NUESTRO DULCE ÁNGEL

CAPÍTULO 24

-Park, ya se está tramitando la demanda, envié al juzgado de familia la demanda por maltrato intrafamiliar; tienes claro que ahora ya no hay vuelta atrás ¿verdad? Después de esto Jungkook quedará solo, ¿estás dispuesto a hacerte cargo de él? Digo, Jimin; él sigue siendo un niño, estoy seguro que no tiene idea de que espera de la vida, necesita a alguien que le apoye, perderá completamente a su familia.- el rostro de Hoseok era serio, muy pocas veces le había visto así, desde que nos conocemos él junto a Yoongi han sido todo para mí, en algún momento pasé por lo mismo que Jungkook pasará, por supuesto que tengo claro que necesitará apoyo, para eso me tendrá a mí y a JiHyun, jamás sería capaz de dejarle, dios Jungkook es tan importante como lo es mi hijo, es parte de mi familia...

-Hoseok jamás le dejaré solo, Jungkook lo es todo para mí; tengo más que claro las consecuencias y lo difícil que será para él, no olvides que yo también perdí a mi familia en algún momento de la vida, pero siempre estuvieron ustedes conmigo, gracias a ti nunca me sentí solo, gracias a que te tuve conmigo perdí el miedo de fallarle a JiHyun. Te prometo que será lo mismo para Jungkook, no dejaré que se sienta solo, le daré más de lo que su familia le dio...- Hoseok se acercó a mi golpeando mi cabeza de manera suave.

-Tú recuperaste a tu familia, aunque te niegues a verlo ellos están arrepentidos, dales una oportunidad. No te crie rencoroso.- ambos nos reímos por aquellas últimas palabras, negué con mi cabeza golpeando su abdomen de manera suave.

-¿Debería llamarte Mamá y a Yoongi Papá?- me burlé.

-¡Dios, no!- se alejó rápidamente de mí, una mueca se formó en su rostro mientras me miraba.

-Cuidaré a Jungkook te lo prometo, voy muy enserio con él; nunca... nunca me había sentido de esta manera, Jungkook me hace distinto, me hace bien.- confesé mientras pasaba las manos por mi cabello un tanto nervioso.

-Lo sé, te conozco, lo supe desde que los vi juntos. Jungkook es perfecto para ti; ahora debo irme, te avisaré cuando mi demanda sea aceptada. Mándales saludos a tus niños.- dijo aquello para luego salir, suspiré rendido. Me acerqué a mi silla sentándome, saque mi celular sonriendo al ver a las dos personas que se encontraban en el.

Mi pecho se encogió de repente al seguir viéndoles, quería tenerles conmigo, no era lo mismo verles en una foto que poder abrazarles, les necesitaba. Había estado receloso de volver a la oficina, sentía pánico de dejarles solo, pero no podía seguir faltando. Moví mi cabeza intentando quitar aquella desagradable sensación para consentirme en mi trabajo, si me ponía a trabajar ahora quizá pueda volver temprano y estar con ellos más tiempo...

(...)

-¡Appi!- sonreí al sentir el grito de emoción de mi pequeño, el trabajo tomó un poco de más de tiempo del que creí, pero de igual forma conseguir llegar temprano a casa. Me incline abriendo mis brazos para atrapar a mi hijo entre mis brazos dejando millones de besos en su mejilla, sus moretones ya comenzaban a desaparecer algo que agradecía, no soportaba seguir viendo los ojos de culpabilidad por parte de Jungkook.

-Appi salió antes...- la voz de Jungkook sonó baja, pero podía ver en el brillo de sus ojos una pisca de emoción, sonreí entregándole una caja de dulces, ambos abrieron sus ojos debido a la sorpresa.

-Mis niños merecen comer dulces.- JiHyun de inmediato se bajó de mis brazos para correr donde Jungkook, negué con mi cabeza divertido. Jungkook se dirigió a la cocina junto a mi niño sacando las donas dejándolas en un plato junto con las medias lunas. Nos dirigimos a la sala nuevamente, ellos se sentaron juntos para comenzar a comer, Jungkook se había encargado de servirnos jugo por lo que mientras ellos comían yo me deleitaba viéndoles y bebiendo mi jugo de frutillas.