Capitulo 47

3K 229 9
                                    

Kara

Cinco dias despues que Lea aparecio, estábamos por fin todos juntos en la cafetería, hablábamos de asuntos triviales, de los ultimos acontecimientos y las proximas cirugias.

- Ya que el aclamado Dr. Montgomery está aquí.- Dijo Meredith con un tono de reproche.- Hablemos de las proximas cirugías.

- Hey Mer, ¿Que fue eso?.- Preguntó Alex

- Hmm, quiza que desde hace unos días son nulas las ocasiones en las que te haz detenido a almorzar con nosotros.- Reprochó Amy

- Eso no es cierto.- Dijo Alex en su defensa; La verdad es que tambien eran contadas las veces que ha hablado conmigo desde la llegada de Lea.

- Yo paso de opinar.- Dije levantando las manos en señal de alto;  no me apetecía hablar con Alex de esto.- Lo que hagas o no en este momento me vale mierda, ahora hablemos de algo que si importe, Las cirugías por ejemplo.

-  De acuerdo, podrian ser en 6 meses, mi parto sera en 4 meses y medio.-- Dijo Addison.-- y no me quiero perder eso.

- Totalmente de acuerdo, asi tendremos mas tiempo para conseguir donaciones y Addison tendria tiempo para recuperarse.- Dijo Emma

Nos dedicamos a organizar algunos detalles de esto por los próximos minutos.

- Ah, antes de que lo olvide chicos recuerden que mañana es la carrera, a las 2:00pm.- Dije ilusionada.

- Claro que ahí estaremos, tengo ganas de ganar dinero divertido.- Dijo Jack mientras nos dejaban a Alex y a mi solos.

- Lo siento amor por no acompañarte.- Dijo Alex, sentía como mi sonrisa se desvanecía lentamente.- Quedé de comer mañana con Lea

- Es en serio?.- Le reproche.

- Lo siento cielo.- Dijo Alex tratando de disculparse.

- No Alex.- Dije levantando un poco el tono de voz.- Hace semanas que sabias esto, semanas en las que me preparé para eso y aparece Lea, cambias nuestros planes de un día para otro, desde que apareció no eres el mismo, nos haz hecho a un lado a todos nosotros, prefieres irte con ella en un día tan importante para mi, que no estuvieras en la premiacion lo entiendo porque era tu madre pero ahora lo haces por tu ex que milagrosamente aparecio de la nada, no Alex eso no lo entiendo.

- Kara perdoname.- Dijo acercandose a mi

- ¡No me toques!.- Dije alzando la voz.- Nunca estas en los momentos mas importantes de mi vida, si no es una cosa es la otra, cada vez que quieres hacer algo estoy contigo, tu nunca estás!.

- Kara, discúlpame.- Dijo Alex

- Vete al diablo Alex.- Dije mientras la rabia me consumía.

Me alejé lo mas rapido que pude de allí. Llegue a casa media hora después y me metí a mi cuarto.

- Kara que te pasa?.- Escuché a Addison abrir la puerta.- Porque estás llorando? Pequeña habla conmigo

- Supongo que esta es la unica forma en la que puedo drenar la rabia.- Dije reprimiendo mas lágrimas.

- Pero porqué?.-Dijo Addison sentandose en el cabezal de la cama.

- Siento que quiero asesinar a Lea Stevens.- Dije consumiendome en la rabia.- Siento que quiero acabar con Alexander Montgomery.

- Y yo siento que debes dormirte.- Dijo Addison tratando de sonar  divertida.- Mañana hay una carrera que ganar.

Nos quedamos hablando por un largo rato, hasta que me quedé dormida. Desperté temprano, desayuné y me fui al hipódromo.

- Como está mi Jockey favorita?.- Preguntó Marcus, el veterinario de Gloria.

- Muy emocionada.- Dije acercandome a el- Y Keltsey y las niñas?

- Afuera, esperando por verte.- Dijo con una sonrisa, Marcus habia estado ligado siempre a mi desarrollo como Jockey y lo aprecio mucho al igual que a su familia.- Entonces dime, que tal todo?

- Estoy en el Johns Hopkins y ahora aqui ansiosa de poner a esta belleza a correr.- Dice acariciando la cabeza de mi caballo.

- Esa es la actitud que quiero para ti.- Dijo dandome un abrazo.- Vas a brillar como siempre.

- De eso estoy mas que seguro.- Dijo una voz que conocía bastante bien detrás de mi. Me giré y mi sonrisa llegaba hasta mi frente de la felicidad

- ¡Papito!.- Dije lanzandome a sus brazos, no podia creerlo.

- Mi niña hermosa.- Dijo estrechandome en sus brazos.- Quería verte, felicidades por tu premio, mis mujeres son las mejores.

- Papi cuanto amo que estes aqui.- Dije sin poder dejar de abrazarlo.

- En ese abrazo faltamos las gemelas y yo.- Dijo Addison con una sonrisa.- Ahora si estamos todos

- Mis hermosas hijas.- Dijo mi papá admirandonos.- No tienen ni la mas mínima idea de cuanto las amo y lo feliz que soy por que seré abuelo de los hermosas más, estoy condenado a estar rodeado de mujeres.

Nos quedamos un rato platicando en la caballeriza. Hasta que llegó la hora.

- Bien Ford.- Dijo Marcus con una sonrisa.- Ya sabes, debes apretar al acercarte a la meta, te sera fácil ganar, Gloria ya te extrañaba, suerte.

- Es hora de hacer magia no?.- Dije con una sonrisa

- Asi es preciosa.- Dijo Marcus dandome un abrazo.

Sali a posicionar a Gloria, los demas estaban ahí sus miradas llegaron hasta mi y Gloria, una pura sangre albina como esta no era muy común, mi madre me la regaló a los 10 años, amábamos cabalgar en familia. Escuché el tiro que nos avisaba que debiamos salir a correr, Gloria salio disparada para posicionarnos en 2do lugar las dos primeras vueltas, sabia que era hora de apretar.

- Vamos preciosa tu puedes.- Dije susurrandole al oido, siempre he creido que los caballos pueden escucharnos, aumentó su velocidad al maximo hasta adelantarle a Forster un caballo arabe precioso, que estupidamente habia estado liderando hasta ahora, escuché el ruido de toda la multitud al cruzar la linea de meta, lo habiamos hecho y se sentia como si fuera un auto.

- Asi se hace Ford.- Dijo Marcus al ayudarme a desmontarme del caballo.- Eres una reina

- Exagerado!.- Dije dandole un manotazo en el hombro.

- Creo que Ford me ha hecho ganar 25mil dolares hoy.- Dijo Emma con una sonrisa.- Nunca pensé que fueras tan buena!

- La Jockey mas hermosa es mi hija.- Dijo papá dandome un abrazo.- Necesitamos hacer esto mas seguido en Nashville.

- Yo también lo creo.- Dijo Addison.

Empezo a llover por lo que nos fuimos a un restaurante en la ciudad, habia decidido ir mas tarde a la ver a Alex, daba igual de todos modos.

- Estoy encantado de conocerlos.- Dijo mi padre refiriendose a mis amigos.- El trabajo que hicieron con esos pacientes es estupendo y cuenten con mi apoyo.

- Estas hablando en serio papa?.- Dijo Addison.

- Claro, tanto dinero debe servir de algo.- Dijo con una sonrisa.- Ademas me gusta ver como mis hijas hacen magia.

Nos quedamos ahí hasta que dejo de llover y eran pasadas las 9:00 cuando fui a la casa de Alex.

Hoy habia sido un gran día.

La Anatomía de un AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora