Renacer - Bensler

Capítulo 106

—¿Sabes dónde esta papá y mamá? —preguntó el niño con un tono de voz bajo, casi inseguro.

—¿Sabes como se llaman?

Simón asintió y sonrió.

—Kate y Pierce... —dijo Simón sonriendo, la primera vez que lo hacía desde que había llegado.

—Vamos a buscarlos, ¿te parece?

Ella sabía que la gente detrás de la ventana seguía trabajando mientras ella trataba de obtener algo de información de Simón. Al menos ya tenían algo claro, habían dos padres presentes en busca de su pequeño hijo perdido.

—Vamos a buscarlos, te lo prometo... —dijo Olivia, sentía como el pequeño había confiado en ella—. ¿Quieres algo más? —le preguntó para animarlo, el niño movió la cabeza.

—Estoy cansado... —se pasó la mano por sus ojos.

—Yo sé cariño... sólo un par de minutos más —pidió, si él no cooperaba no iba a llegar muy lejos—. Simón, ¿recuerdas lo que el señor te pedía cuando tenías que salir de casa?

—Que le llevara una chica bonita —dijo Simón bajando la cabeza, casi avergonzado.

—Cariño, no has hecho nada malo... —vio como él estaba apunto de llorar.

—Sí... él les hacía daño. Yo las escuchaba cuando gritaban... y después se quedaban en silencio.

Olivia miró al vidrio, el pequeño claramente había estado presente. El estómago de Olivia se apretó.

—Cariño... ¿viste algo? —rogó por que la respuesta fuera no.

—Cuando le llevaba las niñas, me encerraba en un cuarto oscuro... —ella respiró un poco más tranquila, una cosa menos de que preocuparse, al menos no los había presenciado.

—¿Puedes recordar como era su cara?

Simón movió la cabeza negativamente, sus ojos se volvieron húmedos. Elliot le había comentado a Olivia que habían encontrado un cuarto que tenía una cama desaliñada, donde estaba seguro que dormía el pequeño.

—Simón... ¿el hombre estaba todo el día en la casa?

—No quiero hablar mas de eso... por favor —rogó el pequeño, Olivia sabía que estaba cansado pero quería intentar una última cosa.

—Cariño, ¿recuerdas la última vez que viste a mamá y papá?

—Yo quería ver Cars...

—¿La película de autos?

—¡Sí! —dijo con entusiasmo—. Mamá me dijo en el cine grande que no me moviera de su lado —bajó la cabeza, avergonzado.

—¿Y qué paso? —preguntó sabiendo a donde iba esto.

—El hombre malo me tomo... —contestó Simón con tristeza. Olivia tenía una fecha estimada de su secuestro en mente, ellos habían llevado a los niños pequeños al cine a ver la película hace un par de semanas atrás.

—Cariño... va a venirte a buscar una amiga mía. Vas a estar en una casa con otros niños mientras buscamos a tus padres, ¿bien? —ella confirmaba con él que entendiera todo, era aún tan pequeño para todo lo que estaba sucediendo.

—¿Olivia? 

—¿Si cariño? —ella había puesto su mano en la barriga.

—¿Vas a encontrar a papá y mamá? —el niño la miró.

—Vamos a encontrarlos, te lo prometo.

Elliot se había quedado afuera observado en todo momento la conversación de Olivia y el pequeño Simon. Después de un par de horas había podido obtener algunos datos, que si bien es cierto no ayudaban con el caso, al menos ayudaban con encontrar a los padres del pequeño.