Capítulo 31

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Alexander

Habia desaparecido, la habia buscado por todos lados, le habia enviado mensajes, la habia llamado millones de veces, habia ido a todos los quirofanos buscandola, pero no estaba en ninguna parte, habia desaparecido, los nervios estaban a punto de matarme, ella no estaba bien y la habia dejado sola, no podia perdonarme si algo le pasaba.

- Jack, sabes algo de ella?.- Le pregunté desesperado.

- Nada, la buscamos por todos lados, hace mas de tres horas que desapareció y nadie la ha visto salir del hospital.- Dijo Jack poniendose las manos en la cabeza.

- Alex.- Se acercó Amy corriendo hasta donde estábamos.- Tyler me dijo que la vio yendo hasta los cuneros. En el momento en el que Amy dijo eso, salí corriendo a buscarla, estaba ahí tenía a Madison en sus brazos, todo el miedo que antes arropaba mi cuerpo se empezaba a disipar a medida que me acercaba.
Ella estaba ahí y se veia tan hermosa con Madison entre sus brazos, no pude evitar imaginarme mi vida con ella, la queria conmigo para siempre y nada ni nadie lo iba a impedir.

- Te ves hermosa de mamá.- Le dije dándole un beso en la mejilla.

- Estoy empezando a creer que el amor te tiene ciego.- Dijo girandose a mi con una sonrisa.- Verdad que es una bebé hermosa?

- Si, Lilly esta coagulando mejor de lo esperado y sus signos vitales estan mejorando cada minuto, si continúa así esta noche Jack podrá reparar su tibia y en una semana se podrá ir a casa.- Dije dejandome embobar por esta niña.

- Dejemos a Madison descansar, tengo hambre.- Dijo colocando otra vez a la bebé en su lugar.

Cuando salimos de los cuneros no pude evitar abrazarla con todas mis fuerzas.
- Kara por favor no vuelvas a desaparecer así.- Dije estrechandola contra mi cuerpo.- No me hagas estas cosas por favor.

- Lo siento cielo, pero necesitaba estar sola.- Dijo mirandome a los ojos.- Ahora vamos a comer, muero de hambre.

- Te amo preciosa.- Le dije perdiéndome en sus ojos.

- Yo también te amo guapo.- Me dijo regalandome una sonrisa.

Nos fuimos a la cafetería, Jack y Amy estaban sentados en una mesa, al vernos llegar se pusieron de pie.

- Kara estas bien?.- Dijo Amy dándole un abrazo.- No hagas eso, nos quieres matar?

- Estoy bien niña dramática, solo necesitaba estar sola y ahora tengo hambre.- Dijo sentandose en una de las sillas, esa era una de las tantas cosas que amaba de ella, comer y dormir siempre se anteponia ante cualquier cosa, hasta el sexo y eso me cabreaba muchísimo.

- Fui a revisar los indices de Lilly, esta noche haré la reparación de su fémur, no sera tan complicado, su bolemia se encuentra estable, ni hay riesgo aparente de sepsis, su ritmo cardiaco es normal y su coagulacion es buena.- Dijo Jack, eran justamente las palabras que Kara necesitaba escuchar, lo digo porque sus ojos se iluminaron al escuchar esto.

- Eso suena genial, pasé a ver a Madison y es una bebé preciosa.- Dijo Kara y la ternura que reinaba en su voz al referirse a la bebé era fascinante.

- Caray, a alguien por aqui se le ha despertado el instinto materno.- Dijo Amy desviando su mirada hacia Kara.- Oye Ford, estas en el primer año de tu residencia y no creo que Alex quiera cambiar pañales ahora.
Estallamos todos en una carcajada por el tono de Amy, si lo repito; si existiera un record guinness para las personas mas dementes sin dudas seríamos nosotros. Nuestros beepers empezaron a sonar.

- No jodan.- Dijo Amy soltando una maldición, nos paramos al instante. Cuando llegamos a urgencias era un caos, habian traumas por todas partes, esto no iba a acabar bien.

La Anatomía de un AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora