La Anatomía de un Amor

Capitulo 41

Alexander

Kara me habia llamado a urgencias, seguro tenia algo interesante para mi.

Kara que hay para mi?.- Dije pero su rostro no reflejaba felicidad.- Porque me llamaste?

- Alex.- Dijo como en un susurro, algo pasaba.

- Que pasa?

- Es tu madre.- Dijo y mi mundo empezó a dar vueltas, no podia ser mamá, no ella. Me explicó su cuadro clínico, escuchaba todo lejano, pero pude escuchar perfectamente cuando dijo que la cirugía la haria Dempsey pero yo solo podía confiar en ella, por eso le pedí hacer la cirugia, se que sería difícil para ella no por el procedimiento sino porque era mi madre, lo vi en sus ojos.

- Necesitas algo?.- Dijo Addison a mi espalda.

- Avisale a Mer por favor, me avisas cuando llegue.- Dije y me fui a las escaleras, necesitaba estar solo, corri hasta llegar allá.

Mi mamá no se podia morir igual que papá, Kara la salvaría porque ella es como una hada madrina y las hadas hacen magia, lloré amargamente como nunca antes, no habia sentido tanto la ausencia de mi padre hasta el dia de hoy, no sabia cuanto amaba a mi madre hasta este momento, serian demasiadas pérdidas en tan poco tiempo, primero Lea, luego mi papá y mi mama no podía formar parte de esa lista, ella no tenia el derecho de hacerlo, recordé lo que me dijo esta tarde antes de salir de la fundación.

- Te amo hijo.
Su voz retumbaba en mi mente, todas las veces en las que me abrazó, en las que me llevo a dormir con ella y papá cuando tenia pesadillas, los sabados cuando nos dormiamos los cuatro en una misma cama, los domingos familiares, las veces en las que arrullo para que lograra dormir, todos los cuentos de mi infancia, cuando me llevaba al colegio, como lloro cuando me fui a la universidad, su sonrisa y sus hermosos ojos verdes como oliva, su manera de hablarnos y querernos a Mer y a mi, como nunca nos ha dejado solos, como no se apartó de mi cuando Lea desaparicio, como nos habiamos unido cuando papá murió y como estaba de feliz ahora al verme feliz, mi mama no nos podría dejar  solos justamente en el mejor momento de nuestras vidas; Kara no lo permitiría.

Las lágrimas no cesaban, me dolia el alma al pensar en que la mujer que mas he amado en mi vida se debate entre la vida y la muerte, ella debían quedarse conmigo porque no lo resistiría.

- Alex.- Dijo Mer llorando arrodillandose junto a mi.- Mi mami no se puede morir, no lo hará cierto?

- Ella no lo hará.- Dije entre lágrimas, era la 3ra vez que Meredith y yo pasábamos por esto.- No lo hará.

Nos quedamos abrazados por un largo rato hasta que nuestros ojos se cansaron de llorar; pareciamos niños cuando se le arrebata un caramelo.

- Addi me dijo que Kara la está operando.- Dijo una vez nos calmamos un poco.- Alex no debiste pedirle que lo hiciera, la estas destruyendo lentamente el dia de hoy.

- Lo se Mer.- Dije posandome las manos en la cabeza, no pude haber sido mas imbécil.- No sabes cuanto me duele saber que ella ahora esta mal por mi culpa, pero es mamá y por esa mujer hago lo que sea.

- Vamos a la sala.- Dijo Mer poniendose de pie.

Salimos abrazados y llegamos a la sala donde estaban Addison, Jack y Amy sentados.

- Necesitan algo?.- Dijo Amy
- Algún café o un te?.- Preguntó Jack.- Estamos contigo hermano.

- Gracias chicos, un té para Mer y un café para mi.- Dije sentandome en una de las sillas, necesitaba manterner despierto.

Habian pasado cuatro horas y aun no sabiamos nada, estaba desesperado y no sabia que hacer. Daba vueltas por todos lados, pense en ir a ver mis pacientes pero no podia concentrarme mas que en mi madre ahora.

- Alex sientate.- Dijo Addison un poco agobiada.- Me estoy empezando a marear y no es necesariamente por los gemelos.

