Tú eres mi mate「 Heart of Wolves II 」

Epilogo

10 años después...

-Papito voy a la villa principal porque Matías va a explicarme y ayudarme en unos ejercicios de Álgebra que tengo que entregar el martes y de paso me quedaré- dijo Zoé buscando sus libros en el estante de la biblioteca.

Francesco dejó lo que estaba haciendo y volteó a mirar a su hija, tan hermosa. Ya había crecido bastante y le daba nostalgia, hace algunos años ella era solo una pequeña, su pequeña. Su cabello largo castaño, como el de su papá, su sonrisa como la suya, los ojos de su papá. En fin su hija era hermosa.

Zoé ya tenía sus quince años pero aún así era una adolescente muy juiciosa. Apasionada con cada cosa que hacía, entre una de ellas cantar y bailar. Algo que realmente se le daba bien. Tan bien que desde pequeña estaba en una academia de baile y hoy en día ella estaba agradecida con sus padres.

-¿Papá?- Zoé lo llamó al ver que la miraba en completo silencio y con una sonrisa.

-¿Ahh?- preguntó el rubio algo desorientado

-Que voy a la villa principal a...-

-Ah sí, solo se cuidadosa. ¿Le pediste permiso a tú papá para quedarte?- preguntó con cara de advertencia y ella sonrió nerviosa mientras negaba.

En ese momento entraba Josh con Lukah detrás de él hablando como un loro. Lukah ya tenía sus doce años y aún así no dejaba de verse adorable al igual que el día en que la pareja lo había adoptado. El cabello aún lo conservaba rubio, extraño había sido que se aclaraba con el tiempo. Era completamente un chico conversador y extrovertido un poco diferente a su hermana. Que aunque no dejaba de ser comunicativa ella era más introvertida.

-Papá pero déjame ir, muchos de mis compañeros irán...- se quejó Lukah viendo la negativa en el rostro de Josh.

-Lo siento mucho mi amor pero para esa fiesta no vas y es mi decisión final-

La mirada de Francesco viajaba de su mate a su hijo y luego a su hija. Sabía que tan pronto Zoé le pregunte sería una nueva negativa y ahí sus hijo recurrirían a él para darles permiso. Porque sí, él era mucho más flexible, en lo que creía, que Josh. Quién justamente lo veía con una mirada de advertencia. Se aclaró la garganta y asintió.

-Lukah, eres menor de edad...- dijo Francesco.

-Pero papá habrán mayores, la mamá de mi compañera estará. Además...- habló y Zoé se rió

-¿Además que?- preguntó Josh y Lukah se quedó en silencio y Josh volvió a preguntarle -Lukah, ¿además que?-

-Que va ser papá...la compañera que dará la fiesta es de la que ha estado enamorado desde que llegó a nuestra escuela- dijo riéndose y vio la mirada asesina que le dio su hermano.

-¡ZOÉ!- gritó -Tú y tu bocota pero ¿a que no tienes boca para pedirle a papá que te deje quedarte en la villa principal?- preguntó y Zoé le dio la misma mirada.

Josh y Francesco se miraron y supieron que comenzaría una nueva discusión. Vivir con dos adolescentes era todo un caos. Sí, ellos se amaban con locura pero peleaban varias veces al día. Francesco pidió a Josh que les diera el permiso a lo que el castaño negó.

-Por favor, pueden aprovechar el momento. Mientras Zoé está con Matías y yo en la fiesta. La noche sería solo de ustedes dos- dijo Lukah riendo al pensar que había jugado su mejor carta.