Capitulo 25- Recuerdos del ayer.

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- si.- serio.

Cristina se sento a un costado de la cama y tomo su mano, estaba tenso y eso la alerto; algo andaba mal.

- Se que no me estas diciendo la verdad.- suspiro.- ¿que sucede? Federico...

- nada Cristina, los recuerdos que tengo de ti...dan mucho de que hablar ahora que lo pienso.

- ¿de mi? no entiendo...

- si si lo haces, ¿recuerdas aquella noche? cuando juraste odiarme toda la vida.

Cristina se levanto y se cruzo de brazos completamente seria.

- pense que todo eso habia quedado en el pasado, bien sabes porque grite todas esas cosas.

- si lo se pero eso no quita que la mayoria de lo que me gritaste fuera verdad.

Cristina se incomo un poco al recordar a que se referia con eso.

- haber...que te hizo recordar todo eso y porque ahora, fue...Daniel ¿verdad? claro quien mas.

- no quieras echarle la culpa a el, el no tiene nada que ver en este asunto.

- no si tiene y mucho, yo se que no soy santa de su devocion pero no se justifica que el quiera meterse en los asuntos de los dos, ¿sabes que busca? que yo me aleje de ti, estoy segura que daria todo lo que tiene por separarme de ti y la verdad no me extrañaria que lo lograra...

- el solo quiere que yo sea feliz.

- y conmigo no lo eres ¿verdad? soy una tonta.- murmuro con ironia.

- Cristina a tu lado soy feliz, no eres ninguna tonta, solo que el no logra verlo pero el tiene que entender que mi lugar es a tu lado.

- me da temor que un dia le creas a el, quien sabe que demonios te dijo para que recordaras ese episodio que fue tan amargo para los dos, he intentado por todos los medios posibles estar en paz pero el se niega, hasta que tu y yo no terminemos divorciados el no dejara de ponerte en mi contra.

- Cristina no tengo mitivos por los cuales dudar de ti, Daniel se equivoca contigo pero estoy seguro de que si te llegara a conocer...todo seria diferente.

- pero lamentablemente no es el caso, para el Monica es la esposa perfecta.

- lo era, pero ¿sabes porque? porque la vida a su lado seria...insignificante vacia, lo que yo sentia por ella estaba muy lejos de ser amor, si me hubiera casado con ella mi vida seria tan fria como la noche.

- pero a mi lado no has vivido la mejor, fui muy cruel contigo.- murmuro con dolor.- te juzgue mal, pense que eras el tipico hombre posesivo.

- y lo soy, pero solamente contigo.

Cristina sonrio y se sento a su lado nuevamente.

- aun recuerdo la noche que me invitaste a cenar.

- ¿cuando te negaste y tuve que practicamente obligarte?

- si lo dices de esa manera, entonces no te gusto como termino esa noche ¿no?

Federico sonrio al recordar.

- aparte de todos los golpes que reparti gracias a mi hermosa esposa, lo que mas me gusto fue como terminamos en el haciento de atras del auto.

Cristina se sonrojo y se recosto en su hombre.

- pobre hombre...recuerdo que no me dejaste volver a usar ese vestido.

- no ya bastante tuve esa noche, estuve apunto de vestirte como una monja.- murmuro sonriendo.

- eso no fue lo que dijiste esa noche...- murmuro picaramente.

- pueda que no...me encantaba como te quedaba ese vestido, se ajustaba tanto a tu cuerpo que...Dios me estaba volviendo loco.- busco su rostro y lo acaricio.- te hice el amor como un loco esa noche.

- y me encanto tanto que, decie volverte loco nuevamente.- la voz se le corto cuando sintio una de las manos de federico jugar en el nacimiento de sus pechos.

- pues en ese tiempo eras demasiado orgullosa como para admitirlo.

- si...

- y ¿ahora?

- no...

- ¿no?

- no ahora...te lo demostraría.


¿Porque Debo Quedarme?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora