Te daré tu espacio, sé que resulto agobiante. Me frustro porque tengo la intención de quererte con todo y bien bonito, pero tu prefieres la distancia, las caminatas a solas, el silencio de tu crisis interna. Eres tan libre que vives, sonríes, cantas y lloras para vos. Enserio admiro tu convicción de ser tan inmutable e independiente. Entiendo que talvez antes no hubo alguien que se diera cuenta de todo el arrecife marino que traes dentro, tú eres reserva natural de todo lo bello, la eventualidad de un milagro habita en tu piel.
Esperaré en silencio... a detalles, cotidianamente repetiré actos que expresen mi amor por ti hasta que creen un camino neuronal en tu cerebro y se te quede bien grabado en tu hipocampo que te amo.
Que nunca dudes, ni te espante lo que lo nuestro avance. Que te sientas segura en un abrazo, en un grito o en un llanto, que mis besos te sepan a casa, que mi cariño te devuelva la vida que te falta.
Hace tanto tiempo que no estaba seguro de algo o de alguien y es que yo a ti te te quiero en todos los poemas, idiomas, caricias, alientos... Tengo la intención de quererte, estoy comprometido con la loca idea de que tu y yo seremos todo lo lindo, la pareja utopíca, el atardecer de verano, la playa y el mojito, la brisa y el rocío, el latido con sentido.
Ya te tengo en la mira como proyecto de vida.
Ojalá un día consiga entrar completamente en tu vida y que compartas conmigo esas cosas tan bonitas que traes y eres... Cosas que ocultas y haces bolita bien profundo en tu esternón porque sueles asumir que no eres lo suficientemente bonita, talentosa, creativa, prodigiosa, artística.
Ahora que te miro como para no dejarte ir nunca, espero ser lo suficientemente bueno como para atravesar el espacio entre nosotros.
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Simples textos para adolescentes.
Teen FictionSolo lee y reflexiona. Llora si lo necesitas, no va a pasar nada... Yo estoy aquí. NO copias. NO edición. Todos los derechos están reservados. Si se intenta copiar, será sancionado.