Renacer - Bensler

Capítulo 40

—Vive conmigo... —dijo sin rodeos—. No me parece bien que estemos de un lado a otro con Emily, o tu misma —notó el visible cansancio en su mirada—. Liv, bebé, llevamos seis meses juntos y ambos sabemos que esto es lo mejor. Emily debe vivir bajo el mismo techo que sus padres. Nos amamos Liv. Yo quiero hacer esto... hace tiempo. Sólo estaba esperando por ti —tomó sus manos—. Vivamos juntos.

—Está bien —asintió y sonrió.

—Mañana vamos a buscar un lugar más grande... —su departamento era pequeño para tanta gente—. Mañana vamos a buscar una nueva casa donde tú, yo y nuestra hija vamos a vivir juntos —la abrazó, eso era lo que quería desde que había comenzado su relación, pero le había dado espacio. 

Se habían quedado recostados en el sofá conversando. La decisión de vivir juntos no la había tomado por sorpresa, después de todo la primera vez que hablaron de ellos como pareja habían hecho algún comentario referente a esa posibilidad y ahí estaban después de seis meses conversándolo nuevamente.

—¿Estás seguro de esto?

—Por supuesto que estoy seguro bebé. Es lo que he querido que suceda desde el primer día pero tenía que esperar a que tú también quisieras —besó su frente.

—Yo quería... hace mucho tiempo pero no quería que fuera nada apresurado —aclaró, cada vez que no se veían en la noche era muy duro para ella.

—Deberías haberme dicho antes que estabas cansada de esto Liv —dijo con su cabeza apoyada en la de ella.

—No sé qué me paso. Simplemente desperté cansada de todo hoy. Lo siento, no quise molestarme tanto —se disculpó. Elliot negó suavemente con la cabeza.

—está bien bebé, pero me gusta cuando me dices las cosas, antes de que te superen —no estaba molesto, por supuesto que no, solo estaba preocupado por ella.

—¿Crees que los chicos tengan problema en que vivamos juntos? —preguntó temerosa por la respuesta de Elliot.

—¿Estas bromeando cierto? —sonrió—. Ellos te adoran. Estoy seguro que están consciente de que esto pasaría en algún momento.

—Emily va a estar feliz... de verte todos los días —levantó la cabeza y llegó a sus labios, rozó suavemente sus labios a los suyos.

—¿Y tú? ¿Vas a estar bien viviendo conmigo? —preguntó levantando una ceja.

—Ya soy feliz. Sólo de pensar que voy a despertar a tu lado me vuelve infinitamente feliz El, en serio —dijo ella sonriendo dulcemente—. Me encanta cuando despierto entre tus brazos, me hace sentir tan amada y segura... —Elliot la acerco más a él—, me encanta despertar de esa forma contigo amor y poder estar juntos en la noche —definitivamente esa era otra de las cosas que adoraba también—. Entonces, ¿mañana vamos a buscar un lugar para nosotros? —preguntó bostezando, estaba agotada, pero esos momentos, donde eran solo ellos dos sin duda eran un tesoro.

—Mientras antes, mejor.

—Mañana entonces —dijo cerrando el tema, estaba emocionada por hacer este siguiente paso en su relación. No tenía ninguna duda de que era lo correcto, para ellos, y para Emily, tener a su padre presente todos los días sin duda iban a hacerla muy feliz.

—Vamos a la cama Liv, te ves cansada.

—Pero podemos seguir conversando en la cama —se puso de pie.

—Podemos hacer otra cosa también en la cama —arqueó una ceja.

—Elliot Stabler, ¡eres insaciable! —le lanzó un cojín del sofá.