Un mes entero y todavía Francesco y Josh no creían que la bebé entre ellos era suya, completamente suya. Era imposible creer que aquel saquito de cachetes había salido de su vientre. Pero a medida que pasaban los días lo asimilaban más. Cada día que pasaba la niñita les recordaba que era de ambos. La esencia, las facciones de ambos, el carácter de alguno de los dos.
-Quiero viajar a casa. Quiero que la conozcan...- dijo el menor quitándole la pijama a la niña.
-¿Y quieres decirles como fue que la tuvimos?- preguntó Francesco frunciendo el ceño mientras veía a ambos -tendríamos que explicarles desde el principio. ¿Estás dispuesto a hacerlo?- preguntó
Josh comenzó a jugar con la barriguita de la niña evitando las preguntas de su grandote. ¿Que podía decir? Él no quería que sus padres supieran de Francesco y su lobo pero tampoco quería que pensaran que esa adorable bebé era adoptada. Era su hija, su propia hija. No podía con el orgullo de decir que ella era su hija y de Francesco. Y quedarse callado no era una opción.
La primera vez que la familia Bendetti había visto la niña había sido un caos pero uno de los buenos. Camelia, Sofía y Salvatore les creyeron de una cuando él y Francesco se lo dijeron pero los demás les costó mucho más. Así que ni se imaginaba como era que sus padres y su abuela lo tomarían. Pero aún así él quería decirles a sus padres que esa bebé era completamente suya y de Francesco. Y si no les creían tenía su cicatriz, además de que esa niña era la viva imagen de ambos.
-Yo estoy dispuesto pero, ¿tú?- preguntó por fin levantando su mirada para ver a Francesco.
-¿Seguro que lo tomarán bien?- el miedo en la mirada de Francesco era visible.
-No estoy seguro de como lo tomen pero no quiero esconder que yo soy su verdadero padre y estoy seguro que tú tampoco.- dijo viéndole triste y el italiano asintió.
-En eso tienes razón. Bien, ¿cuando viajamos?- preguntó algo preocupado Francesco.
Tenía que prepararse mentalmente para eso. Porqué estaba seguro que si la familia de Josh no lo tomaba muy bien él sabía que Josh estaría mal. Su familia lo era todo para Josh y que esta lo rechace sería un golpe fuerte. Así que solo esperaba que todo saliera como el menor lo tenía planeado.
-Mañana mismo- susurró Josh mientras jugaba con la niña
-¡¿Que tú dices?!- gritó Francesco sorprendido y Josh ignoró el grito que soltó.
-D-De hecho tenemos que estar en menos de ocho horas en el aeropuerto...- dijo y sintió la mirada incrédulos de su grandote -no me mires así...- susurró apenado.
-Pero bebé, yo pensaba que íbamos dentro de unas semanas no en menos de ocho horas- dijo Francesco mientras alzaba el rostro del menor que evitaba a toda costa su mirada -¿Estás seguro de lo que vamos hacer?-
El menor negó con la cabeza sin apartar la mirada del italiano. No estaba seguro de hacerlo pero tenía que decirles a sus padres y a su abuela que esa niña hermosa que descansaba en la cama era su nieta. Miró indeciso a Francesco pero también le suplicaba que lo apoyara. Francesco se acercó y dejó un tierno beso en su frente.
-Te apoyaré siempre...- susurró y escuchó un suspiro por parte del menor -Te amo...- susurró y Josh sonrió.
-Te amo más y gracias por estar siempre...- dijo antes de besarlo tiernamente.
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Tú eres mi mate「 Heart of Wolves II 」
WerwolfJosh, en un viaje, para acompañar a su mejor amiga, Altair, conoce a Francesco, un italiano con un secreto interesante. Historia entrelazada con Tú, mi alfa. #218 en Hombre Lobo 6/9/17 #156 en Hombre Lobo 14/9/17 #95 en Hombre Lobo 18/10/17 #78 en H...