí??- mis ojos no pueden evitar recorrerla de arriba a bajo antes de si quiera procesar la pregunta que acaba de hacerme

- ah, yo..- no se porque no me salen las palabras por estar distraído, vuelvo a sus ojos - Nada, quería ver como estabas, me ha parecido que esa herida en serio te puso mal, si no te hubiera traído tan rápido habrías muerto.- sus ojos me ven expectantes, como la justificación es suficiente pasa por mi lado y vuelve al cuarto.

- ah, pues gracias,.. por favor llama al doctor cuando salgas.- me quedo estático intentando descifrar si es que miente muy bien y puede ocultar el maldito cosquilleo que siento en todo el cuerpo al tenerla cerca o lo malditamente embriagante que es su olor ¿No se siente igual?.

- Yo salgo cuando yo quiera, Soy tu Alpha...¿Lo recuerdas?...- le digo con un tono arrogante, no puedo evitar molestarme, me esta corriendo de mi propio cuarto de hospital, en mi propio hospital.

- Bien señor Alpha, entonces puede quedarse en su habitación.- me ofrece una fingida sonrisa y solo se va.

Lisha:

Ese arrogante Alpha cree que es el dueño del mundo, está bien que quiera quedarse porque si, es su maldito hospital pero espiar a una mujer en el baño, eso si que no... Camino a lo ascensores, lo primero es ir a recepción e intentar buscar a Nic, que de seguro debe estar por aquí, ese viejo no va abandonarme, Janeth lo mandaría a dormir fuera donde lo haga.

- Ven aquí, Ahora.- me grita mientras camina en dirección al elevador, las personas a mi lado se timbran y agachan la cabeza, mientras yo le miro desafiante.- Carajo, es una puta orden, que vengas- Bien, las groserías son malas, muy malas...

- que grosero- digo lo suficientemente fuerte como para que el me escuche mientras aprieto el botón para cerrar el elevador.

- Te digo que vengas.- me grita ya muy enojado, aunque es joven y apuesto el mal humor le queda muy bien, le hace ver mas serio e imponente; Dejo que la sonrisa se forme en mi rostro y que el elevador empiece a cerrarse, para mostrarle el dedo del medio, su expresión merece una foto, el elevador se cierra y los que están dentro dejan de contener la respiración, mientras me miran muy asombrados.

las puertas del ascensor vuelven a abrirse, me relajo y sigo caminando lentamente, veo a Nic sentado y me dirijo hacia el, alguien me agarra por el brazo, apretando muy fuerte, no volteo pues ya se quien es, intento golpearle con el codo pero aprieta mucho más su agarre haciendo que duela.

- ¿Creíste que te puedes salir con la tuya?- mi sonrisa se hace notoria, no puedo ocultarla me divierte mucho que se enoje tanto y eso parece disgustarle aun mas.

- Soy Tu Alpha y me debes respeto- Grita con su voz de Alpha, todos en la habitación dan un salto e incluso algunos se van, siento en mi interior el deseo de encogerme como un animal indefenso, es lo que su voz y mirada causan, pero me niego a dar si quiera un paso atrás.

- Por favor Pak, tranquilízate- dice Nic en un tono preocupado, supongo que sus ojos rojos no son buena señal.

- Yo creo que deberías hacerle caso, es de mala educación gritar en un hospital.- le digo con un tono de burla, puedo ver la furia en sus ojos, como le molesta que le desafié.

- Claro que no, nadie puede venir a mi manada insultarme y desafiar mi autoridad e irse sin un castigo- el rostro de Nic se denota aun mas preocupado.

- ¿¿Entonces que harás brabucón???- le espeto ya un poco molesta, yo debería estar enojada, pues estaba espiándome a escondidas.

- Aun no lo se, pero mientras lo decido pasaras un tiempo agradable en una celda.- apenas ha terminado cuando me inyecta algo.

- ¿Pero que carajos...?- veo su media sonrisa e intento dar la vuelta, observo a Nic negar y a los demás verme totalmente asombrados, camino en dirección a la puerta per de repente todo mi cuerpo pesa y el mundo se oscurece.

Pak:

Se desploma en mis brazos y una vez más la cargo al auto, Stiff maneja en silencio y yo movido por el estúpido arrepentimiento me aseguro que respire e intento acomodarla mejor en mi regazo mientras disfruto de su olor.

*Eres un idiota, y luego los dos moriríamos de tristeza.*- me dice un muy ofuscado Asher...

Stiff apacar frente a la mansión pero le doy una mirada reprobatoria.

- ¿De verdad quieres meterla en el calabozo? Pak es mi luna. –

- ¡No es tu luna!, así que si te digo que la metas en el calabozo más oscuro, vas y lo haces.

Baja su cabeza y salgo del auto dando un portazo, por ahora no quiero pensar más en esto, no quiero pensar en que voy a hacer cuando despierte. Voy directamente al despacho y me tomo un buen trago de licor, esto me vuelve loco, el mundo de cosas que me hace sentir en un momento es difícil de procesar ¿Qué carajos voy a hacer?.

La Guardiana!.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora