3.

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Jungkook y sus padres ya llevaban tres días en el lugar. Decir que estaban asombrados era poco, el resort era gigantesco, y tenían tantas actividades que hacer que incluso no les alcanzaba el tiempo.

— ¿Qué viene después de esto? —preguntó la madre de Jungkook a su esposo.

—Según esto... —dijo revisando el itinerario de ese día.— Nada más.

— ¡Por fin! —Jungkook exclamó con júbilo.

Había estado estos últimos tres días con sus padres en todos los lugares, y ya estaba un tantito cansado sobre el amor que se demostraban. Los padres de Jungkook fueron a la habitación, mientras que él se dirigió a las áreas verdes a disfrutar de la agradable brisa. Tenía sus manos escondidas en sus bolsillos mientras vagaba por el lugar. A pesar de que Jungkook no era alguien muy llamativo, se daba cuenta de las miradas de algunas chicas, que luego cotilleaban entre sí. De todas maneras, a Jungkook no le interesaban las chicas.

Comenzó a hacerse tarde y tenía que cenar con sus padres, pero solamente por ese día quería estar libre de ellos, así que le preguntó a su madre si podía faltar a la cena, pero que a partir del día siguiente no faltaría más, a lo cual su madre accedió. Cuando llegó al sector de las piscinas, decidió remojar sus pies un rato, entonces se subió los pantalones, se sacó sus zapatillas y los calcetines, y metió sus pies al agua. Se sobresaltó un poco por lo helada que se encontraba el agua, pero fue más su sorpresa al ver al mismo joven de la noches anteriores nadando en la piscina de al lado.

—Así que aceptaste mi propuesta de la otra noche.

—Ni lo sueñes.

Jungkook trató de ignorar al muchacho de la otra piscina, estaba molesto porque había invadido su privacidad, pero ya le fue imposible cuando éste se lanzó a la suya, empapándolo completamente.

— ¡Oye! —le gritó molesto.

—Ahora que lo pienso, no te he preguntado tu nombre, niño. ¿Cómo te llamas? —preguntó el otro mientras se acercaba.

—Jungkook.

—Taehyung, un placer —hizo una especie de reverencia bajo el agua. Y nuevamente, aunque no quiso, le sacó una sonrisa a Jungkook.

— ¿Acaso siempre te la pasas en la piscina? —preguntó éste mientras estrujaba su camiseta.

—Soy una sirena encubierta, así que es razonable que esté aquí todo el tiempo.

Jungkook comenzó a reírse a carcajadas, contagiándole su risa al otro muchacho. No mentiría, Taehyung era gracioso, pero solo un poco.

—La verdad es que trabajo de limpia piscinas, pero ni se te ocurra burlarte.

Taehyung apoyó sus brazos en las piernas de Jungkook, levantando la mirada para verlo. Éste bajó su cabeza para admirar al otro muchacho igualmente. ¿Qué tenía él que no lo dejaba apartar la vista?

—Tienes lindos ojos.

Las mejillas de Jungkook se encendieron levemente. Taehyung notó eso y rió con ternura. El castaño se alejó de él, haciendo que Jungkook rápidamente despertara de su ensueño.

— ¿Tienes algo que hacer ahora? —preguntó el castaño saliendo de la piscina.

"Mirarte a ti". pensó, pero trató de ignorar eso.

—No.

Jungkook no escuchó más a Taehyung, ya que se quedó embobado viendo su cuerpo. Se había sacado la camiseta mojada, entonces era imposible que el azabache no viera su piel. Taehyung no era demasiado musculoso, pero para Jungkook estaba bien así; las gotas recorrían el cuerpo del castaño, haciendo que las mejillas de Jungkook se tornaran rojas por los pensamientos indebidos que estaba teniendo.

—Te encanta, ¿no es así?

Se quedó boquiabierto apenas escuchó las palabras de Taehyung. Intentó negar, pero el otro se largó a reír.

—Tranquilo, no pasa nada.

— ¿N-no te molesta? —preguntó temeroso. Sin apenas haberle contado, el castaño ya había sacado sus conclusiones de que Jungkook era gay, lo cual no estaba muy alejado de la realidad.

—Claro que no. ¿Por qué me molestaría? —el castaño por fin se colocó otra camiseta, pero como no podía cambiarse lo demás frente a Jungkook, se dirigió a los camarines, donde el pelinegro lo siguió.

—Ya sabes, la gente...

Taehyung rápidamente se cambió la parte de abajo, colocándose otro bóxer, unos jeans negros rasgados y poniéndose sus zapatillas, haciéndose una nota mental de que tenía que tomar una ducha cuando llegara a su habitación. Salió de allí junto a Jungkook, no sabiendo a dónde se dirigían.

—La gente es una mierda si cree que tiene el derecho a molestarse por la orientación sexual de otra persona —agregó de repente.

Siguieron caminando por los pasillos del resort, hasta que llegaron a una especie de pérgola bastante linda. Se quedaron allí, admirando el paisaje de noche.

—Y bien, pequeñín, ¿cuántos años tienes?

— ¡No me digas así! —hizo un puchero.— Tengo 20.

—Aw, eres una ternurita. —Taehyung agarró su mejilla suavemente.— Yo tengo 22.

— ¿Qué? ¿Crees que porque eres 2 años mayor que yo eres la persona más grande en este mundo?

—Probablemente.

—Eres muy odioso, pero me caes bien.

—Lo mismo digo, Kook.

En esa pérgola estuvieron casi hasta las tres de la madrugada hablando, quizás no de cosas demasiado importantes, pero con solo sentir la compañía de la otra persona se sentían bien. Demasiado bien.

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Nota:

Probablemente este es un capítulo con bastante relleno (?) pero de todas maneras espero que les haya gustado.
Al menos hubo más interacción entre los niñoh
͡° ͜ʖ ͡°)
Gracias por leer, linduras💕

friends ➳ vkook. [EN EDICIÓN] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora