Anhelos y reencuentros

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«And if we can't find where we belong,
we'll have to make it on our own,
face all the pain and take it out,
because the only hope for me
is you alone»

Party Poison

Jet no tendría que haber dicho su nombre en público. Jamás tendría que haber dicho su nombre en público.

Vale, quizá era demasiado obvio, corriendo por ahí con el pelo rojo y su vieja chaqueta azul, por mucho que se hubiera cubierto la cara. Pero realmente, la gente estaba demasiado ensimismada en lo suyo y en la guerra como para preocuparse por otro idiota de pelo rojo y chaqueta de colores correteando entre láseres.

Hasta que Jet dijo su nombre un poco más alto de lo que debería.

En ese mismo instante, la mitad de los presentes se le habían lanzado al cuello. A la otra mitad, poco les había faltado para empezar a adorarle. En serio, un chalado incluso le había pedido un autógrafo. Jet se había partido de risa mientras él intentaba garabatear algo mínimamente parecido a una firma... y había dejado de reír cuando, tras reconocerle, el mismo chalado le había pedido a él también un autógrafo.

Cuando finalmente habían logrado escapar del gentío y la aglomeración de "fans", Hush había desaparecido de las telepantallas; sólo se transmitía, en bucle, la grabación de su mensaje.

Mikey siempre ha sido muy bueno con todas esas chorraditas tecnológicas -había pensado, orgulloso.

La idea de volver a ver a su hermano le llenaba de ansiedad. No es que no le echara de menos, en absoluto; su ausencia era una herida que le desgarraba el alma. Pero hasta hacía unas horas ni siquiera recordaba que existía. ¿Y si...? ¿Y si, al volver a mirarle a los ojos, no veía más que incomprensión en su mirada? ¿Y si no le recordaba? Bastante dolía ya tener a Jet al lado y saber que para él no era más que un completo desconocido, no quería ver esa mirada también en los ojos de su hermano. Le destrozaría.

Ahora entendía cómo debía de haberse sentido Girl cuando él había despertado. Cómo debían de haberse sentido todos.

Sobre todo teniendo en cuenta que él... había matado a Cherry.

Apretó los puños con rabia, tratando de contener la oleada de culpa que amenazaba con derribarle. No podía permitirse pensar en eso, no hasta que todo acabase, o a lo mejor, sería a él a quien tendrían que salvar.

No podía... pensar en que se había convertido en un asesino.

El sollozo casi escapó de su garganta, casi le paralizó en el sitio. Casi.

-¿Pois? -llamó Jet, viendo que se quedaba rezagado. A lo lejos, se escuchaban gritos- ¿Pasa algo?

¿Cómo le diría a Star que había sido él quien le había negado la posibilidad de volver a ver la sonrisa de Cherry?

-No, nada -fingió sonreír. Los gritos se oían cada vez más cerca- . Vamos.

El tumulto les había fastidiado el plan en otro sentido también. Antes, sabían que Hush y Kobra estaban en la plaza. Ahora... sólo podían especular. Antes del mensaje, habían pensado que se dirigían hacia la sede de BL/Ind a las afueras, donde ellos habían... "muerto"... Pero entonces, no tendría sentido que estuvieran en la plaza. ¿Así que...?

De repente, en sus recuerdos de drac, algo centelleó. Una pequeña plaza rodeada de edificios. Un edificio blanco y oscuro que jugaba a ocultar el cielo. Dracs. Muchos dracs.

-¡Mierda! -detuvo en seco sus pasos, tan bruscamente que Jet chocó con su espalda- ¡Da la vuelta, da la vuelta! ¡Tenemos que volver al centro!

-Pero, ¿no es ahí donde íbamos?

Danger Days II: The Aftermath is SecondaryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora