XXXVI. Antecedentes

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Estaba derrumbado en el asqueroso piso del baño de la escuela, la sangre cubría su cara haciéndolo ver terriblemente aterrador, sentía que cada uno de sus huesos estaba roto, un punzante dolor golpeaba su cabeza, pero, ¿cómo terminó tan dañado?

Él no lo recuerda muy bien.

En la mañana parecía que el día sería perfecto, pues él tenía pintada una dolorosa sonrisa en ese momento. ¡Esperen! la cabeza de Harry se iluminó después de cerrar los ojos por el incontrolable dolor, recordó el porqué de su estado:

Maldito bastardo. ¡Su jodido novio lo había engañado, y el muy desgraciado se atrevió a propinarle una paliza después de sus reclamos.

Sus ojos verdes se cubrieron de lágrimas en cuanto lo vio, los dulces y rosados labios de su pareja eran devorados por los de una chica. Harry era tan joven y débil, jamás debió creer que ese sería el amor de su vida.

Trato de gritar su nombre, creía que la ira y el sentimiento de  traición era muy notoria en su voz y que podría dar una guerra reclamando lo que era suyo, sin embargo, un hilo roto fue lo único que logró pronunciar, ni siquiera él reconoció esa voz tan vulnerable ¿realmente era suya? Nunca se había sentido tan dañado.

El chico castaño lo miró, sus ojos celestes no mostraban ni una pizca de arrepentimiento. Harry sentía su pulso aumentar, mientras nacía un doloroso nudo en su garganta, la sonrisa socarrona de su chico fue lo que lo quebró, él lo estaba retando.

Corrió lo más rápido que pudo, intentando refugiarse en el baño, soñaba que el castaño llegaría en cualquier momento para disculparse, explicarle que solo fue un malentendido, Harry rogaba porque aquella escena solo fuera parte de su imaginación, o que pronto despertara en los brazos de él, recibiendo su apoyo, escuchando los débiles "todo está bien" que en susurros saldrían para consolarlo.

Esperó minutos, con los ojos cerrados tratando de escuchar más allá de lo que las paredes le permitían, intentando estar listo para cuando sus botas resonaran por los pasillos.

Las escuchaba, cada vez más fuerte y cerca provocando a su cuerpo temblar. El espantoso sonido de la puerta siendo abierta con una patada lo hizo darse cuenta de que nada bueno se aproximaba.

—Maldito marica, no sabes lo que me costará entrar a esta escuela de mierda por tus jodidos berrinches, vámonos de aquí de una puta vez —. Así era su novio, cada frase que decía estaba llena de malas palabras, no había otra manera. Pero Harry ya estaba acostumbrado a sus gritos, sabía que al final del día mostraría todo el amor que frente a los demás no podía -quería-, Harry no lo culpaba, había tenido una mala infancia y jamás había sido tratado con amor.

El rizado se levantó del suelo intentado secar sus lágrimas, a pesar de amarlo, en esa ocasión decidió no perdonarlo fácilmente, porque entonces volvería a hacerlo mil veces más, y no estaba dispuesto a eso.

—Mira Jonas, no sé quien se crea esa... chica para tocar a mi novio, pero tiene que dejar de hacerlo, así que ahora mismo iremos allá y le mostraremos que somos solo tú y  yo, ella se puede ir... Al carajo —Intentó no temblar ante la penetrante mirada de su novio, una extraña adrenalina recorrió su ser por usar palabras tan malas en su exigencia.

El rostro de Jonas fue iluminado por una sonrisa.

—¿Hablas en serio maricón? Pequeño, entre ella y tú sinceramente la joderia a ella, ¿la viste siquiera? Tú eres simplemente un juguete de quince años que encontré por ahí, y el muy mamón no ha podido despegarse de mi. ¡Y espera! Me llamaste tu novio, pero que hijo de perra, ni siquiera sé tu nombre.

—No tengo quince años... —Fue lo único que logró decir, él estaba mintiendo, Jonas sabía muy bien lo que eran—. Pero, cada noche...

