Capítulo 26

8.5K 765 51
                                    

Por favor voten!
que a muchos les cuesta o se olvidan pero votando me ayudan a crecer como escritora.
Gracias por leer.

******

ALE:

Eran aproximadamente las 12 cuando escuche en la puerta de la habitación unos golpes, me levante y abrí poco a poco temiendo que la rubia desquiciada estuviera del otro lado. Pero para mi sorpresa era Adrien junto a su esposa, ambos se veían terribles y muy bronceados.

—Ya sé —dijo Teffy—Nos quemamos camino aquí.

—¿Vinieron caminando?— bromee.

Ambos me abrazaron al pasar hacia adentro, se acercaron a Leo e intentaron no conmoverse al verlo en ese estado.

—No parece él—comento Adrien.

—¿Mejorara? —pregunto su esposa.

—Si. Tal vez...

Juntos retrocedieron nuevamente, sabía cuánto dolía verlo así.

—¿Eres doctora o es un disfraz? —cuestionó Adrien.

—Soy doctora.

Volvió a acercarse a su amigo, hizo como si lo codeará y le comentó.

—Es doctora y muy bonita ¿Qué mas quieres amigo?

Por un momento creí que su esposa reaccionaria mal pero sorprendentemente ella se carcajeó ante su comentario.

—Algún día se dará cuenta de que tienes razón cariño, pero deberías hablarle cuando despierte.

Estuvieron diez minutos más y se retiraron para asearse y descansar un poco.

Las horas transcurrían despacio, había comprado varios libros y los leía mientras velaba por Leo. Las enfermeras tardaban mucho en cambiar el suero y los sedantes, lo observaban minuciosamente e ignoraban mi presencia. Algunas pasaban sin que fuera su paciente sólo para mirarlo.
Y aún en coma Leo lograba cautivar a las mujeres, su pálido rostro no mostraba ninguna emoción, estaba tan inerte que daba la sensación de que era una estatua y no un hombre.
Solo reaccione cuando una de ellas trato de sacarle una foto, tenia escondido el celular entre las carpetas de pacientes. La había echado de la habitación e informado al director, supe más tarde a través de Joel que fue despedida.
Mi humor era pésimo, lo estaba protegiendo como una mamá osa.
Al caer el atardecer sus padres se ofrecieron a cuidarlo y mantener los curiosos alejados de él.

LA ESTRATEGIA |COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora