EL MUNDO se podía estar cayendo a pedazos a tu alrededor y sientes que nada vale la pena, sin embargo, en esos momentos siempre encuentras a alguien de quien sostenerte. Hay personas de las cuales tienes la certeza de que nunca van a traicionarte, esas con las que siempre puedes contar.
Cualquiera pensaría que por eso escogí el piso de Rosé, porque necesitaba sostenerme de alguien. No necesitaba hacerlo. Me negaba a convertirme otra vez en la chica con el corazón roto por un Holland. Esa chica que pasaría llorando hasta olvidarse de sí misma, se recriminaría porque pudo haberlo hecho mejor y se odiaría por haber abierto su corazón y confiando de nuevo. Por eso empujé lejos el dolor de sentirme traicionada y estafada.
Bloqueé toda conexión real con mis emociones.
Estaba insensibilizada y entumecida.
No sentía nada.
Era lunes y mi día de descanso, así que no tenía mucho por hacer. Había llegado al piso de Rosé hace veinte minutos, pero no la encontré. Ella era muy exótica y extravagante, pero en algunos aspectos era muy básica y como era olvidadiza guardaba una copia de la llave en una planta que estaba como decoración en el pasillo. La anciana de al lado también hacia lo mismo.
El piso de Rosé era minimalista y muy femenino. Tanía dos habitaciones espaciosas, una enorme y moderna cocina, la sala de estar tenía cómodos sofás en tonos grises combinado con almohadones rojos. Cuando empecé a buscar un lugar al que mudarme, este edificio fue mi primera opción, pero nadie se estaba mudando. Lo que hacía a los inquilinos pocos solidarios.
Mi celular comenzó a vibrar otra vez. No había dejado de hacerlo desde que salí del edificio donde vivía Christopher, pero rechacé todas y cada uno de sus llamadas sin ningún tipo de culpa o curiosidad por lo que tuviera que decirme. Estaba consciente que se debía a mi etapa de... ¿negación? Podría llamarla así. Cuando esa etapa pasara, la realidad me explotaría en la cara tirándome una vez más al hoyo oscuro del que apenas había salido. No estaba muy segura de si iba a poder hacerlo una segunda vez.
Pero mientras todo a mi alrededor careciera de importancia para mí, iba a tratar de aprovecharlo. Tal vez me aferraría a esa sensación hasta con los dientes, porque la alternativa no era agradable. Apagué el celular. Me acerqué a la cocina en busca de helado. Eso era por lo que de verdad había ido ahí. Rosé solía guardar enormes dotaciones de helado. Abrí la nevera tomando un bote de minter wonderland.
Fruncí el ceño extrañada con el sonido de unas llaves y la puerta abriéndose. No le había dicho a Rosé que estaba en su piso, no era exactamente un problema, no necesitaba permiso para entrar, pero esa vez no venía sola. Llevándome una cucharada de helado a la boca no pude evitar poner los ojos en blanco cuando reconocí la voz de su acompañante, Caroline.
Era una excompañera de la escuela y una de las chicas que alguna vez llame amigas. Sabía que estaba en la ciudad porque Rosé me había invitado a salir de fiesta con ella y las demás chicas, pero no. Yo era de las personas que no olvidaba y aunque ya no les guardaba rencor por difundir rumores asquerosos sobre porqué Ethan terminó conmigo, no quería volver a relacionarme con ninguna de ellas. La única persona que siempre se quedó a mi lado fue Rosé, porque ella conocía toda la historia. Aunque si yo hubiera decidido no contarle nada de lo que realmente pasó conmigo, estaba segura que igual se hubiera mantenido a mi lado.
Escogí a Rosé como mi mejor amiga desde la primera vez que hablamos y tuve la suerte de que me escogiera también.
Ahora a menos que me tirara por la ventana no tenía otra opción más que salir y saludar a Caroline.
—...quisieras hablar del tema no me llamarías —dijo Caroline con voz excitada. Ellas dos siempre se juntaban para hablar de chicos. Recordé que Marco me preguntó si Rosé estaba saliendo con alguien, así que me quedé quieta, esforzándome por escuchar—. Es guapo, está soltero y después de las miradas que le lanzabas la semana pasada, no me sorprende que terminaras en su cama de nuevo. Sabes que siempre quise que algo pasara entre ustedes. Tienes la oportunidad. Ethan y tú tienen una historia que podría funcionar.
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ꜱᴇᴄᴜᴇʟᴀꜱ ᴅᴇ ᴜɴ ᴀᴍᴏʀ || #1
RomanceA veces las heridas son más profundas de lo que imaginamos, vamos por la vida dejando todo atrás... hasta que las secuelas aparecen. Aquí estoy, cerrando el círculo enfermizo en el que seguía atrapada.