—Eh, mamón... ¿No te has dado cuenta de lo ido que estoy para entonces? Deja de ser tan ridículo y vamos a mi apartamento, ahí podremos hablar y...

—¡No! Tienes que decirle a esa chica que no es nada para ti, es ella o yo.

Harry juraba que su mandíbula no estaba en su lugar, pero quizá sólo estaba exagerado, su novio no sería capaz de lastimarlo tan fuertemente.

La sonrisa de Jonas era encantadora siempre, ese fue el punto clave para que Harry cayera por él, pero justo en ese momento era lo más tétrico que había visto, notaba la satisfacción al lastimar en sus ojos. ¿Quién era él?

—¿De verdad crees que eres alguien para joderme? Tu necesitas una maldita lección ahora mismo.

Creía que si se repetía a sí mismo palabras tranquilizantes el dolor sería mínimo. Pero los puñetazos en su cuerpo no le daban espacio a su cabeza para tener consuelo. Sin embargo, el dolor era peor en el órgano que bombeaba sangre a su cuerpo, siempre se preguntó: ¿Por qué esa era la frase para cuando tenías un daño amoroso?

El corazón roto, es sólo una expresión que se usa comúnmente para referirse a un intenso dolor emocional causado por alguna perdida. Harry estaba perdiendo a Jonas y junto a él su corazón estaba rompiéndose poco a poco.

—¿Por qué actúas así? —atinó a decir, su labio había sido roto y un hilo de espesa sangre colgaba de ahí. Además le era imposible abrir uno de sus ojos, sentía un hormigueo en todo su rostro, y sabía que en cualquier momento cerraría los ojos para desconectase de todo lo que lo agobiaba.

— No eres suficiente, sólo mírate, eres un débil e ingenuo mocoso... —No pudo escuchar lo demás, de pronto se encontraba en un estado de calma, lejos de la realidad a la que se enfrentaba día a día.

Harry aprendió entonces lo difícil que era amar. Aprendió lo complicado que podría ser encontrar a alguien ideal. Desde ese momento supo que su visión de la vida daría un gran giro: ¿No era suficiente?¿Jonas lo trató así por su físico, o su mentalidad? Sólo quería cambiar, sólo quería recuperarlo.

Con el paso del tiempo todo se volvió más complicado para él, ¿la vida es realmente tan mala?

(...)

Me tome un descanso como 1D, pero yo sí regresé ahre (1 mes mrk)

Bien, esta es una vuelta al pasado, sólo para demostrarles que las palabras son demasiado dañinas, y afectan de una manera terrible el autoestima de las personas, esto es sólo el principio.

(También es para comunicarles que finalizando GAN [Gracias a Niall] subiré tan pronto como pueda la traducción de un OS súper genial jajaja y promocionar mi próxima fic que tendrá una trama como la de este capítulo, les advierto que si les gustan las relaciones perfectas y como cuentos de hadas, no piensen en leerla, porque en ella trataré situaciones muy abruptas [Infidelidades, drogadicción, prostitución, discriminación de todo tipo, maltrato físico y psicológico entre la pareja principal y más] Así que ya saben, pueden seguirme para enterarse de las novedades Jaja [FOLLOW MEEEEE] plis)

Espero que hayan podido reflexionar un poquito sobre esto, porque de verdad lo escribí imaginando cada escena, y tuvieron que pasar semanas para que me llegara la inspiración y valentía para hablar de estos temas, tómenlo con seriedad. Las relaciones tóxicas son de lo peor.

//Cuando llegues al infierno dile a mi impostor que Harry Styles le manda saludos.\\ ❤ Sí, me basé en ese H para la actitud de Jonas.

//Cuando estás enamorado, piensas que será como una película. Pero no es así como funciona \\  Frase que resume "The End" mi próximo proyecto e.e ❤

Bai.

Gracias a Niall [Larry Stylinson].Donde viven las historias. Descúbrelo ahora