Llegamos a su casa y en abrió la puerta, pase y Joel estaba bailando con alguien, aun no se habían percatado de nuestra presencia.
—A él que se le caen los pantalones pierde —dijo el chico y comenzaron a bailar, se dieron vuelta y me vieron ahí con Israel, se les cayeron los pantalones y Isra me tapo los ojos.
—Ya no se puede traer nadie a casa —dijo él.
—¿Que acabo de ver? —pregunte y luego se acerco alguien y me besó, lo empuje—. Israel no —abri los ojos y era Joel, me tape la boca y el se fue por las escaleras—. Lo siento... no sabia que era el.
—No te preocupes, hablaré con el después —sonrío Isra, el era muy serio con los demás pero a mi lado siempre sonreía.
—Me preocupa... ¿Puedo hablar con el? —pregunte y Israel asintió, me hizo seguirlo por la escalera y me llevo a la puerta de una habitación. El se alejo y yo toque la puerta, el abrio y me vio.
—¿Que haces aquí? —pregunto y miró para ambos lados del pasillo.
—Pedirte perdón —susurre.
—No tienes que disculparte, fue mi error —dijo y se recargo en el marco de la puerta.
—¿Podemos hablar de lo que sientes? Digo... solo si quieres —el asintio y me dejo pasar a su habitación.
—¿Que quieres que te diga? —se sentó en su cama.
—¿Por qué me besaste? —pregunte y el me miro, me senté en un sillón pequeño y el en su cama.
—Quería hacerlo, como cuando éramos niños —sonrió y se acostó en la cama, miró al techo. Me sentí como una psicóloga.
—¿Y la razón fue? —pregunte.
—Porque me gustas —se puso serio.
—Joel... si es por lo que paso cuando éramos niños... —suspire—. No te dejes llevar por sentimientos o juegos de niños —sonreí—. Haces una hermosa pareja con Alexa, vuelve con ella y olvida que me has visto.
—¿Por qué me pides eso? —pregunto y me miro.
—Porque yo no te veo como algo más que un amigo que conocí en el orfanato —conteste—. Pero no te sientas mal por mi, no vale la pena, quizás Dios te tiene preparado algo mejor para ti —sonreí y el se sentó y yo me pare.
—Eres muy madura para tu edad —dijo y sonrió.
—Gracias —el mantuvo la sonria y me acerqué a él—. En fin, lo que trato de decirte es que... soy pequeña ahora, no se lo que quiero y, no sabes si en un futuro deje de verte como mi amigo, quizás en unos años eso cambie y te vea como algo más —el sonrió y extendió sus brazos para abrazarme, lo abrace y me susurro.
—Voy a esperar te, yo se que tu eres para mi, lo supe desde el día en que te vi entrar al orfanato —me aleje un poco para ver su cara.
—Gracias —sonreí y le di un beso en le borde de sus labios—. Debo hacer tarea con Isra, ven con nosotros —le di la mano y el la tomó.
Salimos de la habitación y el me guió a la sala donde Israel nos esperaba con té, nos sirvió a todos y se sentó al frente del chico que bailaba con Joel.
—Vamos Gabo, prueba tu té —Israel desafío al chico, al parecer ese era su hermano. Joel se sentó al lado de Gabo y yo al lado de Isra. Gabo agarro un pedazo de pan y sin dejar de mirar a Isra con una mirada amenazante y de peligro, metió el pan en el té y luego se lo llevo a la boca, se quemó.
—¡Israel! —le grito Gabo.
—Dos veces en un día —se rio Joel y yo también reí.
—No se rían —dijo y se limpiaba la boca con una servilleta, mire a Israel y este sonreía.
#199 en romance, Las amo!!!
Comenten mucho, me hacen feliz.
Me estoy enamorando de verdad de Israel ayuda.
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Huérfana -Joel Pimentel
Fanfiction___ una niña que una noche de octubre es encontrada lloraron por las calles, es rescatada por una señora del orfanato. Tras el primer día en ese lugar, ___ tiene que acostumbrarse a vivir sin amigos, con el tiempo conoce a un niño, el fue la razón p...