- Lo siento Addi, estas han sido las 4hrs mas desesperantes de mi vida.- Dije halandome los cabellos, por la desesperación.- Perdón por lo que le hice a Kara.

- Ella sabrá como manejarlo Alex.- Dijo Addison, entonces noté que ella estaba sudando; no podia ser.- Addison estas sudando, Mer revisala

- Estoy bien.- Dijo Addison a la defensiva, pero no lo estaba, palidecio.

- Addison estas pálida.- Dijo Meredith tomando su muñeca.-  Tu pulso es  débil, debes recostarte sabes que le vas a hacer daño a los bebés y eso es lo menos que necesita Kara ahora.

- Esta bien vamos.- Dijo Addison poniendose de pie pero se desplomó al instante; ¿Porque ahora?

-Una camilla aquí.- Gritó Meredith al tiempo que auscultaba su abdomen para localizar a los bebés.- Su pulso es débil.

La trasladaron a una habitación, llame a Lucas y estabamos esperando a que llegara.

- Meredith que rayos pasó?.- Preguntó Lucas desesperado; si alguien amaba con locura a su esposa era Lucas.

- Tranquilo Lucas, esta bien.- Dijo Mer acercándose.- Addison estuvo sometida a mucho estrés emocional este día y eso desgasto su cuerpo.

- Y los bebés?.- Preguntó asustado.

- Estan en perfectas condiciones.- Dijo Meredith con una sonrisa.- Ella solo necesita descansar, dejala aqui por esta noche y mañana se la lleva a casa.

- Gracias.- Dijo Lucas ahora mas aliviado, habia estado conteniendo la respiración por el miedo.- Chicos siento lo de Sussan.

- Kara está con ella.- Dije.

- Si Kara esta con ella todo estara bien.- Dijo dandome un pequeño choque en la espalda.- Esa chica hace magia con sus manos.

- Eso aqui todos lo sabemos.- Dije.- ahora nosotros nos retiraremos a sala de espera mientras Kara termina.

Nos fuimos a la sala, estaba agotado.

- Ahi viene Kara.- Dijo Mer.

Cuando nos dijo que estaba estable senti un alivio inmeso.

- Ahora te amo mas que nunca.- Dije acariciando su rostro.- Te estare agradecido siempre por esto.

- No digas eso si?.- Dijo con su carita triste y al verla asi se me hizo añicos el corazon; era mi maldita culpa.- Donde esta Addison?

Salio corriendo desde que se enteró, eran demasiadas cosas en un dia y Addison representaba todo para Kara, todos sabíamos eso.

Fui a la cafetería a comer algo y me encontré a Lucas.

- Kara está deshecha Alex.- Dijo Lucas reprendiendome.- Esto supera toda sus barreras

- Lo se.- Dije agachando mi cabeza.- No sabes como me duele eso.

Mer y yo fuimos luego a unos cuartos de descanso en las proximas tres horas no podriamos ver a mamá asi que decidimos descansar un poco.

Cuando volví a la habitación Kara y Mer estaban ahí, desde que me vio entrar se dispuso a marcharse pero no podia dejarla hacer eso.

- Perdóname.- Dije con toda la sinceridad que reinaba en mi vida.-  Perdóname por esto, pero es mi madre y tu la mejor, lo necesitaba

- Alex lo se, solo no quiero hablar de esto, todo está bien.- La sinceridad reinaba en su voz pero la opacaba la tristeza, ella estaba triste.

Mi madre despertó, su examen neurológico era perfecto, estaba mas tranquilo, pero Kara me inquitaba.

- Te amo y nunca fue mi intención herirte.- Le dije una vez estuvimos solos

- Lo se amor, no es tu culpa, no es culpa de nadie.- Me dijo posando un beso tierno en mi pecho.- Te amo.

Sin dudas a esta mujer no solo le debia mi felicidad sino la vida de mi madre.

No me alcanzara nunca la vida, ni el tiempo, ni el amor y mucho menos el aire para devolverle aunque sea un tercio de todo lo que ella sin saberlo me estaba dando.