-¡Marcelo!- gritó él desde la puerta -¡Alessandro!- volvió a gritar desde la puerta principal.
Escuchó como una puerta se abría y pensó que era uno de los hombres de la manada pero no, era Stella. La mujer lo miró confundida mientras bajaba las escaleras. Y cada vez que se acercaba más a donde estaba el menor fruncía más el ceño. Ese olor que desprendía el menor era muy desesperante. Sexo, nudo, miedo, coraje...¡nudo!
-¿Francesco te anudó?- preguntó confundida.
Josh volteó a verla y abrió los ojos de par en par. ¿En serio había olido su esencia? ¿Tan penetrante era? Sus mejillas estaban a punto de estallar. ¡Que vergüenza! La mamá de Marcelo se había dado cuenta de lo que estuvo haciendo con Francesco. Definitivamente necesitaba un hoyo que lo sacara de esa penosa situación.
-A-Al parecer...- susurró apenado el menor y fue el turno de Stella abrir los ojos de par en par.
-Ponte esto como si fuera perfume- buscó una botellita de cristal que estaba en la mesa detrás de ellos -Esto se usa cuándo alguno de nosotros está en el celo.-
Josh la miró confundido y tomó reacio la botella. La abrió y por instinto la acercó a su nariz, no olía a nada. Era un aceite pero no olía a nada en particular. Hizo lo que Stella le pidió pero aún así no notaba un cambio en sí.
-No huele a nada...- dijo frunciendo el ceño.
-Esa es la idea- dijo Stella respirando normal. Su esencia era apabullante -Cada vez que cualquier lobo de esta casa está en celo, a su mate se le pone este aceite. Así ninguno de los demás lobos se sentirán atraídos por la pareja del lobo en celo.- explicó y en ese momento dos hombres adormilados aparecieron.
Marcelo y Alessandro bajaron y ambos se miraron. Ya conocían el olor al aceite y decidieron no decir nada. La cara de Josh suplicaba "no preguntes, por favor".
-¿Que pasó, Josh?- preguntó Marcelo al ver a Josh bastante nervioso.
-Fran...Fran está por matar a...a- dijo y agradeció que Marcelo no lo dejó terminar. El nudo en la garganta no lo dejaría hacerlo.
Corrió detrás de Marcelo y Alessandro. Rezaba mentalmente para que Francesco no cometiera un error. No podría soportar que él estuviese lejos de él y en la cárcel. Pero cuando entró y vio a Francesco con el cuchillo ensangrentado y él lleno de sangre se asustó. Pensó que su italiano insoportable, su lobo pervertido, estaba herido pero no, no era él. Vio al bestia casi inconsciente y frunció el ceño cuando vio los muslos ensangrentados con, lo que parecía ser, unas letras.
'Violador'
'Bestia'
-Gr-Grandote...- llamó con voz temblorosa y no tuvo respuesta.
Evitó llorar porque sabía que perturbaría más al italiano. Sabía que haría enfadar más a Francesco y no por su culpa sino por el bestia que se estaba desangrando en la silla del comedor. Se acercó lentamente y se arrodilló frente al rubio y le tomó la barbilla para que lo mirara. Aún tenía los ojos amarillentos y no se asustó pero sí frunció el ceño. No recordaba cuan intenso era el color de sus ojos en estado lobo. Acarició con sus pulgares las mejillas del mayor y le dio un tierno beso en los labios. Como por arte de magia volvió en si, aquellos ojos azules que tanto amaba lo miraban con culpa.
-¿Que hiciste?- susurró Josh con tristeza.
No era un reproche pero ahora sí estaría preocupado. Tendría que llamar a la policía y ¿que dirían? Él entró a su casa y se defendieron, sí, pero al ver las marcas de tortura y las palabras escritas en sus muslos las autoridades no estarían del todo convencidos. Aunque cuando lo identificaran esperaba que todo saliera bien.
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Tú eres mi mate「 Heart of Wolves II 」
WerewolfJosh, en un viaje, para acompañar a su mejor amiga, Altair, conoce a Francesco, un italiano con un secreto interesante. Historia entrelazada con Tú, mi alfa. #218 en Hombre Lobo 6/9/17 #156 en Hombre Lobo 14/9/17 #95 en Hombre Lobo 18/10/17 #78 en H...