Fast

1.2K 84 46
                                    

Lo prometido es deuda. Capitulo dedicado a:
@ChimeSantana
@HeadlessAngel
@Soledad8998
@TheLiteralyMermaid
Ya que ellas dijeron: entendi esa referencia *inserte a capitán América aquí*
Disfrutenlo!

Simon se encontraba en la sala haciendo prácticamente nada. Penny había salido a hacer unas compras, y después de eso saldría con unas compañeras de su universidad a almorzar. Vida social. Quien la necesitaba.

Se estaba preparando para iniciar un maratón de Los Juegos del Hambre cuando tocaron el timbre. Se levanto con toda la pereza que le permitía su cuerpo, cruzo los dos metros que separaban al sillón de la puerta, y abrió esta, revelando a Baz. Simon abrió los ojos como platos, no esperaba que su novio fuese a su apartamento.
--¿Me vas a dejar pasar?-- oyó decir a Baz. Simon, aún en su letargo, se hizo a un lado, permitiendo el paso del pelinegro.

--No es que no te quiera aquí, pero, ¿porque viniste?-- Baz volteo a verlo.
--Porque, Simon, he estado jodidamente ocupado con la universidad, y no he podido tocarte en una semana, ¿sabes que significa no?--Baz sonrió y avanzo hacia Simon, el cual, se encontraba pegado a la pared, temiendo que sus sospechas fueran ciertas. El pelinegro pego su rostro al de Simon, y acercó su boca al oído del rubio.
--te voy a follar hasta que a los vecinos se les quede grabado mi nombre-- Simon se estremeció. Apenas acababa de recuperar la capacidad de caminar sin cojear, y al parecer, la iba a perder otra vez.

Baz lamió desde abajo del lóbulo de la oreja de Simon hasta su clavícula, a este contacto Simon se estremeció.
--B-Baz...-- gimió. Baz sonrió y empezo a bajar lentamente sus besos. Metió sus manos debajo de la camiseta de Simon, acariciando su torso, para agarrar el dobladillo y pasarlo por encima de la cabeza de Simon, quitándole la prenda. Baz procedió a besar, lamer y dejar marcas en el torso de Simon, mientras que este solo atinaba a soltar gemidos y jadeos.

Baz subió a la boca del rubio, y empezó un beso deseoso y necesitado, mientras que sus manos paseaban libremente por el cuerpo de su novio. Baz condujo a Simon al sofá, para dejarlo caer en este. Se posiciono encima de el y siguió con su trabajo, quitando el pantalón del rubio del camino, y apartando su propia camiseta, dejando que Simon disfrutara de la vista de su torso por unos segundos, para después proseguir con los besos, cada vez mas cerca de la entrepierna de Simon.

Cuando llego a la zona pelvica de Simon, le dedico una mirada llena de deseo, y amor, para meter sus dedos índices a cada costado, dentro de la ropa interior, y la bajo lentamente, acariciando con la yema de sus dedos la piel bronceada de Simon, deleitándose con la suavidad de su piel. Cuando tuvo completamente desnudo a Simon, se detuvo un momento para contemplarlo. Observo su piel bronceada, sus mejillas rojas, como su pecho subía y bajaba aceleradamente, como su boca soltaba jadeos, y la forma de su cabello completamente despeinado.

Baz apretó los labios, y rápidamente se quitó el pantalón y la ropa interior, y volvió a posicionarse encima del cuerpo de Simon. Llevo dos de sus dedos a la boca del rubio, para que este los chupara. Simon metió los dedos en su boca, chupando y procurando que estuvieran bien lubricados, porque, bueno, si iba a perder la capacidad de caminar sin cojear, al menos quería que se sintiera bien antes de todo. Cuando Baz considero que era suficiente, saco sus dedos de la boca de Simon, dejando que un hilo de saliva los uniera por unos segundos. Llevo lentamente su mano a la entrada de Simon, el cual, se había abierto de piernas lo mas que le permitía el sillón, para que fuera mas fácil para Baz.

Baz metió con cuidado un dedo, moviéndolo lentamente, esperando que Simon se acostumbrara. Simon tenia una mueca en su rostro, sabia que en unos momentos se sentiría mejor, pero no podia evitar que el principio se sintiera incómodo. Baz siguió moviendo lentamente su dedo, y cuando oyó que Simon soltaba un jadeo, lo considero señal para agregar el otro.

En unos minutos, Baz tenia abajo de el a un Simon Snow totalmente desesperado, que movia la cadera en busca de mas fricción, que agarraba los extremos del sofá para resistir, y que en jadeos desesperados decía su nombre.
–– ¿Que quieres Snow?–– dijo Baz, tocando con su dedo índice el punto de Simon.
Simon soltó un gemido.
–– Q-quiero t-todo de ti, d-dentro de mi–– soltó entre jadeos.
Baz sacó del interior de Simon sus dedos, dejando a este con un vacio, que rápidamente Baz se encargó de llenar, metiendo lentamente su miembro.

Simon apretó los labios, el miembro de Baz entraba lentamente en el, ardía un poco, si, pero no podía evitar que también le causaba placer. Cuando Baz entro completamente, esperó unos momentos para que Simon se acostumbrada, y al sentir que el rubio movía lentamente su cadera, vio la señal para empezar a moverse. Empezó lentamente, moviendo sus caderas de adelante a atrás, deleitándose con la estrechez de Simon y su calidez.

Simon sentía que estaba en el cielo. Con cada estocada Baz lo llenaba y rozaba por completo sus paredes internas, con cada movimiento que Baz hacia el dolor iba disminuyendo y el placer aumentando.
––¡B-Baz! ¡M-mas fuerte!–– sollozo Simon. Baz atendió esa petición, con movimientos casi erraticos, lo mas rápido y fuerte que podía.
Simon sentía que podía terminar en cualquier momento. Todo lo que Baz hacia lo estaba llevando al paraíso, sus estocadas rápidas y precisas, sus manos acariciando su cuerpo, y sus labios besando su cuello y a veces sus labios.

Ya estaba sintiendo el familiar nudo en el abdomen que le indicaba que estaba a punto de terminar. Enredo sus piernas en la cadera de Baz, para faciliar la entrada en esos últimos momentos. Baz sintió como las paredes de Simon se estrecharon, y, si era posible, se movió mas rápido, alcanzando junto con Simon el climax. Baz se dejo caer encima de Simon, ambos con las respiraciones agitadas y totalmente agotados. Baz salió lentamente de Simon y se puso a su lado, abrazándolo.
––Te quiero Simon–– la cara de Simon se torno roja.
––Yo también te quiero Baz–– El mencionado sonrió y sintió como Simon ocultaba su cara en su pecho.

Y al final, a ambos les empezó a ganar el sueño, y durmieron allí, en el sofá de la sala, abrazados.
Unas horas después, al llegar Penny con sus amigas, tuvo que evitar que sus amigas les sacaran fotos y dar pañuelos para unos casos de sangrados de nariz. Y ni Simon ni Baz se salvaron del regaño que Penny les hizo.

N/A, actual: solo para decir que ya nunca más escribiré smut así -?-

One-Shots Snowbaz Where stories live. Discover now