Aquella manada en la cual te fuiste sin dejar rastro alguno, aquel día. Pensaba que todo iba bien, que nos seguíamos amando como siempre, que íbamos a por todas sin importarnos nada.. Que tonta de mi, te fuiste y me dejaste allí, sola, sin importarte nada.. Parezco imbécil por suplicar por tu amor, pero y que quieres que haga? Como no voy a suplicar por eso que me da la vida, por aquello que necesito para respirar; para seguir en pie día tras día sin que nada me importe. Te has ido, lo sé, te has llevado algo muy importante para mi, que te entregue a ti en todo momento, por que este lleva tu nombre, para que voy a tenerlo yo si él te quiere a ti, quédatelo y cuidalo, el te ama, al igual que yo, para siempre más que a nada ni nadie.
ESTÁS LEYENDO
Simples textos para adolescentes.
Novela JuvenilSolo lee y reflexiona. Llora si lo necesitas, no va a pasar nada... Yo estoy aquí. NO copias. NO edición. Todos los derechos están reservados. Si se intenta copiar, será sancionado.