31. Ningún avance

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La noche en la que Josh había llegado al hospital había sido un caos. Había entrado en shock alertando a los paramédicos y a Francesco. Y en cuánto llegó al hospital, al instante, entró en coma dejando a Francesco devastado.

-¿Te gustó esta historia?- preguntó Francesco y no obtuvo respuesta, como siempre desde hace cuatro meses y una semana.

Su mate no despertaba y lo estaba volviendo loco. Aún no sentía el lazo y eso era lo que lo tenía al borde de la locura. Stella le había pedido que no se precipitara a los hechos porque Josh estaba vivo. Pero él no se sentía así, él estaba muerto en vida. Tenerlo frente a él confinado en aquella cama sin moverse era una tortura. Aunque no se quejaba, agradecía bastante a Alexander y a Mitchel tanto el haberlo encontrado cómo el actuar rápido y llamar a emergencias. Porque la doctora que lo atendía le explicó que si quienes lo encontraron no lo hubiesen hecho la historia sería otra.

-Francesco, cariño hablemos un poco- pidió Stella indicándole que lo hicieran afuera.

-¿Ahora?- preguntó viendo el rostro dormido de Josh y a su nonna.

A Stella le partió el alma ver a Francesco tan decaído. Tenía ojeras, unas que ni tan siquiera pensó en que tenía, la barba la tenía toda descuidada al igual que el cabello. Sus ojos ya no se volvían amarillos y se volvieron opacos. Y ni hablar de su peso, viviendo, literalmente, en un hospital y sobreviviendo a un café y un emparedado al día porque la verdad era que ni hambre le daba. Y lo comía porque era obligado por el alfa y no podía negarse al alfa o tendría consecuencias.

No quería separarse de él. Aunque aún no despertaba no quería separarse de él. Francesco estaría junto a él siempre y lo que suplicaba cada noche era que despertara. Ya quería ver los ojitos de su chiquillo mientras él le sonreía. Pero era un proceso largo, la doctora había sido clara en eso. Podía estar una semana en coma cómo podía estar años también. Solo quedaba esperar. Algo que con el tiempo Francesco ha aprendido hacer.

-Estuve leyendo un poco- comenzó hablar Stella y él asintió prestándole toda la atención del mundo.

-¿Que encontraste?- preguntó

-Sobre el no sentir el lazo y que él estuviese vivo nada...- habló y vio la desilusión en sus ojos -Pero sí encontré algo interesante, no sobre lobos pero es lo más parecido. Leí que los gemelos sienten lo que siente el otro, al igual que nosotros con nuestras parejas...- Francesco asintió

-Hola...- saludó Altair al llegar.

-Hola, bella- dijo Stella abrazándola.

Francesco la abrazó y le pidió que fuera con Josh porque lo había dejado mucho tiempo solo ella asintió y fue. Se concentró en lo que le decía Stella y asentía de a ratos.

-Entonces, ¿su subconsciente se bloqueó para que yo no sintiera lo que le pasaba?- preguntó bastante afectado.

-Esa es la única explicación lógica para lo que les está pasando- dijo ella.

El rubio frunció el ceño, quizás Stella tenía razón. Quizás Josh decidió bloquear ese momento y que él no sintiera lo que el castaño sentía. Por eso al entrar en coma él todavía no sentía el lazo. Debía esperar a que su chiquillo saliera del coma para así poder confirmar lo que le había dicho Stella.

-Fran, ve a casa. Necesitas descansar un poco y comer algo...- dijo Altair mirándole triste cuando Stella y él entraron a la habitación -comida de verdad. Yo me quedaré con él en lo qué- dijo

Tú eres mi mate「 Heart of Wolves II 」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora