CAPÍTULO 7

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Mi boca formó una perfecta O.

– ¿Que? – dije – ¿Cómo que te vas a ir? ¡Si acabas de llegar!

Se había vuelto más cercano de lo que deseaba. Casi era como el hermano que nunca había tenido y a pesar de verlo poco le quería mucho.

– Lo sé, por eso te lo estoy diciendo – contestó – No se qué hacer.

– ¿Y qué quieres que elija yo por ti? – enarqué una ceja. Él me miró sin ninguna emoción en la cara – Mira... Como tu amiga que soy te digo que aceptes el trabajo. Una oportunidad así no se presenta todos los días – hice una pausa – Pero por otro lado no quiero que te vayas.

El miró al suelo.

– ¿Tú qué harías?

– No aceptaría. Tengo una familia – respondí.

– Si, pero... ¿y si no la tuvieras? – hizo una pausa – Imagínate. Vives en un bonito apartamento, sola, con el poder de hacer todo lo que se te antoje. Te llaman y te ofrecen algo así pero supone alejarte de toda la gente a la que quieres.

Fruncí los labios.

– Si fuera poco tiempo... – comencé diciendo pero Thomas se nos acercó con una cosa diferente en cada mano.

– Ya está.

Nos dirigimos a la caja, pagamos y salimos del local.

– Sería más de un año.

Quedé sin habla.

– ¿Cómo? ¿Tanto?

– Podría venir en Navidad – añadió.

Aun así no sería suficiente. Caminamos en silencio hasta llegar al edificio.

– Acéptalo – dije una vez que entramos en el ascensor y las puertas se cerraron – Al fin y al cabo no tienes hijos y puedes hacer una vida allí, tranquilamente. Nos podremos comunicar mediante Skype, como hicimos hasta ahora.

– Si, Lena, pero no es lo mismo – dijo – Nos separará un océano entero. Quiero ver a Val y Thomas en persona, no a través de una pantalla.

En ese momento se abrieron las puertas y Thomas salió disparado hacia la puerta de su casa.

– ¿Vas a contarlo? – pregunté mientras comenzábamos a caminar.

– De momento no. Lo haré cuando sepa lo que voy a hacer... – asentí – Da igual lo que decidas. Te apoyaré sea cual sea tu decisión.

Sonrió y me abrazó.

Entramos al apartamento como si nada y nos sentamos cada uno en su sitio.

– Oye, Emma – dije y esta volteó al verme – Val me habló de una reunión en el colegio para una excursión...

– Sí, es mañana – contestó – A las 5 pero no puedo ir. Trabajo hasta tarde.

– No te preocupes. Ya me enteraré por ti – dije tocándole un brazo. Ella sonrió en modo de agradecimiento.

Seguimos hablando hasta que llegó la hora de irse.

– Adiós Julieta. Ojalá mañana pueda ver tu hermosa belleza – dijo Thomas mientras le ponía la chaqueta a Val.

– Adiós Romeo. Lloraré toda la noche sin tu compañía – contestó la niña.

¿Qué coño? ¡Si solo tienen 4 años! Que se quieran mucho, vale, lo entiendo, pero que hablen así... ¡¿Qué les dieron?!

♥️

Todo el mundo al cine a ver la última película de la saga de películas de "the maze runner". Yo he tenido la suerte de verla y puedo decir que ha sido impresionante😍

Mi Mejor Error #MME2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora