Danger Days II: The Aftermath is Secondary

Epílogo I: Todo cambia, todo sigue igual

«Well, if you carry on this way,
things are better if I stay.
So long and goodnight,
so long, not goodnight»

Hush Killer

-Han pasado ya seis meses desde que te fuiste, desde que nos pusimos las máscaras por última vez. Nada ha cambiado, y todo lo ha hecho. Los dracs y los SCARECROWS han desaparecido de la calle, pero la gente aún teme decir lo que piensa y actuar según sus normas. El blanco ha sido sustituido por colores y arcoíris, pero muchos ciudadanos siguen siendo grises. Los amigos se han reunido, pero han estado separados tanto tiempo y se han hecho tanto daño que ya no son capaces de mirarse a los ojos, no saben qué decirse ni cómo dirigirse unos a otros. El arte ya no está prohibido, pero ha estado dormido tanto tiempo que no existe nadie capaz de despertarlo en plenitud. Las emociones son libres de nuevo, pero muchos no sentimos más que pena. La gente despierta poco a poco, pero tiene miedo a dejar el sueño por completo. Y nosotros... dicen que ganamos, dicen que cambiamos el mundo, pero aun no hemos sido capaces de recuperarnos de lo duras que fueron nuestras pérdidas. Dicen que ganamos, pero nadie habla de lo que perdimos. Somos héroes, o eso dicen, pero siempre se olvidan de añadir el adjetivo trágicos. Héroes trágicos, todos nosotros, y tú el primero de todos ellos. Ojalá no fuera así. Ojalá estuvieras aquí.

La última luz del día se reflejaba en el oro de la melena de la última líder Killjoy, como la llamaba ahora toda la ciudad, quizá en una triste burla del nombre que le había puesto BL/Ind. Su chaqueta parecía aun más oscura bajo el crepúsculo, y su mirada se perdía en la tumba que se alzaba frente a ella, una enorme araña de piedra, un monumento a todos los Killjoys caídos en la guerra contra BL/Ind, con sus nombres grabados bajo sus símbolos. En el centro de la tumba, los ojos de la joven querían incendiar el nombre que más espacio ocupaba, al menos para ella.

Dust Shot.

Su compañero. Su mentor. Su amigo. Su hermano mayor. El hombre que, en la última batalla, le había salvado la vida, le había devuelto las ganas de vivir. Y después había muerto bajo una máscara de plástico blanco, por la mano de alguien en quien confiaba.

Y su mirada quería hacerlo arder, evaporarlo de la tumba, como si el hecho de que aquel nombre grabado desapareciera pudiera devolver a la vida a los huesos del hombre que yacían bajo la piedra.

-Han pasado muchas cosas -continuó con su planto- . Encontramos a todos los Originales, los ciudadanos se levantaron para ayudarnos. La bomba de Girl funcionó, voló todos los sistemas de BL/Ind, liberó a los dracs y les devolvió sus recuerdos. Diamond le pegó un tiro a Korse, y yo maté a aquella mujer, la que lo controlaba todo. Su dictadura terminó, y nosotros somos libres. Libres para volver a nuestro hogar, pero, ¿qué hogar? La madre de Gun está muerta, ninguno de los Originales tiene familia, y mis padres, ¿qué deben pensar de mí? ¿Cuánto dolor puedo jugar a causarles apareciendo y desapareciendo cada poco tiempo? Así que, ¿qué hacer, si no hay nada para nosotros? Aunque algunos han fundado uno nuevo. Poison y Ghoul... perdón, Gerard y Frank, pues ahora que todo ha acabado, podemos dejar atrás toda esa pantomima de los nombres y las máscaras, ser hombres y no héroes de nuevo, viven ahora juntos en su antigua base; han adoptado a Girl, y son tan felices que a veces lamento ir a visitarlos y enturbiar sus días radiantes con mi perpetua nube de tristeza. Cyanide y Disco, digo, Zane e Isabelle, viven juntos también, no por amor, sino por amistad y supervivencia; tratan de superar la muerte de Cherry, que descansa a tu lado. Espero que cuides de ella, estéis ambos donde estéis. Sin embargo, Belle pronto se mudará; va a casarse con Alice, que ahora ha vuelto a la ciudad; llevan preparando la boda todo este tiempo, y será dentro de poco. Ray se ha mudado también a la ciudad, y ha empezado a dar conciertos, acercando un poco el arte a quienes lo desconocen, pero también te echa de menos. Jenny... o Pony, debería decir, porque a ella sí hay que recordarla como a una heroína... murió en la batalla, mató a Keith, y nos salvó a todos al salvarle la vida a Gerard. D se culpa de ello, y aunque ahora tiene su propia emisora de radio (legal), todos los días recuerda a los caídos, empezando por ella. Rick ha seguido adelante con tu vieja tienda; el cáncer al final se llevó a su hermana, pero él y su mujer han tenido una hija preciosa a la que han llamado Jenny... ya sabes, por Pony. Y Arthur deambula por lo que una vez los tres llamamos hogar, incapaz de seguir adelante. Pero creo que se marchará pronto. Es fuerte, es más fuerte que yo, y ambos sabemos que es un soldado y necesita una guerra en la que luchar, aunque ya no sea contigo. Y se marchará para olvidarte. En cuanto a mí...