He Reencarnado y Estoy ¡OP!

Capitulo 6

(Por fin mi primera batalla contra monstruos).

Me encontraba parado en una pradera donde no se podía escuchar nada más que el canto de algunas aves y algunos insectos, me encontraba ahí para hacer mi primer combate contra monstruos, aunque anteriormente ya había aniquilado algunos Goblins esos los había eliminado con magia a distancia y por lo tanto solo lo había hecho porque me estorbaban mientras quería entrenar mis habilidades.

Pero ahora era diferente ya que en esa ocasión el propósito era aprender a combatir usando una espada, en mi vida anterior nunca había usado una espada, lo más cerca a esta había sido un machete que tenía un abuelo en su casa, recuerdo que en esa ocasión termine dañándome mis manos porque no estaba acostumbrado a usarlo.

Como no tenía edad suficiente como para comprar una espada decidí hacer una por mí mismo, mientras buscaba algunos libros interesantes en la biblioteca de la mansión me topé con uno que trataba acerca de los minerales y su consistencia, con la ayuda de ese libro pude lograr replicar exactamente los minerales más comunes, entre ellos el Hierro, Bronce, Cobre, Oro, Oro Blanco y Mithril, lamentablemente el libro no tenía más conocimiento acerca de más minerales para mi mala suerte.

Para la creación de mi primera espada decidí que fuera de Mithril ya que anteriormente cree esferas de todos los minerales y estos se destruyeron fácilmente al presionarlos con mi mano siendo el Mithril el único que resistió solo un poco más que los otros, con el material decidido me faltaba el diseño el cual no le tome mucha importancia y simplemente copié el diseño de una de las espadas de los guardia solo que a diferencia de la espada de los guardias decidí hacer la mía una espada de dos manos con doble filo.

El tamaño de dicha espada era de unos dos metros aproximadamente, sinceramente pensé que era una exageración cuando la miré, pero todo cambia al momento que decidí blandirla, cuando agarre la espada me sorprendí por lo liviana que se sentía al principio pensé que era por el mineral que estaba creada así que decidí dejar caer esta al suelo y para mi sorpresa esta se hundió un poco en la tierra al caer, agarre esta nuevamente y se sentía igual de liviana, obviamente no hacía falta ser un genio para saber que podía levantar la espada fácilmente por mis absurdas Estadísticas.

Sin ponerle más atención al asunto decidí caminar hacia el lugar donde se iba llevar a cabo mi experimento sobre el combate con espadas, el bosque. Al mirar ese bosque se me vino el recuerdo de cuando había llegado al bosque por primera vez.

Mientras iba volando por los aires mire a la lejanía como un pequeño duendecillo de color verde entraba al bosque, la curiosidad me invadió y por ello decidí bajar hasta quedar en una pradera un poco pequeña, me quede observando el lugar por un momento pero después recordé a lo que había venido y por lo tanto comencé a adentrarme al bosque pero me detuve rápidamente ya que sentía algo raro en el cuerpo, se sentía como si alguien estaba cerca pero no podía verlo, era una sensación un poco extraña; me detuve y me puse a intentar averiguar que era esa sensación, estuve mirando mi Estado para ver si tenía alguna anormalidad pero no había nada, no tenía ni idea de que era eso hasta que escuche un sonido conocido.

TIN.

[Habilidad Percepción adquirida].

No perdí más tiempo y pedí una descripción de la habilidad instantáneamente, según la descripción esa habilidad me permitía sentir las presencias de seres vivos a un cierto rango a mí alrededor, en pocas palabras es un radar de seres vivos, era una habilidad muy útil desde mi punto de vista y para mejorar resulto que la habilidad era pasiva.

Sentía nostalgia al recordar el primer día que llegue ahí, salí de mis pensamientos y me centre en lo que andaba haciendo, buscando un oponente para batallar.