Capitulo 12

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[Perspectiva de Lala].

¿Hay un noble que pidió mi mano?-Lala.

Si hija-Madre.

Cuando mi madre me dijo que un noble de alto linaje me había enviado una carta con mucho entusiasmo abrí esta, normalmente cuando un noble barón manda una carta a una noble es probable que sea una propuesta de matrimonio, no le puse ni atención al sello con el cual venia la carta sino que abrí esta y la leí rápidamente, pero lamentablemente cuando comencé a leer la carta me enteré que esta la había enviado un noble llamado Kurotsu Shel, la mayoría de los nobles ya conocían a ese noble por ser un mujeriego de primera, según la información que se divulgo entre la sociedad de nobles él tenía como veinte mujeres las cuales solo las utilizaba para calmar su lujuria, la mayoría de mujeres que él tenía eran jóvenes nobles de bajo linaje que amenazaba con el poder de su Casa.

No puede ser...-Lala.

Mi madre al escuchar mis palabras se acercó para preguntarme qué pasaba, sin decirle nada le entregué la carta y después de leerla en silencio por un momento ella me volteó a ver con mucha tristeza, ella me abrazo y comenzó a consolarme para que no llorara por lo que iba a pasar.

Esto tiene que ser un error, le enviare una carta declinando-Madre.

No, lo haré-Lala.

Me niego, si haces eso él-Madre.

Lo sé, pero no puedo negarme, si lo que dice en la carta es correcto terminaremos peor que plebeyos, no pienso dejar que todos sufran solo por mi culpa-Lala.

Pero hija, tiene que haber otra opción-Madre.

No la hay madre, tendré que hacerlo-Lala.

Madre me quedó observando con mucha tristeza y me abrazo fuertemente, pude sentir como algo húmedo bajo por mi cuello, obviamente ella estaba llorando, ella se separó de mí y cubriendo su rostro salió de mi habitación, seguí leyendo la carta y según esta su llegada seria dentro de cuatro días después de la llegada de la carta.

Tengo que hacer esto, de lo contrario todos sufrirán un destino horrible-Lala.

Dije esas palabras mientras sostenía la carta con ambas manos y antes de que me diera cuenta una lágrima calló en la carta.

Pero, no quiero eso, no me quiero convertir en su juguete, no quiero ese futuro para mí-Lala.

Sin poder contenerlo más deje salir mis lágrimas.

(Por favor, que alguien me salve).

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Ya solo quedaban tres días para la llegada de Kurotsu, todos en la mansión con la excepción de mi hermano menor Kasumi sabíamos de la noticia, a él no le contamos nada ya que no tenía sentido hacerlo siendo él la decepción de la familia.

Cuando padre y mis hermanos se dieron cuenta de la noticia se enojaron mucho, ellos incluso tenían ganas de enfrentar a Kurotsu en un duelo por mi mano, pero para su mala suerte Kurotsu no era nada débil, se había dicho desde ya hace mucho tiempo que Kurotsu era un guerrero prodigio siendo este imposible de vencer para personas de nuestro nivel.

El primer día Kasumi nos miró un poco extraño, pero no le puso mucha atención, el segundo día este incluso intento entablar una conversación conmigo para preguntar acerca del tema, obviamente lo ignore por completo.

Durante el tercer día padre salió urgentemente hacia el reino donde vivía Kurotsu para tratar de ofrecer dinero o cualquier otra cosa a cambio en vez de mi mano.

He Reencarnado y Estoy ¡OP!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora