Capitulo 17

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Adele.

Simon luchaba contra los perros para poder amarrarlos y que no estropearan el jardín como lo venían haciendo. De tirar la mesa, el pastel y la comida me transformarían en algo que no soy.

—Listo, ahí no se soltarán —dijo Simon levantándose.

—¿Seguro? —dije viendo la correa ajustada. —Perfecto, ojalá no se suelten.

—No lo hará, ahora vamos a cambiarnos que están por llegar.

Entré a casa con Simon quien tomó a Brianna de sorpresa por la espalda y la alzó en lo más alto dándole leves saltos en donde ella reía como siempre.

—¿Cuántos años está cumpliendo la nena más consentida de la casa? —le preguntó a él sosteniéndola en sus hombros.

—Tes, soy gande papi.

—Eres grande mi niña, estás creciendo muy rápido.

Seguimos a nuestras habitaciones en donde sobre la cama estaba tendido su traje que estaba ansiosa por ponerse. Primero le di su respectivo baño sentándome a su lado en la bañera mientras ella disfrutaba jugar con sus juguetes y las burbujas. Con cuidado tallé sus bracitos y al llegar a la parte baja de su brazo se retorcía de la cosquilla.

—Dame el otro brazo nena...

—No jaja, me da cosquilla mami

—Jajaja lo sé nena, pero será rápido —tallé rápidamente y ella se retorció riéndose y escondiendo el brazo.
Enjuagué su carita y saqué el shampoo de su cabello con cuidado de que no cayera en sus ojos. La terminé de bañar y le coloqué su paño para llevarla hasta la cama y empezar a vestirla. Sequé su cabello con la toalla y le puse una franelilla blanca, su ropa interior y por ultimo su deseado traje. Abrí su falda verde que tenía forma de hojas y cerré su vestido en la parte de atrás. Saqué sus alas y se las coloqué en la parte de atrás, su emoción era notable en su sonrisa.

—Y... ¿Qué le falta a la pequeña campanita? —ella se quedó pensando y luego me miró sorprendida cubriendo su boca.

—¡La varita! ¡Yo quiedo una! —saltaba sobre la cama. La busqué en la bolsa y la saqué. —¡Mami! ¡Mi varita!

—Ahora eres toda una hada artesana —se la entregué y ella la sacudía con fuerza, con estos movimientos ella se encendía reflejando varias estrellas.

—¡Soy un hada! ¡Soy un hada!

—Wow jajaj se ve bastante entusiasmada —dijo Simon saliendo del baño. —Mi hermosa niña se ha convertido en un hada.

—¡Siiii! —dio un salto de la cama al suelo y salió corriendo buscando a Angelo.

Cuando salí y me encontré con Angelo no pude evitar reírme al verlo. Su cara y el traje que tenía puesto me robaron varías carcajadas.

—¿En serio me tengo que vestir como Peter Pan?

—Jajajajajajajaja...cariño, es por tu hermana...—me recargué en la puerta tratando de no reírme pero era imposible, los pantalones lo hacían lucir muy gracioso.

Brianna se lo llevó al jardín y yo entré a la habitación para darme un baño y ponerme mi vestido verde. Me tomé mi tiempo en maquillarme, frente a la peinadora y mientras pasaba la brocha por mis pómulos pensaba en lo rápida que va la vida y en este caso en como mis hijos crecen tan rápido.

—¿Estás llorando? ¿Por qué? —preguntó Simon apareciendo detrás de mí.

—Jajajaja por tonta, —sorbí mi nariz. —Esque estas fechas me ponen sentimentales.

When We Were Young (The Finale)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora