Gracias a Niall [Larry Stylinson].

// Pensamientos.

» (Harry)

Oh Louis.

Oh Louis, cuando te ví ahí en el suelo, llorando por mi, mi corazón dejó de latir y se rompió en mil pedazos, mi alma se fue de mi cuerpo al no poder soportar tanto dolor, mi conciencia me obligo a regresar, a regresar a ti, tomar tu cuerpo entre mis brazos y protegernos mutuamente, tus alas cubriéndonos de las flechas y lastimándote con el filo de estas. Pero no puedo quedarme.

Bebé, se que tienes miedo, yo también lo siento, en cada rincón de mi cuerpo hay un pizca de temor a que algo suceda, a que una flecha nos mate a ambos. Deten tu llanto porque todo estará bien, me olvidarás, lo sé; no logre que fueras mío, pero conseguí que llorarás por mi partida, ¿no es eso lo que sucede al terminar una relación? Siento que tú y yo somos eso, una pareja despidiéndose, sin el título pero con el mismo dolor.

Oh Louis, di media vuelta y me aleje de ese preciado tesoro con el que tanto soñé por años, tú. Perdí el trofeo estando tan cerca de la meta, detuve mi andar cuando casi cruzaba la línea, cuando casi éramos algo, lo sé, estuvimos cerca a pesar de lo poco que sabíamos del otro, pero no nos dieron la oportunidad de continuar, de ser felices juntos.

Los demonios me obligaron a partir, y duele tanto como no tienes idea, pude tenerte, pude amarte, pude formar parte de tu vida, sin embargo arrebataron esa oportunidad con amenazas. Sé que tu madre solo quiere lo mejor para ti, porque tu mereces a alguien mejor, alguien que no esté roto, alguien que te de todo eso que necesites, una mujer que te brinde una familia, o una mujer simplemente, no un hombre como yo. Tú, cariño no eres gay y lo sabes, tú madre así lo ha decidido.

A pesar de que yo en ti ví más que eso, creí que comenzabas a sentir algo por mi, algo tan grande y bello como lo que yo siento por ti: amor, ¿alguna vez lo has experimentado? Yo cada día durante cuatro años, cada día al verte me sentía más y más enamorado, el sentimiento crecía con cada segundo que pasaba. Imagina cuanto amor tengo reservado para ti. Pero creo que no podre dartelo.

Oh Louis, me hubiera gustado tanto entregarte mi corazón, para que supieras por fin todo lo que siento por ti, para que supieras cuanto amor tengo para darte. Me hubiera gustado regalarte mi corazón, sin embargo me lo arrebatase del pecho, sí, todo es tuyo, todo es por ti y para ti, cada latido, cada suspiro, cada sueño mío es por ti. Ojalá un día puedas darme tu corazón también.

Cariño, hay un vacío en mí, algo que me indica que falta una pieza en el rompecabezas de mi vida, ese espacio que me dice lo que he perdido, a ti. Tú ocupabas ese lugar, tu mera presencia me hacía sentir completo, lleno de vida y felicidad, sin embargo, ahora que ya no te tengo me siento solo. No sabes lo feliz que me hacías, contigo todo estaba bien, a tu lado me encontraba seguro, junto a ti encontraba mi hogar.

Oh Louis, tú podías hacer salir al sol con una de tus sonrisas, atraer la lluvia con solo tus lágrimas, inventar música con tu risa, evocar dolor con tus sollozos, reflejar un arcoíris con tu felicidad, prender fuego con tu ira, provocar tormentas con tu tristeza, causar tornados con tu miedo, invitar lluvias de estrellas con tu emoción, obligar florecer girasoles con tu mirada, desmayar con tus besos, proteger con tus alas. Podías ser y hacer todo.

Ese es tu efecto en mi, eres todo.

Ese beso fue lo único que había necesitado toda mi vida, la última sensación que realmente necesitaba para decir que he hecho todo lo que quería, todo lo que debía, todo lo que podía. Desearía repetirlo mil veces más, en la noche o en el día, bajo el sol o la luna, cubiertos por gotas de lluvia o rayos de sol, con lágrimas o con sonrisas, en verano o en invierno, en las nubes o la tierra, tranquilo o acelerado. Contigo y sólo contigo, Lou.