Capítulo 15

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Alexander

-Bienvenida a bordo Dra. Ford.- Todas mis alarmas se encendieron, este si que seria un buen día.- Las proximas 24hrs quedarán bajo mi servicio, deben estudiar a fondo el expediente clínico de la srta. Briar Cullen, 301AB, deben monitorearla las 24 hrs del dia, su cirugía será mañana a las 7:00am y los quiero muy despiertos, se que es su primer día aqui, pero tambien se que son los mejores de todos los registros y lo estan demostrando, cuento con ustedes.- Nos decia dejando instrucciones claras.- Dra. Ford, bienvenida al Olimpo, se que lo suyo es la Neurocirugia y me atrevo a asegurar que será tan buena o quiza mejor que su madre, Ford estás a cargo.- Habia sido la 2da vez en el dia en el que la halagaban no me imaginé nunca que Kara Ford, sería tan buena en tantas cosas. Está a cargo, era nuestro primer día y ya estaba a cargo en un caso de esta magnitud, esto si que era Rock and Roll.

- Ahora si Ford, enseñame de que estas hecha.-Le dije mientras posaba una mano sobre su hombro sonriendo.
- Si quieres sobrevivir a este caso no te alejes de mi, no hagas ninguna tontería y por favor; no hables tanto.- Me dijo mientras llegabamos a la estación por los expedientes, tenia mas carácter de lo que esperaba. Revisamos el expediente minusiosamente sin saltar ningún paso, ningún examen, nada, Kara lo revisaba una y otra vez, sin parar hasta que note que lo habia memorizado todo, Santo Cielos era una máquina.
- Buenos Días Briar.- Dijo mientras entrabamos en la habitación.- Yo soy la Dra. Ford, y él este apuesto chico de aqui es el Dr. Montgomery y desde este momento hasta que usted sea dada de alta estaremos encargados de su cuidado.- Dios mio, era mas de lo que esperaba.
- Como te encuentras hoy?.- Le dije con una sonrisa.
- Con un Dr. tan apuesto cualquiera estaría bien.- Dijo con una sonrisa pícara
- Briar necesitamos que nos permitas examinarte linda, ya sabes, para que estes sana y puedas salir con el Dr. apuesto.- Dijo Kara sonriendo y desviando su mirada a la mia. Inmediatamente procedió a examinarla y mientras lo hacía Briar hizo una pregunta que no esperaba.
- Dr. Montgomery, eres soltero?.- Maldita Kara, te voy a matar.
- Linda, me puedes llamar Alex y si, soy soltero.- Kara se quedó mirándome con cara sorprendida.
- Y tu Dra. Ford, eres soltera?.- Le preguntó Briar y en buena hora, porque era una de mis tantas preguntas hacia ella.
- De por vida y por favor no me llames como a mi abuela, dime Kara, que bastante atractivo es mi nombre por cierto.- Dijo entre risas. Es soltera y está aquí.
Briar se encontraba estable, mas de lo que era de esperarse, eran aproximadamente las 12:00pm, Briar dormía, Kara se habia encargado de administrarle personalmente la dosis de Diazepam indicada para esa hora, así que me lancé.

- Ford, un café?.- Asintió y nos dirigimos hacia la cafetería, necesitabamos estar despiertos.- Nunca imaginé que fueras tan buena en esto.
- No te imaginas la infinidad de veces que me han dicho lo mismo.- Me dijo e inmediatamente su semblante animado cambió, sus dulces ojos ambar se oscurecieron, se veía... Triste. Sentía una opresión en el pecho, muy en el fondo Kara seguía siendo la misma chica que conocía, la misma que desde el momento en el que se enteró de que su madre no volvería jamás, Kara siempre fue alegre y desde ese momento su sonrisa desapareció. Me sentía culpable, mierda Alex la habias cagado. Me nacieron unas ganas inmensas de abrazarla, estrecharla entre mis brazos y hacerla sentir mejor, pero no tenia idea de como.

En uno de esos intentos fallidos de acercarme a ella, había hecho todo lo contrario.
Estaba mas que consciente de que Kara y yo debiamos estar juntos ahora y cuando digo juntos no me refiero a pareja, sino unidos como antes, este era un camino que no podríamos recorrer solos, necesitábamos apoyo, solo estabamos ella y yo una vez más. Kara era una chica lista y muy capaz y muy hermosa, la chica mas hermosa que he conocido en toda mi vida.
Al parecer ya estaba bastante acostumbra a este tipo de situaciones, ni siquiera parece interna. Había notado el celo con el que un grupo de Doctores nos miraban a lo lejos, si yo también lo imaginaba, eran internos y la presencia de hijos de dos eminencias de la medicina estuvieran por aquí era una amenaza y luego después de lo de esta mañana. Kara tenia razón, esto nos obligaba a dar mas de lo que podíamos.
Mientras iba por los cafés y unas ensalada, volteé a ver a Kara mientras hacia unas anotaciones en el expediente de Briar, se me escapó un suspiro en el momento en el que volteó a verme, y me sonrió. Si, lo acepto mis sentimientos seguían intactos en cuanto a ella.

La Anatomía de un AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora