Realmente no sabes lo mucho que te necesito... Te necesito para vivir aunque tu digas que no, es una necesidad extraña, difícil de explicar. Te necesito para sonreír, para enamorarme aún más de ti cada vez que sonríes o te ríes. Se que no puedes volver a confiar en mi, porque es imposible después de lo que te he echo. Se que no eres capaz de volver amarme locamente como lo hacías antes. Y que esto se irá convirtiendo poco a poco en cenizas hasta que un pequeño golpe de aire lo destruya todo al final. Me has dado muchísimo y por una vez en la vida, aparte de enseñarme amar de verdad, me has echo mirar el futuro como se debe mirar, sin cuentos de princesas esperando al príncipe azul. Contigo he aprendido como se lucha por lo que se quiere hasta el final. Como se lucha por lo que se quiere realmente y que si no se consigue, saber perder. Pienso cumplir todas mis promesas, a pesar de haber roto la más importante, porque realmente si no hay confianza, no hay nada. Que se me escapa una sonrisa estúpida cuando te miro, que si te digo la verdad, ¡NO PUEDO DEJAR DE MIRARTE! Ni al besarte puedo evitar sonreir, ni puedo evitar dejar los ojos abierto, no és porque no disfrute del beso o no me guste, es solo que aparte que adoro tu cara de bebé, si los mantengo abiertos, cuando los cierro puedo verte, te veo besándome.
Y sí, lo admito, todo lo que digo parece un cuento de frases o de películas, pero no es así, es que yo lo describo así, soy una montaña rusa de sentimientos, expreso mis sentimientos de una forma un tanto dramática; pero no es por nada, solo que no me se expresar de otra forma, soy demasiado cursi.
Aparte de ser cursi, soy demasiado miedica, vergonzosa, torpe, celosa, imbecil, realmente; lo tengo todo, no me falta nada! Nunca estoy completamente de acuerdo en lo que pienso y casi nunca escucho a mi cabeza. Nunca pienso en mi, y creo que puedo llegar a decir que a día de hoy, que hay veces que se me hace demasiado difícil. Hasta que has llegado tú, y has dado una vuelta de 360º grados a toda mi vida y la has puesto patas arriba; pero no te equivoques, porque no es nada malo, es más, me encanta.
Aunque haya veces que ni te haga caso, aunque lo intente y a veces no resulte como deseo, aunque apenas tengamos nada en común, es alucinante como puedes hacerme tan feliz. Como sacas tanto mi lado bueno como el malo. Como puedes hacer que me duerma eliminando todos mis miedos y pesadillas con un simple 'sueña conmigo' o 'nos vemos en un rato, no tardes pequeña.'
O como con un simple ''estoy malita'' que estés en mi casa en 1h a pesar de estar enfermo al igual que yo y después de haberla cagado. No sé qué más decirte, ya que no me vienen más palabras para intentar arreglarlo, sé qué no volverás a confiar en mi, o que te va a costar muchísimo, se que nunca me vas a volver amar con la misma locura que lo hacías. Pero pienso intentarlo hasta que no pueda más, y como tú me has enseñado siempre, persiguiendo lo que quiero y deseo hasta el final, así que nunca me quedaré sin ganas. Aunque tu no quieras volver a verme, aunque me odies... Lo siento si resulto pesada, pero tanto tú como yo; deseamos estar juntos, y no sé tú, pero yo pienso seguir buscándote siempre.
Te amo más de lo que amo a nadie, y de lo que podré amar nunca a nadie.
Te amo más que a mi vida. Para nunca.
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Simples textos para adolescentes.
Teen FictionSolo lee y reflexiona. Llora si lo necesitas, no va a pasar nada... Yo estoy aquí. NO copias. NO edición. Todos los derechos están reservados. Si se intenta copiar, será sancionado.